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Cuidado que si viene el coleguita borracho de turno lo cuelan intentando que no te des cuenta y cuando se lo dices empiezan a darte largas (estábamos apuntadas en lista y eramos las siguientes)
A mí particularmente me encantó desde que fui la primera vez. Queda a 3 kilómetros de mi casa y siempre que he ido ha sido sin reserva. Cierto es que si es para un fin de semana hay que reservar para tener la seguridad de llegar y sentarte, ya que muy probablemente no hayan mesas disponibles. Tiene una terraza grande y además le pega el solecito. Tiene dos parques infantiles a cada lado por si vas con niños y quieres tomarte un café. El alioli casero, las croquetas de muerte lenta, siempre me pido las de rabo de toro, pero tienen variedad, esta vez probé las de gambón, por accidente jijiji, se confundieron, igualmente estaban deliciosas y luego me las cambiaron sin problema. Los calamares fritos súper. Y las tortillas de camarón fritas ni se diga. De precio calidad, estoy conforme. Te atienden chavales jovencillos, muy amables y el servicio rápido. Seguiremos repitiendo. La carta es variadita. Camperos, etc.
Servicio pésimo una de las camareras a cada instante sentada con clientes que conoce le hemos pedido la cuenta y ni nos la ha traído y encima sentada con otros clientes bebiendo cerveza de vergüenza vaya! Comida buena pero vaya personal más malo
Buenos platos buenos espetos, buena atención y precios adecuados, pero los baños e instalaciones interiores dejan muchísimo que desear.
Los 2 cuartos de baño son verdaderamente una vergüenza y tercermundista.
Una lástima que teniendo buena carta, buena brasa, atención y buenos platos la sensación en utilizar las instalaciones interiores y demás dejan muchísimo que desear para un cliente.
Una persona mayor tendría prácticamente imposible poder utilizar estas dependencias como le pasó a mi suegro.
Deben cuidar y mejorar estas cosas. Crítica constructiva
Ha cambiado de cuando estaba el otro dueño en la atención al cliente y las reservas, por lo demás bien espero qué sea por la adaptación a mí siempre me ha encanto su trato familiar y él no favoritismo entre clientes.
Es un poco agobiante tener a la gente mirándote mientras espera mesa. Esta muy bien de precio y tiene muchos clientes, tantos que desbordan al personal que atiende.
Me han echado a las 22: 00 con pocas palabras, NO TENEMOS COMIDA, como? Después de que un camarero nos siente en mesa, se nos acerca otro y nos dice eso. Me habían hablado muy bien, pero con esa actuación deja mucho que desear.
Buen sitio para comer o cenar. Tiene carne, pescado y carne a la brasa y en verano tiene espetos de sardina. Tienes varias opciones para elegir que comer. Porque tambien tiene camperos. Sitio muy recomendable
Buenas noches voy a menudo a comer allí sobre todo pescado pero en general se come bien y son muy agradables todo y eso también hay que tenerlo en cuenta
Buena comida variada. La ensaladilla rusa muy buena, la carne a la parrilla jugosa, la rosada, las puntillitas y el adobo muy bueno. Calidad-precio correcto. Se esta muy bien al aire libre en la terraza. Recomendable.
Carne a la brasa espectacular, servicio inmejorable y pescados en raciones abundantes y a buen precio, como un chiringuito pero sin arena ni playa, ya que sus espetos en verano son los mejores.
Son pésimos a la hora de atender al teléfono y le preguntas si tiene raciones de paella de arroz y te cogen y te cuelgan directamente después de haber estado cerca de 20 minutos llamando no te preguntas aire coche que le puedo ofrecer no hasta luego caballero pon no te facilitan nada su atención telefónica es nula
Atención pésima servicio peor no puede ser, la comida del montón no es para tirar cohetes y de precio alto para lo que te dan, muy mala organización llevan los platos sin saber a qué mesa van de mesa en mesa, le pides a un camarero si se puede llamar camarero que hoy en día todos lo son pero en realidad la culpa no la tienen ellos sino el encargado que a mi punto de vista creo que tiene que aprender para poder enseñar y organizar pero bueno ay va.para servir al público ay que ser agradable correcto y saber atender a las personas pero repito la culpa la tiene el encargado por no saber ni cojer una comanda, le pides una cosa y te traen otra, le pides una guarnición y te traen otra, le pides una bebida y no te la traen, al rato se la pides a otro camarero y tampoco al final tienes que ir a la barra y pedirla y así todo fatal nefasto, la segunda y última vez, la primera me dije bueno iré otra vez pero ya me a quedado claro no me merece la pena ir como mejor en otro sitio, y mejor atendido gracias