BAR RESTAURANTE EL PARAISO

Es un lugar de parada obligatoria en mi viaje de vuelta de Almería, el trato es extraordinario, los desayunos de muerte y las tapas buenísimas.

Muy malas personas. Llevamos un año llendo y parando todos los sábados a desayunar. Encargamos por teléfono 4 decimos de lotería y llegamos y se ríen en nuestra cara. No volveremos más!

Paso por aquí de vez en cuando y la verdad, unca habia parado a comer, aunque siempre pensé que seria buen restaurante.intuición diria yo.
Bueno, la verdad, hemos cenado genial, la comida muy buena, pero el trato y atención del camarero, tiene sus 5 estrellas. Nos a atendido educadamente y con elegancia.
Volveremos a repetir sin duda.
Mi hija y yo nos vamos encantados.
Seguid así!

Comida normal, el aceite q ponen para q lo pruebes.está muy bueno. Del café ya no digo q este bueno es pésimo.agua kn un poko de color.

Un buen sitio pero gente poco profesional, el chico de la barra enseñando los calzoncillos mientras consumes en barra, con una caraja impresionante, la chica más bajita es la única que se le ve interés en el trabajo y la que mejor atiende, este bar lo recomiendo por que la cocina es buena pero por los dependientes no,

Hace un par de días paramos de vuelta para cenar y la realidad es que es la primera vez en mi vida en la que me he sentido ignorado y casi como si no existiera.

Llegamos alrededor de las 10 y la primera en la frente: 15 minutos hasta que llamamos a un camarero y le decimos que estamos esperando. Retira las cosas de los anteriores y ni siquiera toma nota ni vuelve a acercarse para hacerlo.

10 minutos después, otra camarera se acerca para ver si queríamos algo y le pedimos las bebidas y la carta. Pidiendo también un poco de ensaladilla rusa.

Vienen las bebidas pero ni la ensaladilla ni la carta. Se habrán perdido por el camino.

Esperando, decidimos ir a por la carta y después de saber lo que pedir, no hay manera de que un camarero nos atienda. Y la camarera está totalmente desaparecida.

Tras un buen rato, decidimos irnos. Me acerco a la barra y el camarero que nos ha ignorado toda la parada me pregunta si quiero algo. Tras decirle que llevo prisa y que no nos atienden, que nos de la cuenta.

Ni interés en arreglar la situación, ni enmendar sus desmanes. Se nota que el negocio no es suyo y no le importa que puede significar perder unos clientes que pueden parar varias veces al año en su viajes.

No volveremos.

Por cierto, la camarera estaba atendiendo otra zona del bar. Parece que no tenían muy claro cada uno los sitios y las mesas que atender. Ya eran las 11.

Todo rico. No dejéis de comprar el aceite Virgen extra que venden. Espectacular. Increíble de bueno

Todo perfecto.
Aconsejable ir a menú del día. Cuesta la mitad más barato que a la carta y comes lo típico de la zona igualmente.

Acabamos de estar, y después de esperar una mesa de 6 personas más de 15 min, nos dicen que no hay tapas y que si queremos algo de comer para los niños q van a tardar más de 45 min, que es lo que hay. En la vida me he tenido que levantar de un bar e irme por la mala atención. Experiencia de lo peor y desagradable el trato, ni voy a ir más ni lo recomiendo. Pongo 1 estrella xq no puedo ponerle menos.

Tomamos unas tapas y he de decir que el montadito de lomo me llevó a mi infancia. La tapa de migas de pan de 10, nada pesadas ni aceitosas y el precio barato no, lo siguiente. Un lugar de obligada parada. La carne a la brasa muy muy muy buena. Y la atención súper amable.

Todo muy bien, comida fabulosa, trato esplendido, pero el aire acondicionado como si fuera invierno y con levante, recomendable chaqueta en verano

Muy buen sitio calidad precio. Ideal si estas de pasada por la zona y quieres comer de menu por 10 euros o a la carta un buen cordero. La especialidad sin duda es el cordero al ajillo.

Un gran restaurante en el que hacer una parada de camino. La comida de muy buena calidad, con productos muy frescos. La relación calidad-precio inmejorable y una gran variedad de platos en la carta-menú, todos elaborados artesanalmente. El trato de los camareros y dueños del restaurante muy cercano y atento.

Magnífico restaurante. Parada del viajero. Buena acogida. Nuestra parada fue un acierto. Yo tomé una sopa de picadillo, perfectamente elaborada y posteriormente callos con garbanzos. Buenísimos. Mi acompañante disfrutó de un secreto. Carne muy agradable al sabor. Me gustó mucho la comida y también el café. No lo he dicho antes, pero soy muy cafetero. Recomiendo encarecidamente este establecimiento. Calidad garantizada.

Me encanta la comida. Hay un menú estupendo de lunes a viernes por 10€ y fines de semana por 15€. Muy rico!

La comida esta buena, precio razonable pero la camarera tuvo una mala actuación al pedirme y traerme el segundo sin haber terminado el primero y se escudo diciendo que como el.primero era frio no pasaba nada, no le dije nada por no molestarme pero no me.parecio bien. Menu a 10 euros y el camarero atendio bien y muy agradable con mi hijo.

Menú diario muy bueno por 10.euros y con muchas variedad de elección. El salmorejo y el lomo de orza muy recomendables. El servicio amable y eficaz.

Hay que tener paciencia con el servicio, pero las tostadas están muy ricas y el aceite es de calidad insuperable.

Pides las cosas y te las traen cuando terminan de hablar con sus amigos.
La comida buena y buenas porciones aunque la bebida de lata no muy fría, ambiente amigable y de paso.
Creo que no me importaría volver.

Paramos de vuelta de vacaciones.servicio un poco lento.y la comida no estaba mal.pero un poco escasa

Magnifico lugar para hacer un alto en el camino a tomar un buen café, después de probar sus especialidades; servidas con mucho agrado.

Recientemente reformado, un buen lugar para tomarse un café, o una cerveza (mejor sin alcohol), cuando vas en el camino a Granada, o Córdoba, o donde vayas.
Ahora lo llevan unos chicos jóvenes, y bien, servicio rápido y atentos. Recuerdo los platazos de jamón serrano con aceite y tomate para desayunar y reponer fuerzas para el camino. Los soplillos y otros dulces que venden, etc. Recomendable

Bueno pues comento mi experiencia.bajo Almeria todos los años en agosto y toda mi familia para siempre, el año pasado ya no fue bueno, este ya es para reseña.
No tiene nada que ver la comida con la comida que ponían antes.la educación de alguna camarera es de estoy comiendo un chicle.
El año que viene tengo claro después de 2 años de mala y muy mala experiencia que no parare a comer después de 30 años haciéndolo.

Entorno inmejorable. La piscina climatizada especial, carga las pilas el baño en agua templada, mientras contemplas la sierra. El restaurante está muy bien, el menú cuando contratas media pensión está muy rico. Y el personal muy atento profesional. Muy cerca de Arroyo Frío y de puntos de salidas de rutas.

Es la segunda vez que paramos allí, en un viaje. La atención de los camareros brilla por su ausencia, recogen mesas que están vacías y no atienden las ocupadas ni las limpian. Tuve que pedir en la barra hasta dos veces y me sirvieron equivocadas las tostadas, que por cierto te haces tu mismo.
Hace falta un poco más de nervio y atención al cliente.
Mientras lo consiguen, probaré otros sitios.

Las tapas y el precio son muy correctos, a veces los camareros no estan todo lo dispuestos y simpáticos que deberían estar pero en general bastante bien, otra paradita obligatoria por la zona para la tapa antes de comer.