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Probablemente la peor sala de la ciudad de Almería. Me han denegado el acceso libre estando en la cola y dejando entrar aleatoriamente a un buen número de personas que podríamos catalogar sin estupefacción como "fauna nocturna". Nos han parado ¿por qué? porque mi marido es marroquí. Si marroquí. Un marroquí de clase alta, con carrera 3 másteres, 5 idiomas y mucho dinero, pero marroquí. Entendería que parasen por protocolo a aquellas personas que bajo los efectos de la euforia o el alcohol se portasen de manera dudosa en la fila india concebida para entrar en el lugar. Absolutamente distinta nuestra actitud, educada, calmada, tranquila ¿por qué? porque sabemos que a determinados porteros un acento extranjero les supone una automática locura de autoridad. Nosotros en silencio aceptamos el desorden sociointelectual de que ante nuestros 37 años no nos permitan el ingreso en una propiedad privada de dudoso gusto. Pero denunciamos públicamente un atentado al honor, la dignidad y la lógica amparados en la homofobia y el racismo. Nosotros también somos España, y eso los porteros no pueden detenerlo. Os doy un 0 porque como empresa de ocio nocturno os mereceís la desaprobación y la ruina.
Dais vergüenza y haceis un feo a Almería como capital. Reiros mientras leeís esto, el karma os tocará a la puerta algún día.
Era un lugar estupendo. Ahora por ir con una vestimenta diferente, o no ir igual a los demás no te dejan acceder los domingos. Según ellos, el domingo a que ir “ más arreglado”. En fin, ya no lo recomiendo