Este sitio web utiliza cookies para mejorar la experiencia del usuario. Al utilizar nuestro sitio web, usted acepta todas las cookies de acuerdo con nuestra Política de cookies.Aprende másOK
Entré para hacer una consulta sobre unas monedas antiguas que tengo. No había nadie, pero la dependienta no hizo el menor esfuerzo por resolver mis dudas. Me dijo (casi sin dejarme terminar la primera frase) que eso lo llevaba su jefe y que no estaba porque viajaba mucho. Me dejó una tarjeta para que llamara antes de volver. No me parece un negocio serio aquel en el que se toman tan pocas molestias por el cliente y que llamándose "Numismática" no cuentan con personal capaz de algo tan sencillo como tasar una moneda o al menos hacer una valoración aproximada.