Hacienda Torre Doña Maria

Maravilloso lugar. Es tan bonito como interesante su historia. Su torre de época musulmana es increíble. Y su enorme patio empedrado me encantó. Tiene una historia muy curiosa de reyes enamorados. En fin, un lugar bastante especial.

Lugar mágico y encantador, me casé allí en septiembre de este año y fue la mejor elección, Loli te da todas las facilidades y se porta de 10, así como Rafael que siempre está dispuesto a ayudarte en lo que necesites. Recomendable 100%

Asistimos a una boda el sábado pasado con catering Roberto y tanto la Hacienda, como el catering estuvo espectacular.

Extraordinaria hacienda de olivar muy cerca del casco urbano con muchas historias y leyendas

Asistimos a una comunión en Mayo y el lugar es una hacienda típica blanca con caminos de albero y senderos con mucha vegetación, situada en Dos Hermanas. La zona de celebración es una enorme carpa blanca con techo alto y varias puertas dobles blancas acristaladas que dan o a la zona de aparcamiento, gran explanada de albero y poca sombra, a los servicios o a la zona de coctel, copas o café situada al lado de una mezquita pequeña blanca, que tiene mucho encanto rodeada de macetas de barro con flores, pero no puedes visitar. El aire acondicionado dentro de la carpa viene y va, es decir al principio sí lo notas pero cuando llegan todos los invitados, tiras de abanico o sales por los senderos, que quieras o no con sombra y vegetación, te vale, al menos notas aire fresco en la cara. El evento a celebrar es único, es decir, no compartes la carpa con otras celebraciones como si ocurre en estas fechas en otros salones, en los que te ponen unos biombos a modo de separación. 5 camareros, todos uniformados igual se encargan del servicio. Hay un señor madurito con chaqueta que los lleva e incluso tb sirve bebidas. Los entrantes en miniatura son muy buenos, papas aliñás, buñuelos, tartaletas de queso con membrillo, croquetas, salmorejo, tortilla, pescado frito y ensaladilla. Todo muy rápido. La comida en la mesa tb es rápida. El catering estuvo muy bien y todo estaba riquísimo. Si el aire acondicionado hubiera funcionado bien todo el tiempo en la carpa, hubiera sido de cinco estrellas.

Lamentable con catering Roberto

Es una pena que esta hacienda tan bonita pierda todo el encanto.
Gracias al catering Roberto tenemos bolitas negativas de esta hacienda.
Siendo profesional de las bodas (videógrafo) desde hace años, la verdad que se pasa mal cada vez que coincidimos con este catering, teniendo siempre que mendigar un refresco después de horas trabajando a pleno sol sin poder sentarnos ni un segundo.
Es patético que los camareros huyan de los otros proveedores por orden expresa de la metre, no vaya a ser que bebamos algo para que no desmayemos. Es patético.

Lo que es lamentable es que los novios, al día siguiente de su gran boda, se enteren que los mismos familiares han estado facilitando comida a los profesionales, después de ver el trato que nos tenía. Falta de humanidad es poco.

Sin duda nunca recomendaríamos esta hacienda si tiene algo que ver con el catering Roberto.

Falta de empatía y poco profesionales

Es una pena que una gran hacienda como Torre Doña María, dé una imagen tan pésima a causa de las malas gestiones del catering Roberto.

Una buena empresa no solo se caracteriza por ser impecable con sus clientes, también es importante el trato que tiene con sus compañeros y proveedores, puesto que también éstos son parte fundamental de la red que se genera en torno a un evento o celebración. Sin el trabajo conjunto de todos, ningún evento sería posible.

Somos profesionales del sector audiovisual, y en todas las ocasiones que hemos trabajado con el catering Roberto este año nos ha ocurrido lo mismo: niegan la comida y bebida a los trabajadores (fotógrafos, videógrafos, músicos, DJ) a pesar de las altas temperaturas (Sevilla, bodas de día a pleno sol). En todas las ocasiones nos hemos encontrado con una responsable que nos ha dicho de manera déspota que no tenemos derecho a tomar nada hasta que no lleguemos al convite, momento en el que se nos sirve, como todo protocolo exige, los últimos. Eso sí, pidiendo que le pasemos “fotografías bonitas” de su servicio, para eso sí somos compañeros. El afán porque no cojamos nada de comer y de beber es tan alto en este catering, que los propios camareros nos retiran las bandejas cuando nos acercamos e incluso los invitados, al darse cuenta de que no estamos comiendo ni bebiendo nada, se han convertido en intermediarios y se han preocupado ellos mismos de que estuviéramos servidos. Vergonzoso es poco.

Lamentablemente no recomendaremos esta preciosa hacienda si con ella va incluida el pésimo trato y poco compañerismo del catering Roberto, y a todas las parejas que tengan la mala fortuna de contratarles les mantendremos prevenidos para que tengan el control de su propia celebración.

Buen parque y muy çuidado, para dar una vuelta por la mañana, dispone de unos servicios públicos, de primera categoría

Boda de día, julio, 44 grados a la sombra (novios inconscientes, eso sí), se estropea el aire acondicionado en el salón y dan una medio solución 4 horas después, cuando desde primera hora pudieron hacerlo. No sé que parte de culpa hay en que se entropee el aire acondicionado, pero la lentitud en el plan B deja mucho que desear. El lugar, eso sí, muy bonito.

Estupendo. Fácil acceso. Agradable. Cómodo. Edificios típicos de la Andalucía rural. Histórico-Artístico. Más atractivo aún de noche.

Fuimos a una boda y muy bien el sitio. Catering de Roberto, no pudimos comer más.todo buenisimo.

Preciosa hacienda del pueblo de dos hermanas, ojalá la cuiden y protejan como patrimonio del pueblo

Es un paraje con unas vistas y paisajes emblemáticos de la zona rural de Dos Hermanas. Es ideal para pasear.

Es precioso.
Y tambien está disponible para celebraciones, aunque nunca estuve en ningua.

Es un lugar histórico situado en un entorno privilegiado donde poder celebrar cualquier evento importante.
Bidas, bautizos.etc

Un lugar precioso. Muy bien acondicionado para celebraciones. Estuvimos en una boda en la que participamos muy activamente y el escenario no pudo ser más apropiado.

Lo hemos pasados muy bien en la primera comunión de Alejo todo muy bien y muy bien atendido por el personal

Un sitio especial, la boda de mi hija se celebro alli el viernes 12 de Octubre del 2018, a todos los invitados les encanto el sitio, muy bien cuidado y el personal muy amables y responsables con su trabajo. Gracias por todo.

Es tan bonita que la elegí para celebrar mi boda. Es impresionate de bonita. Tiene historia y es muy muy bonita

Siempre tienen la música a tope como si no hubiera vecinos a sus alrededores. Los sábados sabemos que van a molestar.

Preciosa hacienda para la celebración de bodas. En la que yo estuve también se celebró la ceremonia civil, y fue preciosa! El sitio es una pasada! Lo único negativo que puedo decir es que el patio donde se pusieron las mesas para la comida tenía muchísimas piedras grandes y era muy difícil andar con los tacones. Por lo demás, todo fenomenal!

Espacio al aire libre para celebraciones muy bonito. Cuenta además con espacios interiores amplios y patios acogedores. Tiene una pequeña mezquita mozárabe.

Estuve en una boda. Las instalaciones estupendas y el entorno muy bonito. Algunos problemas en el patio central para los zapatos con tacones

Lugar histórico, antigua casa de María de Padilla, amante del Rey don Pedro I, el justiciero, mal llamado el cruel. Se organizan certámenes y bodas. Un sitio muy bonito.

Lugar impresionante para celebrar cualquier evento, jardines maravillosos y vistas preciosas, muy relajante

Un lugar mágico para celebrar la Boda de tus sueños, con facilidad de aparcamiento y muy bien ubicada. Esta muy bien conservada, ya de niño yo paseaba por ella con mi abuelo y no ha perdido ese encanto.

Asistí a una boda recientemente y estuvo todo de lujo. El entorno, el catering, (que ignoro si tiene que ver con la hacienda), todo genial.

Expectacular, una hacienda muy cuidada, con detalles bellísimos, un patio interior con mucho encanto, un muy buen lugar para celebraciones especiales.