Cueva de la Zarzamora

El sitio es precioso, la merienda estaba super buena, pero el servicio no me ha gustado nada. Nos trajeron el café y tardaron en traernos la merienda y prácticamente se nos enfrió el café, y luego se acercaban mucho para retirarte los platos (que ya sabemos lo que eso significa).

Todo muy bien, menos la mujer de la entrada que está haciendo café, un poco mal educada y no sabe tratar a los clientes. Espero que solo haya sido ese día, por qué la verdad que como sea siempre así, y con todos los clientes, no veo mucho futuro.

Excelente decoración, cuidada hasta el más mínimo detalle, la presentación y calidad de sus productos. Sorprendentes. Muy recomendable en todos los aspectos. Precios acordes a la calidad. Si es posible, reservas porque suele estar concurrido.

Los mejores postres que he probado en mi vida.

El precio es el adecuado para lo que se ofrece.

El ambiente es único e inigualable, es precioso.

El mejor cóctel: Piña Colada.

¡¡Claramente voy a repetir!

La verdad que los postres están bien pero pagas por el sitio aunque merece la pena aunque sea de cuando en cuando.

El problema está en su carta de alérgenos, esa brilla por su ausencia y desde que abrieron la están imprimiendo (lo que me dijo en su momento el dueño) Hoy día esto es inadmisible, porque no puedes confiar en que se sepan todos los alérgenos de los productos que tienen. En su momento, fue por trazas de cacahuete (vale, la torrija lleva nueces y se le pueden quitar pero el desconocimiento está en que muchos helados contienen trazas de cacahuete). Hoy la chica nos a preguntado que queríamos y se ha informado sobre ello, pero con la cantidad de intolerancias alimenticias y alegrías que hay hoy día, es bastante peligroso arriesgarse así.

Decoración que te hace retroceder unos años a un barrio sevillano, muy recomendable (no hacen reserva)

Fue increíble la decoración el ambiente sus postres sus cócteles todo cuidado al detalle. Volvería cada día. Para mí un sitio q hay que visitar una vez en la vida si o si!

Un sitio con mucho encanto. Si temática es ideal y te traslada a esa época, no le falta ningún detalle. Y los postres muy buenos

Un lugar muy bonito y muy ambientado. La tarta de queso y la de 3 chocolates no merecen la pena. Está bien para una vez

Un lugar muy especial, para la reunión en familia, amigos, eventos.
Creo que lo mejor es ir a visitarlo
En precios algo más elevados, pero creo que no está mal para lo que ofrece.

Siento hacer esta valoración, pero ves detalles de atención q no estan a la altura del sitio, ha mi hijo se le resbalo el batido y muy amable se le ofreció otro, q se me cobro también, y todos sabemos q hay una regla no escrita q eso jamas se cobra, y la presión q te hacen sentir para retirarte los platós no es normal, un consejo, q esperen a q terminen todos los comensales de la mesa para retirar, lo comente alli, eso si despues de pagar, como consejo, y como el q se lo cuenta al viento…

Un lugar precioso, cuando entras, parece que vas andado por calles estrechas de esos pueblos antiguos, un decorado que me recuerda a mi niñez.
Todo muy limpio.
Los trabajadores muy simpáticos y amables.
Un servicio rápido, a pesar de que el establecimiento siempre está lleno.
Si llegas y tienes que esperar para coger mesa, no te arrepentirás de haber esperado.
Nunca imaginé un sitio tan bonito.

Prepotencia por parte de la responsable. Mala atención y poca educación. No lo recomiendo en absoluto.

Hay que llegar con tiempo para coger sitio, pero si llegas a buena hora puedes disfrutar de un sitio estupendo para merendar o tomar alguna cosilla

Es la primera vez que vamos y ya es nuestro sitio preferido para merendar y tomar copas.el lugar es impresionante, los precios bajos para la calidad que ofrecen, pedimos café helado, mojito (fantástico), torrija maravillosa, carrot cake y cafetera de chocolate blanco con toque, una delicia.y solo fueron 25 euros.recomendable 100%

Este sitio me tiene enamorado cada vez que voy, la espera en puerta merece muchisimo la pena.

Un lugar para merendar relajado y disfrutar el ambiente.

El servicio es muy bueno, atento y preocupado por el disfrute del cliente.

He pedido casi toda la carta y no hay nada que no me haya gustado.

ESPECIA RECOMENDACION:
La torrija
Leche frita
Estas dos no pueden faltar en el pedido!

Lindo lugar donde retroceder en el tiempo por su decoración, sin embargo con los más adelantos en postres, copa especial de la casa, mejor para compartirla, Riquísimo!

Lo de la atención es increíble.
Se lo tienen muy subido y no tratan bien al cliente. Se pasan de sobrados. El sitio es peculiar y simpático, pero incómodo tela, a no ser que te sienten en la única sala que tienen sillones. Las otras cuatro, con taburetes o sillas de madera. Muy bonito y bien presentado, eso sí

Sitio original para tomar un café y un postre. O un cocktail. Se echa de menos alguna tapa salada más, hay muy pocas. El negocio está enfocado en los dulces, pero en un sitio tan chulo, sería genial poder comer o cenar también.

Local que se encuentra en todo el corazón de Alcalá de Guadaíra. Cuesta mucho aparcar por la zona. Son la postrería más antigua de Andalucía (1851). Su ambiente y su atmósfera son únicos. Solamente visitar el sitio ya merece la pena pero aún así, sus postres son una delicia, sobre todo las tartas en tarritos y su afamada Torrija con pan Brioche. El café y la vajilla son mejorables.

Esto está genial no se puede poner pegas a nada ni a el precio ni a la calidad, pedimos 3 postres cafetera torrija y carrot con café y mojito 25 eu los mejor gastados desde hace tiempo, ya es nuestro sitio favorito

No vea con la ilusión que nos hacia conocerlo al final unas normas absurdas después de esperar 45 minutos porque éramos 4 personas no echaron fuera hasta que no hubiera una mesa de 4 las que habían era de 6 una pasada la atención muy chulesca nos tuvimos que esperar porque venia una familia del extranjero y quería conocer pero tener cuidado

Muy bonito montado, buen servicio, el café nada destacable, sobre la carta deberían poner fotos para saber cómo viene presentado, yo pedí una cosa porque me llamó la atención como se llamaba y resultó ser un cucurucho al revés pegado en un plato con fondo de galleta sin sabor que costaba 6 euros, en mi caso no lo veo como para repetir y no merece la pena esperar esa gran cola para entrar.lo único destacable es como está decorado

Una auténtica pasada. Un lugar único, buena atención. Hay que esperar cola para entrar pero merece la pena cualquier espera. Muy ricos los postres que probamos.

Me encanta, me encanta, me encanta y me vuelve a encantar. Seguiré yendo hasta que pruebe todo lo que hay en la carta

Lugar bonito, pero te hacen esperar en la calle hasta que queda una mesa libre, ya que te cogen por orden de llegada, se consideran bastante exclusivos, pero por lo general bien, tal vez llendo en día de diario sea todo más fácil y más acogedor