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Es una mezquita, y lamentablemente ha sido convertida en iglesia, lo que es una distorsión de la historia y la realidad del lugar, y el púlpito mira hacia la Qiblah, lo que socava la idea de iglesia.
Cuando los Reyes Católicos tomaron la Alhambra durante la Reconquista, la Mezquita Real fue consagrada al cristianismo, bajo la advocación de Santa María de la Alhambra, ampliándose 40 m de largo y convirtiéndose en la primera catedral de Granada, antes de la construcción de la actual en el centro de la ciudad.
Con el tiempo, su deteriorado estado dio paso a su demolición en 1576 y posterior reconstrucción en 1581.
Con planta de cruz latina y capillas laterales, destaca su retablo barroco con grandes columnas salomónicas de 1671, así como el Crucificado y las grandes imágenes de las Santas Úrsula y Susana, de Alonso de Mena.
Iglesia en mitad de la Alhambra y al lado del Palacio de Carlos V. Es del S XVII y se construyó en el lugar de la mezquita de la fortaleza. El retablo barroco merece la visita.
Un templo muy bonito y en un enclave excepcional. Un guarda protege el lugar solicitando se hable bajo y no se coma en su interior, priorizando el respeto al lugar en que nos encontramos.
¡Asombroso! ¡No soy religioso, pero no me canso de la belleza de la iglesia! Las esculturas son hermosas, la elaboración del altar es asombrosa, ¡podría sentarme aquí durante horas!
La Iglesia de Santa María de la Alhambra, terminada a principios del siglo XVII sobre el solar de la Mezquita Mayor y su baño, este último conservado parcialmente en la casa donde nació y vivió el músico Ángel Barrios. Las obras del templo se realizaron entre 1581 y 1618, completadas por el arquitecto Ambrosio de Vico siguiendo trazas de Juan de Herrera y Juan de Orea, aunque con fábricas muy humildes en comparación con los proyectos iniciales. Con planta de cruz latina y capillas laterales, destaca su retablo barroco con grandes columnas salomónicas de 1671, así como el Crucificado y las grandes imágenes de las Santas Úrsula y Susana, de Alonso de Mena.