Este sitio web utiliza cookies para mejorar la experiencia del usuario. Al utilizar nuestro sitio web, usted acepta todas las cookies de acuerdo con nuestra Política de cookies.Aprende másOK
Un lugar excelente para compartir buenos momentos. Lo recomiendo. Estuve el fin de semana con mi empresa. La camarera Irene expectacular. Muchas gracias.
Los helados están fenomenal. Me gustó mucho el de yoghourt con mango y el de chocolate. Además a mí hijo pequeño tras un rato andando y ya cruzando el puente, se le cayó al suelo la bola de helado. Fuimos a por otro helado a la tienda, y el camarero al vernos otra vez y al niño con cara triste y tras saber que se le habia caído el helado, no nos lo quiso cobrar. Camarero ejemplar y muy buena manera de llevar el negocio. Muchas gracias y seguid así!
Los helados y los desayunos no están mal pero el servicio de las camareras es tan malo y deja tanto que desear que el cliente se va con una muy mala experiencia. Además el local por dentro muy sucio y abandonado.
No lo recomiendo nada, el servicio fatal, la atención peor, muy sucio, nos costó que nos limpiaran la mesa, las trabajadoras discutiendo entre ellas en voz alta. Lo único bueno la comida que estaba muy rica.
Los helados insípidos y con trocitos de hielo de haberse descongelado. Si venden imagino que es por donde está ubicado pero no por la categoría del helado o la amabilidad de las chicas, que deja mucho que desear.
Gran variedad de helados. Pedimos vasitos con distintas bolas para probar y todos buenísimos. Volveremos a seguir probando! Buena atención y paciencia hasta que nos decidimos
Es un sitio estupendo para pararse a tomar un helado o una palmera en Triana. Los helados estan buenisimos (sobre todo el Banana split), el personal es muy atento y super amable, un sitio 100% recomendado:)
No atendieron en la terraza, tuvimos que entrar para pedir, café servidos en barra con los hielos dentro la de taza, aguados y sin cucharas, quiso cobrar los dos cafés cuando se le devolvió uno de ellos, la empleada parecía tener malas condiciones laborales o falta de un compañero ayudándole.
Un lugar muy agradable para darse una tregua, descansar y disfrutar tomando unos helados. Se ofrece una gran variedad de productos, sin duda volvería a repetir la experiencia.
Muy mala educación de los camareros. Te dicen que no te puedes sentar el los bancos que hay dentro del establecimiento, que tienes q comerte el helado de pie. Muy mala experiencia
Sitio que deja muchísimo que desear. Primero, la simpatía de la chavala que estaba atendiendo, decimos hola al entrar y ni siquiera respondió, con cara de pocos amigos mirando. Para estar cara al público debería de al menos decir un ‘hola’ o un ‘gracias’. Segundo, y lo más impactante, tenían dos bayetas SUCIAS encima de una bandeja de pasteles (tengo foto), pasteles los cuales después estaban vendiendo. Tercero, hemos pedidos batidos helados, los cuales no tenían nada que ver con las fotos que supuestamente te venden en la carta, ni lo que es normalmente un batido helado. SIN sirope de ningún tipo y servido en un vaso de sidra (nunca hemos visto algo así) No es nada recomendable.
Helados buenísimos y muy buen trato a los clientes por parte de los camareros. Muy buen y rápido servicio. Muy contento de haber descubierto mi nuevo sitio para ir todos los fines de semana!
Gran variedad de helados y sabores diferentes, un buen sitio para merendar en familia, nos atendió la camarera dana que fui muy amable y gentil sin duda Los recomiendo, volveré pronto
Estuve en la mañana desayunando, molletes muy ricos y gran variedad de panes me atendió Danna quien me brindó información sobre la variedad de tostadas que tienen. Todo un encanto
La atención al cliente es pésima. La camarera de esta tarde unas contestaciones fuera de lugar. Mientras le pediamos, ella con el telefono. Le pedimos varias cosas de la carta como churros y crepes y se negó hacerlo. Nos mando directamente a la cafetería de en frente por los churros
Entramos a tomar un café y un helado y nos encantó todo. Éramos cinco personas y todas dijimos que los helados estaban especialmente buenos.
Y además el trato fue muy bueno. Me dejé allí una cámara réflex con la que trabajo olvidada y al volver a la hora me la habían guardado. Me ahorraron una semana de trabajo y tener que comprarme una nueva.
Tienen ya un cliente de por vida cada vez que pase por Triana.