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Maravilloso, mágico y sabrosa sorpresa en pleno centro de Sevilla, con verdaderos croissants de mantequilla y café ecológico. Sus dueños, que atienden en persona, tienen la misma categoría en amabilidad que el propio lugar. El personal es así mismo agradable y dispuesto.
Es una cafetería muy acogedora. El servicio regular. Tiene pocas mesas y si está lloviendo o hace frío no se puede estar fuera. El precio algo elevado, pero para una merienda puntual, está bien.
Pongo una estrella porque no se puede poner 0. Entramos a las 20: 00, nos sentamos en una mesa, la cual no estaba recogida, recogieron las de alrededor y viendo que no nos prestaban atención le preguntamos si era autoservicio y nos responden que si. Después de esperar a que nos atiendan en barra nos dicen que cierran en 15 minutos y que ya no nos pueden atender. Empleados sin ganas de trabajar, 100% que no vuelvo.
Un trozo de París en Sevilla. Si quieres comer un buen croissant al más puerto estilo francés, no lo dudes porque es aquí. Las dueñas son francesas, condición necesaria, y hacen productos de calidad. Las palmeras son de hojaldre azucarado, y creo que si las mejores que he probado nunca. Las baguettes y el pan multicereal están muy muy buenos. También es de destacar el pain au chocolate, las napolitanas rellenas de chocolate, simplemente exquisitas. Además de panadería y pastelería, puedes comer allí los productos, desayunando (sirven tostadas, café de máquina Nespresso y tés) o merendando. Tienen varía mesas dentro y terraza. Aunque suele estar bastante concurrido porque el local no es muy amplio y está en una zona de mucho tránsito (casi enfrente de Zara). No es un sitio precisamente barato, pero es tal la calidad y el sabor de los productos, que merece la pena.
Muy buena bollería, el zumo de naranja está buenísimo, realmente está muy bueno y quita la sed. Desayuné allí todas las mañanas cuando estuve en Sevilla, el personal es muy agradable y el entorno es agradable:)
Wao este lugar me encanta visito mucho para mis cafés, la atención del chico y las chicas increíble muy cercanos y profesionales.os recomiendo a todos.muy familiar
Cafetería muy mona de estilo francés y donde se está muy bien para pasar un rato tomando café en plan tranquilo. El café normalito pero aceptable y la porción de tarta que pedí a mi gusto tenía mucha “crema” pero no estaba mal.
Llevaba mucho tiempo queriendo ir a esta pastelería. Solo he tomado café, muy bueno. El personal del establecimiento muy amables y simpaticas. El local es muy bonito y agradable. Tienen un variedad increible de pasteles, tartas, etc. El precio es más que razonable por la calidad, cantidad y situación (pleno centro, en la calle San Eloy). Muy recomendable. La próxima vez, tomaré fotos.
Hacia unos meses que no iba, y me ha decepcionado. El café con leche que hemos pedido no se sabía que era, si café cortado u otra cosa, y mira que antes eran buenos. Y el milhojas una pena, la pasta y el hojaldre blando y la crema no estaba bien. Lo dicho una pena. No sé si volveré
Me solicitaron certificado covid para entrar y me sirven un té en una taza usada con una marca de labial, me acerco a la barra para comentarle a la camarera y su solución iba a ser cambiarme el té a otra taza, en lugar de darme uno nuevo! Excelente medidas de seguridad,
Muy caro y la calidad dejaba mucho que desear pues el pastel no era fresco, costaba 3,90€, el mismo y recién hecho en otra pastelería que está muy cerca 2,80€ y encima recién hecho
Muy rica una caracola con pasas que nos pedimos y el café, pero a mi madre la atendió una chica con muy poca educación, lo que nos hizo tener una experiencia menos agradable.
Pâtisseries de mauvaises qualités et pour certaines elles sont industrielles et surgelées. Une honte pour un établissement qui se dit traditionnel à la renommée française et qui applique des prix élevés. Tarte au citron surgelée et dégueulasse, 3€, une blague.
Calidad pésima, productos congelados y industriales a precio muy elevado. Una vergüenza para un establecimiento con imagen francesa.
Very poor quality, frozen industrial products and expensive. 3 euros for a frozen lemon pie. I do not recommend at all.
Buena ubicación. El local pequeñito pero acogedor y coqueto. Buena variedad de pasteles. Las camareras encantadoras y muy atentas. El café magnifico. Un pelin por encima de la media en cuanto a precio pero si miramos la relación precio calidad merece mucho la pena. Es autoservicio y tambien tiene mesas altas y bajas en el exterior.