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Falta de respeto, sin empatía, sin ganas, no ayudan a los estudiantes, no te ayudan en nada. Una pena que personal así esté trabajando en este puesto, cuando debería ser al contrario, encontrarse en secretaría personas que quieran ayudarte. En cambio te encuentras con personas sin ganas de hacer nada. La secretaria de la facultad de ciencias de la educación es una pena.
La facultad está para demolerla y el calendario de exámenes deja mucho que desear, teniendo en julio después del mes de exámenes las recuperaciones del primer cuatrimestre y las del segundo en septiembre. Es un chiste la organización y el trato al alumnado, parece que no paran de reírse en tu cara. Gracias a dios que hay profesores competentes y el trato en la cafetería es muy cercano, aunque la empresa que pone los menús debería considerar poner más opciones para vegetarianos.
Si necesitas preguntar algo en secretaría casi nunca van a saber responderte, a pesar de que sean cosas básicas que solo ahí deberían saberlas. Siempre se quitan el problema echándole culpas a otros y excusándose de que ellos no llevan nada de eso, pero tampoco te ofrecen ninguna opción alternativa sobre donde puedes informarte.
Como estudiante, la Facultad de Ciencias de la Universidad de Málaga deja muchísimo que desear en cuanto a infraestructuras. Hay un buen ambiente y sí la cafetería también está bien. Incluso, en mi opinión, me atrevo a decir que los laboratorios son muy buenos, pero para algunas carreras más prácticas son insuficientes. Aún así abogo por una facultad de ciencias donde todos los estudiantes se sientan como parte de ella y no de edificios (aularios) construidos debido a la gran demanda de estudiantes.