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Hoy primer día del Festival me he desplazado desde Granada para poder disfrutar del evento, pero me he encontrado con que los precios han sido elevados y según me han comentado es para poder sufragar el coste del stand. En cualquier bar puedo tomar cerveza con su tapa por menos importe. Otro hecho molesto ha sido el volumen de la música, excesivamente alto, que no permitía hablar con los cerveceros. Y por último y no menos importante, no había papeleras para depositar los residuos de los alimentos y no había nadie retirandolos lo que hacía que las mesas altas estuvieran sucias.
Este año ha perdido mucho en comparación en Fermasa, el ambiente era bueno pero, esa carpa blanca sin más. Los puestos de cerveza eran pocos corporativos nada llamativo, todos los puestos iguales. El calor de la carpa era muy desagradable apenas corría el aire y luego fuera si no pillabas sombra se pasaba mal, creo que no ha sido una buena opción elegir una carpa que parecia más una feria de pueblo, que una feria de cerveza. Faltaron muchísimas marcas artesanales Granadinas, este año no me voy contento con el festival.