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Qué bien todo. No pongo las cinco estrellas a todo porque alguien pensará que ha valorado un bot. Tienen servicio a domicilio. (Ojo, no pidáis este servicio desde Helsinki, llegaría frío el pescaito)
La verdad que la atención buena y el pescado también pero precios desorbitados, una pasada que el kilo de todo valga más de 30€ es anormal, compré lo justo menos mal, de todo un mínimo a excepción de 2 cosas que pedí un cuarto, porque cuando me dio el total me quedé sorprendida, aquí aporto el ticket. Tengo claro que no iré más a comprar allí.
Excelente pescaíto frito en que tienen en esta freiduría. Sentados al sol en la terraza de está la mar de bien, te atienden estupendamente y son muy rápidos en los pedidos del pescaíto frito. La comida es de gran calidad y recién hecha. Repetiremos seguro
De vergüenza, nos hemos llevado esperando nuestro pedido dos horas y media, y encima cuando llamas para preguntar el por qué de la tardanza no te cogen el teléfono. No hagáis pedidos a domicilio, huid de este sitio.
Sólo hablo de la freiduría. Pescado frito muy rico, a mi personalmente me parece que a un precio acorde con la calidad del producto, similar a otras freidurías. Los boquerones y el adobo nos gustan mucho. He leído en algún sitio que a todo le ponen verduritas, pero eso es sencillamente falso, solo lo hacen en algunas frituras (gambas por ejemplo). Suele tener bastante gente, así que puede que tardes un rato en ser atendido (pero va por número, así que puedes tener una idea de cuanta gente tienes por delante), pero una vez en tu turno, no tarda más allá de cinco minutos. Las tapas del bar, en general, no me llaman la atención, si voy allí es para comer el pescado frito.
Fuimos porque leímos que toda la carta se podía comer sin gluten y fue todo lo contrario. No se podía comer nada de pescado frito sin gluten. No hubiese pasado nada si no fuese porque hay comentarios en los que indicaban que freían el pescado con harina de garbanzo u otro tipo de harina. El servicio normal.
Un sitio de difícil aparcamiento. Fácil de llegar en autobús. Algunos zona de mesas. Suele estar lleno. La comida es variada y sabrosa. El coste es el correcto.
Excelente freiduria sevillana, con muy buena calidad, precios mejores y un personal rápido y amable. Tiene una zona de restaurantacion y terraza con mesas en la calle.
Nos hemos sentado en Mara bar, nos indican pedir pescado en freiduría que es el establecimiento contiguo, los calamares no estaban en condiciones, muy duros, Mara, se presenta como hija del dueño, que dice tener 17 años, muy mal educada y grosera, para demostrar que estaban buenos se come uno delante de nosotros, Poca profesionalidad. Le solicitamos la devolución del importe y la compañera viene en jarras con peores modales que está si cabe. Hay que reconocer que cuando salió el encargado sus maneras fueron ejemplares, nada que ver con la supuesta hija del dueño. A recalcar también, la calidad de los fritos en proporción al precio deplorable, y las hortiguillas una masa informe.
Un servicio de freiduría inadmisible. Tanto por parte de los alimentos como por el trato de la supuesta hija de los dueños y otra trabajadora. Falta de educación muy presente y creación de incomodidad inevitable. No vale la pena pagar por tan pésima cantidad y calidad. Una situación que debería ser agradable se ha convertido en algo grotesco. Soy trabajadora de la hostelería y está circunstancia ha sido inaceptable. No son merecedores de ese nombre y mucho menos de disponer la oportunidad de servir más.
Antes me gustaba mucho el servicio y el pescado frito pero de la pandemia ha cambiado mucho y a peor en todos los sentidos, precios más caros, calidad más baja, atendiendo peor.una pena
Nos intentaron cobrar 5 cervezas de más, y al que supuestamente era responsable de ello le amenazaron delante del resto de clientes con despedirle. Para más inri, al entrar al interior del bar la ausencia de mascarillas entre los trabajadores era notable, siendo un hecho muy destacado entre los cocineros.
Excelente tanto para comer allí como para pedir a domicilio. Ofrece una gran variedad de tapas y raciones y, en cuanto al pescado, está estupendo, bien fríto y de calidad.
Local limpio y amplio. Magnificamente diseñado para que trabajando de una forma coordinada, dar al cliente un servicio de diez.
Disponen de un amplio velador.
Gran variedad de pescado frito y en el local anexo (que es también de su propiedad) te puedes poner en una de sus mesas y pedir una cervecita y alguna tapita, las papas aliñadas ricas ricas.
Puedes llevarte el pescado a casa. También disponen de reparto a dimicilio.
Nefasta la atención de la freiduría. Muchísimo tiempo esperando, descoordinación, se pelearon entre ellos con el de la cocina, le pregunté a una dependienta (delgada y morena) que si ellas avisaban del número, ya que la pantalla no funcionaba, y no me contestó. Le volví a preguntar y le dije que le estaba haciendo una pregunta. Volvió a pasar de mi, estaba muy ocupada quejándose y peleándose con el cocinero. Lamentable. Poquísima educación. En ese mismo momento no puse una reclamación porque llevaba a gente a la que le había recomendado ir allí, pero sin duda no volveré nunca más. De vergüenza.
Es un sitio tradicional donde se come de lujo el pescaito frito. En la terraza se suele estar bastante a gusto. Los precios están bien y se nota, ya que el local siempre está lleno.
Pésimo servicio. 4 días antes hecho un pedido para almorzar a las 14'30. Son las 15'30 y estamos sentados en la mesa sin saber ya de qué hablar.el pedido pa cuando? VERGONZOSO! AH LLEGÓ A LAS 15'50
Variedad de pescado frito, bastante velador exterior. Se piden bebidas y frituras en mostradores distintos independientes. Te avisan mediante un aparato luminoso y sonoro de cualquier do tienes que recoger el pedido de frituras. Para bebidas si hay servicio a mesa y algunas tapas y platos en el bar.
Hemos hecho un pedido hace más de hora y media y aún no ha llegado. Además, nos han llamado por teléfono para decirnos que se han quedado sin una de las cosas que habíamos pedido. Tela.
Antes de la reforma excepcional. Ahora los camareros se equivocan muchísimo y son muy lentos.mi ensalada de aguacate me tardo casi una hora un día que no había casi nadie y fue de pésima calidad. Lo mejor el pescado que es verdad que es de muy buena calidad. Lo peor es el servicio de camareros. Las chicas que trabajan dentro de la freiduria maravillosas. Es una pena lo del servicio en mesas últimamente
La freiduría aceptable aunque no para tirar cohetes. Típico pescado congelado. En el bar restaurante hay que tener cuidado, el servicio es pésimo, lento, olvidadiso y si pueden te cuelan en la cuenta lo que no has pedido.
Suelo pedir mucho para llevar y no suelen dar problemas pero lo de hoy dia 25 de diciembre por la noche me a parecido de no tener ninguna profesionalidad con los años que tienes de experiencia, pedimos frito variado para 2 y otro para 1 ke serian 21€ al llegar ya lo tenian todo preparado y la chica me pregunta teniendolo preparado ya, que si me importa ke el de 500g lleve 600 y el de 300g 400. Son 200g mas y 5€ mas, apunto de cancelar el pedido cedemos a que me den los que he pedido, ql llegar a casa todo venia de malas maneras aplastado poca cantidad y ya pues frio, en fin an perdido un cliente, ya he subido fotos del pedido al abrirlo en casa.
El mejor pescaito frito de Sevilla, tienen una variedad impresionante, aceite limpio, buenos precios y sobre todo las niñas que trabajan allí son unas máquinas!
Servicio en mesa mediocre, no acordé con las instalaciones. Imagen, atención en mesa mala. La cocina pasable, cara y a medias entre bar-restaurante-freiduria. No está definido. En mesa, en salon interior, atendido por un camarero, pides pescado frito y te dicen que te tienes que levantar y comprarlo en freiduria.
Los conozco de toda la vida.han pasado de ser una clásica freiduría, espartana diría yo, que luego amplió con un cutre-bar, a emprender una ambiciosa renovación, ampliación, a verdadero BAR funcional y elegante, de aspecto moderno, sin perder su esencia (ofrecer frituras para consumir allí o en casa), en donde lo más destacable es la cocina (que ha ganado enteros) y el eficiente servicio de mesa que prestan en la amplia acera de los veladores.
Posiblemente el mejor "pescaíto frito" de Sevilla. Con precios equiparables a cualquier freiduría, se nota la frescura del género. La atención también excelente. Las muchachas se afanan porque le espera sea la menor posible aunque haya mucha gente. Excelente todo.
Corroboro todos los comentarios por lentitud y pescado carísimos no pienso volver más antes de la reforma IVA muy a menudo ahora estoy desesionado no vuelvo más
El servicio es pesimo y el pescado muy caro para la calidad q tiene. T hacen esperar mucho para q t traigan sólo la bebida xq el pescado tienes q ir tu a pedirlo y esperar para recojerlo. Lo único bueno q l vi fue el sitio está en una esquina amplía donde hace fresquito y s está bien sentado alli por lo demás deja mucho q desear
Pescado de buena calidad y servicio rápido, aunque suele estar lleno. Buenas instalaciones recién reformadas. El unico pero es que son un poco más caro que otras freidurias y algun camarero es un poco pasota con los clientes.
Los productos, como es habitual, de mucha calidad -ahora con precios superiores- aunque la delicadeza en corresponder dista. Lo ilustro con ejemplo: me encuentro un "objeto", por definirlo de alguna manera, en una tapa de ensaladilla. Tras comentarlo la respuesta: es un cacho de algo.al final, cobrado en la factura y ya está. Ahí queda.
Esta muy bien para disfrutar de pescaíto frito, ojo siempre que no te pongas al lado de los contenedores, consejo pide antes el pescado que te lo cobran allí dentro cogiendo número y luego siéntate en las mesa donde el camarero te pondrá las bebidas que se abonan aparte. Esta muy rico
Se trata de freiduria típica andaluza donde escoges pescado, mariscos etc y te lo frien allí mismo, en el acto. Te lo entregan envuelto en papel para o llevartelo a casa o consumirlo en la terracita delante del establecimiento. Hay opción de pedir bebida y otro tipo de comida (aliños de varios tipos, tapas sencillas) en el bar de al lado, también llamado Mara. El sitio lo conozco desde hace años, pero ahora está renovado y tiene muy buena pinta. También se ha añadido la opción de tomar helados.
El pescado muy bueno, y bien hecho. Los camareros de la terraza muy malos. Malas caras, errores continuos, piques entre ellos. El servicio deja un poco que desear