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Suelo ir súper agusto al de plaza vieja, por lo que probamos en el del parque de la luz.todo un despropósito: las sillas medio tuertas y cojas, un camarero que el pobre no daba para toda la terraza (era jueves y se llenó) nos sentamos y no venían a tomar nota con lo que terminamos aburridos yendo a la barra a pedir y por si fuera poco, mi hermana tuvo que ir a pedir la balleta y limpiar la mesa de los anteriores.pedimos caracoles, pequeñísimos y en un vaso estrecho y hondo de los del café de la mañana.pedimos montaditos y quien pidió la hamburguesa, ceno solo porque habíamos terminado todos y lo suyo no llegaba.no vuelvo! Fatal!
Está bien que el ocio crezca en Huelva y la gente se divierta, pero, porque siempre lo hay no se puede descansar con los clientes, usuarios se creen que están en una feria con cante, palmas gritos a altas horas y es un barrio tb de currantes no solo estudiantes pido respeto gracias me refiero a gallo parque de la luz
Voy a resumir todo lo que podría decir del Gallo negro Aljaraque diciendo que vaya circo y descontrol a la vez, con lo que me gustaba disfrutar del sitio con el antiguo dueño, desde luego para una cerveza y tardía vale.pero para cenar como siempre hice casi cada fin de semana en los Lunares ni mucho menos! Falta profesionalidad por los 4 costados en todos los aspectos!
Con respecto calidad precio es muy escaso un montadito de solo jamón cocido a 3,50€ me parece exagerado cuando al bar de al lado me tomo un café con leche con media de jamón con tomate y aceite 3,20 €.
Nada del otro mundo, terracita de paso para tomar unas cervezas y picar algo. Deben mejorar la atención los camareros y agradar más al público, no tenían muchas cosas de la carta, ni pinchos, ni patatas, ni tortilla. Los montaditos lo sirvieron sin patatas lo cual lo mencioné a ambos camareros con la respuesta de que se habían terminado, eso sí, bolsas de patatas si habían y el precio del montadito seguía siendo el mismo, los cartuchos de fritos y otros productos me parecen caro para este tipo de bar, hay bares y restaurantes por la zona que te sirven en salón, con presencia, buen producto y por esos precios
He estado hay, sillas de feria, apenas desinfectan, aglomeración de personas, más bien juventud, medidas COVID, se las pasan por el forro, el día 24 (nochebuena) el de la plaza de las monjas impresionante de afluencia, propio para subir el COVID, después cerrarán todos por igual, total ese día ya hicieron el agosto, lamentablemente, hay hosteleros que les da igual mientras sus cajas suban, lo malo que el golpe después es más duro si vamos para atrás, suerte, un lugar que no visitaré jamás.
Un bar con mucha esencia. Los chicharrones y el queso estaba exquisito. Fue recomendación de Rafa que además fue encantador con nosotros. ¡Más gente y bares así!
La versión de las papas arrugadas con mojo picón, es maliiiiiisima, le recomiendo al cocinero que eche un vistazo en you tube para que vea como se hace
Excelente. Me encanta. Productos caseros a muy buen precio, buenas cantidades pero lo mejor de todo es la profesionalidad, la simpatía y el trato cercano
Hace un par de noches fui con mi pareja y otros 2 amigos a tomar algo aquí. Las cervezas me parece que están a buen precio, el problema vino con la comida. No teníamos mucha hambre y decidimos pedirnos un papelón de atún al ajillo, que como se puede ver en la pizarra vale 2’5/3€. Cuando llegó la cuenta vimos que nos había cobrado 6€ y al preguntarle al camarero dijo que había sido fallo suyo, que había pensado que como éramos 4 queríamos algo más y nos puso media ración (como se puede ver en la pizarra, no viene nada de media ración ni de ración entera). En ningún momento se nos dijo que era media ración, nos dejaron el papelón en la mesa y listo, no había forma de saber que nos estaban poniendo más de lo que habíamos pedido. En estos casos el camarero suele asumir su culpa y te cobra lo que habías pedido aunque te haya puesto más. En este caso se disculpó, pero dijo que me había puesto media ración y tenía que pagar la media ración aunque yo no la hubiera pedido. La pagué, pero la primera impresión fue malísima por culpa de esto.
Cerveza fresquita, terraza agradable, tapitas ricas y papel de estraza. Y todo ello con un rato inmejorable, ¿Qué más se puede pedir? (La compañía y yo tengo suerte ;-)
La comida es barata y está buena, pero teniendo más de 10 mesas, había un único camarero que ponía las bebidas y atendía las mesas, por lo que tardamos bastante en pedir.
Un ambiente juvenil como y de todas las edades, toda clase de cervezas y la comida estupenda las tapas que tienen, situado en la parmera en el centro y otro gallo negro situado en la plaza antigua un sitio para reunirse con los amigos o familia estupendo, el dueño es estupendo te da confianza y los encargados muy educado muy bien todo ok
Tengo mala experiencia de este establecimiento. Ya que mi hija estuvo allí cenando y tuvo que acudir a urgencias por una intoxicación, muchos ahumados y cocina de caterings, ellos no cocinan nada prácticamente.
El servício perfecto, la comida fabulosa, la terraza súper agradable, la única pega, que los vasos en esta ocasión estaban con marcas del lavavajillas aunque no sucios, por lo demás perfecto.
La cocina cierra a las 16h y a las 15: 30h ni siquiera te ponen una cerveza o una tapa fría. Trato demasiado "familiar" por parte de un camarero con clientes a los que ni siquiera conoce. Nada recomendable habiendo tantos sitios buenos ya en Huelva
Carta pequeña pero de calidad. Buen sitio para tapear. El servicio muy amable pero muy lento. Hasta q te traen lo q pides te has tomado una o dos cervezas. Si fuera un servicio más rápido les pondría otra estrella