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Gloria, Samsa y yo no tenemos nada más que palabras de agradecimiento por vuestro trato con nosotros y por vuestra comida, gracias por el detalle en nuestro aniversario, NATI, Rocío volveremos pronto, mil gracias
Genial! No es la primera vez que voy, pero sigue siendo de lo mejor de Dúrcal! Pedimos el ceviche, solomillo y tequeños y todo muy rico. Por supuesto, el servicio ha sido excepcional. Me gustaría hacer hincapié en la atención de Pablo:)
Magnífico sitio para desconectar y comer cualquier cosa que recomiende su cocinera! Nos encantó todo lo que preparó, un trato muy bueno y agradable, y sin sustos en la cuenta! Volveremos!
La atención es estupenda, la comida excelente y el entorno precioso. Es un lugar estupendo para comer y disfrutar de la tranquilidad. Voy con frecuencia y cada día me sorprende la delicadeza con que tratan los productos y como van variando la carta. Tienen cervezas artesanales y buenos vinos, y merece la pena dejar sitio para un postre, son excelentes.
Ya he estado unas cuantas veces y, cómo siempre, una maravilla. Si quieres disfrutar de buena comida con tranquilidad en un entorno fabuloso este es tu sitio. El otro día, mientras atravesaba Granada a 38 grados a las 9 de la noche, al llegar al restaurante estábamos a 28. Cena en manga larga. Un placer
La comida superó muestras expectativas, todo un descubrimiento del cual recomiendo totalmente, buen hambiente, buen servicio todo reúne los requisitos para el buen servicio.mil gracias por todo. Volveremos
Restaurante escondido ente árboles junto al río y con vistas al puente de lata Imprescindible reservar ya que si no, no vas a coger sitio porque es pequeño. El Bacalao dorado estaba buenísimo, del Solomillo no puedo decir lo mismo ya que me pareció duro y con mucha grasa y nervios Tardaron más de 1 hora en servirnos, que habrá a quien no le importe, pero hay que tenerlo en cuenta 4 adultos con 4 platos y bebidas, sin postre ni café 111€ Mejorable la rapidez del servicio
Un servicio bueno, atento y muy simpático. Se paran a hablar contigo y luego, la cocinera, sale para ver cómo habéis comido y si os ha gustado. Todo estaba muy bueno y muy importante, casero.
Restaurante muy familiar, bastante apartado del centro de la ciudad, está situado al lado del río y cuenta con un buen aparcamiento de tierra. El interior es bastante pequeño, pero cumplen todas las medidas anticovid y el ambiente es bastante hogareño, la parte exterior es bastante más grande, por lo que en primavera/verano se está muy cómodo.
La carta es bastante reducida, aunque siempre cuentan con platos fuera de carta para complementarla, el servicio que ofrecen las camareras es muy bueno y no dudan en recomendarte cualquier plato que quizás te pueda gustar más.
Los platos son de buena calidad y están bien elaborados, aunque quizás los entrantes son bastante pequeños (según la cantidad de personas que haya en mesa). Te sirven tapa con la primera bebida, en nuestro caso un cacito con cocido, bastante escaso también. La carne de ternera que me sirvieron estaba poco hecha (como yo pedí) pero no se podía ni cortar y algunos trozos ni masticar.
Para mi gusto el precio es elevado para el nivel de cocina que ofrece.
Buscando sitios con encanto y de interior nos decantamos por elegir este peculiar negocio abrumados por las buenas críticas de las personas y el encanto de las fotos que podíamos ver. Si es verdad que es un sitio que no se ve fácilmente, no lo hubiera visto ni de casualidad. Decir que se puede llegar perfectamente en coche y cuenta con aparcamiento privado para sus clientes. Está en una zona increíble, rodeada de árboles. Muy tranquila, si hace buen día, comer suculentos manjares rodeados de árboles hacen de la velada un día inolvidable. Pero también se puede meter un dentro y deleitarse con un lugar muy acogedor donde se cuidan muchos los detalles y está todo precioso. El personal es perfecto, estás atendido en todo momento pero sin sentir esa presión o agobio que aveces peca la gente por querer complacer a sus clientes. Y ahora le toca el turno a la comida, que la verdad es que no tengo palabras para describir lo que puedes llegar a comer en este Chambao. Mejor que vayas y lo pruebes. Yo volveré a ir. Incluso simplemente a tomar un café y una torrija a su manera. Elijáis lo que elijáis, acertareis. Me alegro de haber conocido este bonito Chambao. Un espectáculo.
Lugar inmejorable, situado a la sombra de unos nogales, que en temporada dan unas nueces buenísimas, Nati y Rocio solo 5 minutos de conversación y te hacen sentir como en casa, la comida es de otro nivel. Corvina Limeña con salsa de choclo. Cochinillo confitado al oloroso Pan Bao relleno de presa ibérica. Y de postre una interpretación de Torrija con helado de turrón.
Lugar encantador con excelente trato del personal y la comida riquisima y original, disfrutamos mucho de sus sabores. Sin duda un restaurante para recomendar.
El sitio acogedor y lugar bonito, la comida buena pero el trato dejó que desear, sobre todo el servicio, tardaron demasiado en servir (unas 2 horas) se disculparon y nos invitaron al postre pero deberían mejorar eso porque creo que no es un caso aislado sino que les suele pasar
Lugar increíble, hemos ido de casualidad y nos han sorprendido, precios baratos para la calidad que tienen, comida super buena, se nota que utilizan ingredientes de primera y muy bien cocinados. Trato de los empleados un 10, incluso la camarera ayudando abrir la puerta y cortina tanto a la entrada como a la salida, ya que llevamos carrito de bebé. Tienen lugar amplio para aparcar. Aparte están en un sitio rodeado de naturaleza que te trasmite relajación nada más llegar. Lastima no haber sacado fotos de los platos, Nos veremos muy pronto.
Íbamos muy ilusionados con el lugar, a celebrar un cumpleaños, pero nos hemos llevado una desilusión. Han tardado más de dos horas en traernos la comida, al parecer por un problema en cocina. Vale, lo comentas a la clientela a tiempo y ofreces soluciones; no puedes tener a 12 personas (en nuestro caso, pero había muchas más) 2 horas y media comiéndose el pan y a base de bebidas, sin informar de esas incidencias y luego encogerte de hombros. La solución que nos han ofrecido, postres gratis y café. Hasta aquí dices, bueno, pago mi cuenta y una mala experiencia. Pero he decidido poner una estrella porque además pienso que la calidad/cantidad/precio también es muy mala. Platos flojos y cocinados sin mucho cariño (a mi parecer) con escasas cantidades. Y los postres están mejor en Mc Donalds. Dicho esto no lo recomiendo en absoluto y no volveré.
No lo recomiendo, en cualquier pueblo de Graná hay restaurantes con naturaleza y buena comida. Lo único que me gustó de este fue la compañía con la que ya venía.
Lugar encantador en medio de la naturaleza. Música en directo y camareras muy agradables. Un rinconcito con mucha magia y vibraciones positivas. Comida casera, original y sabrosa
Muy mejorable todo, pero sobre todo mirense el trato a los clientes por parte de la dirección, hay que ser más amable y educado cuando tienes un negocio cara al publico no solo es cocinar, el TRATO marca la diferencia y en este aspecto estás suspensa. Y si, el lugar es encantador lleve quien lleve este negocio eso es cuestión de la naturaleza y la ubicación que tiene. Aún así suerte.
Nada de nada, la sugerencia, lasaña de bacalao (no encontré el bacalao) el entrecotte de ternera parecía una tapa, todo frío y una mezcla de patatas con sandía horrible, sin mencionar el aperitivo que era salmorejo de frutos rojos incomible. 40€ con dos cervezas. Nos vamos a un bar de pueblo normal y corriente, no volvemos
Es la tercera vez que voy, eso creo que ya dice mucho. Una carta muy completa que se redondea con los platos fuera de carta. El sitio es una pasada, respeta todas las medidas Covid, el personal más profesional que me ha atendido en mi vida. Ideal para ir en familia, con perros y en pareja. Todo está siempre buenísimo y son un amor de gente, me da rabia no vivir aquí por no poder ir más a menudo.
Sitio muy agradable, con un excelente servicio, menú muy rico, original y bien elaborado. Buena materia prima, platos suculentos, buena presentación y buena relación calidad precio.
No pongo 0 estrellas porque no es posible. Es una estafa, 17€ de rabo de toro por 2 trozos que eran prácticamente hueso, una tapa tiene más presencia. Un pulpo 19 €. Idem. Me parece una pasada de precios.si al menos tuvieran una calidad de 10 pues aún se pagan. Pero ni calidad ni cantidad. No volveré a ir ni lo recomendaré. Por no decir la tardanza de la comida, cuando no estaba lleno ni mucho menos. Si queréis comer mal, caro y tarde es el sitio. Lo siento.
El sitio muy bueno, la comida muy buena pero lentos a más no poder dos horas para el primer plato, eso sí la comida, finalizada al cabo de tres horas, muy buena
Un sitio muy agradable, a las vera del rio Dúrcal y con aparcamientos para poder llegar el coche con comodidad. La carta no es muy extensa pero la comida está muy rica.
Hace muchos años éste era un lugar encantador al que íbamos a comer después de pasear por la zona. Todo ha cambiado, ya no es la comida casera de antes, ahora es rara y cara, no es lo que esperas encontrar en un merendero en mitad del campo. Además antes se podía ir sin más y ahora es imposible si no tienes reserva, ni siquiera para tomar una tapa. No me ha gustado nada
Sitio muy agradable para desconectar, para ir sin prisas y no estresarte, no es un sitio donde comes en una hora y te vas. Necesitan su tiempo pero merece la pena, la comida muy buena y fuera de lo común y el personal muy agradable.
Espectacular. La carta es extraordinaria y de una calidad excelente en la materia prima. El trato súper amable y la ubicación perfecta para desconectar.
Lugar recondito pero lleno de encanto. Se come de lujo y sus dueñas son unas increibles profesionales. Atentas y diligentes. Un lugar para repetir cada poco.
Un sitio especial, ya desde que tienes que llegar, lo notas. Junto al río Durcal y bajo el puente. Pequeña casita que en verano tiene terraza, por poner una pega.le falta la chimenea que la tienen tapada. El trato muy bueno, atento y agradable. La comida muy buena, servida con originalidad y de buena calidad. Un poco justo de cantidad en algún plato, que se compensa con lo bueno que está, también depende de lo que coma cada uno, por supuesto. Gran variedad de platos y postres. Todo muy bueno. Las recomendaciones hay que tenerlas en cuenta, ya que te guían por la carta. Lo recomiendo 100%. Una Joya escondida!
Aún escucho el pitido que hace el microondas, con mi tapa había un regalo de los anteriores clientes, los muchachos despistados y tardones, en general lo peor de mis vacaciones.
Un lugar ideal para DISFRUTAR comiendo, donde el tiempo se para y sales con la barriga llena y mucha paz. El personal siempre atento y muy servicial. Ya estamos deseando volver!
Fue un gran sorpresa encontrarnos con este lugar. La terraza es un pequeño paraíso, la comida increíble y el personal y el servicio insuperables. Muchísimas gracias
Excellent food, excellent tapas, nice and clean, in a lovely setting. Very friendly staff, especially Rocio who made us feel very welcome and took the time to chat, even though she was very busy. Would highly recommend
I love this place. Some peace and quiet. Very friendly service and lot's of creativity in the kitchen. Modest price definitely worth it's value and on top of that super pet friendly
Estás rodeado de naturaleza y eso te transmite mucha paz, nadie allí va con prisa, el servicio es muy cercano, la comida está preparada con mucho cariño, platos muy bien presentados y muy buenos.en el Chambao del vizco no hay aglomeración de personas porque la propietaria valora más que los comensales estén bien.una maravilla de sitio! Es más que un restaurante porque allí pierdes la noción del tiempo.
La comida es muy buena, el risotto espectacular y el sitio muy apropiado para ir con niños. Pero deberían mejorar la organización de los camareros. Siempre nos quedamos atascados porque no llega la carta de los postres y la comida se hace interminable.
En general estaba todo muy bueno, los platos.y sobre todo los postres pero hay cosas que se podrían mejorar. No hay menú para niños ni ofrecen nada más allá de una salchicha para ellos (no trabajan con huevos así que tortilla tampoco). Las camareras muy amables y el servicio es bueno en general pero a veces se despistan un poco y se les olvida atenderte. El lugar es muy tranquilo, hemos estado muy a gusto con los niños. Tiene sitio para aparcar. Muy recomendable
Muy interesante las sorpresas fuera de menú, muy bueno todo lo que hemos pedido, la carta de vinos diferentisima. El trato perfecto, el lugar con encanto. Volveremos seguro.
Soy cliente habitual de este restaurante. La comida es genial, es innovadora basandose en productos locales y tradicionales, siempre con buena calidad y un tratamiento del producto perfecto. Cervezas artesanales buenisimas y una amplia variedad de vinos.
El entorno del restaurante es muy agradable para todo el mundo, pero especialmente apropiado para familias con niños.
El trato es genial, te hacen sentir como en casa, para mi este sitio es un 10!
La comida es genial. El ambiente súper agradable. Y los niños disfrutan mucho en el entorno natural y los tratan muy bien. Siempre que voy salgo contenta y con ganas de repetir.