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Iglesia anexa a la catedral del proyecto de Ventura Rodríguez, se iniciaron en 1764 y fueron acabadas en 1801. La cornisa exterior está decorada con estatuas hechas por el escultor francés Miguel Verdiguier. No hay que pagar entrada. Fuente: catedraldejaen
Hermoso templo en Jaén capital, pegado a la Catedral. Esta maravilla, se halla totalmente oculta y cerrada al público y al turista. Hay que aprovechar la hora de la Misa para poder deleitarse con esta joya arquitectónica. El problema es que Jaén no está preparado para el turismo, ni hay "educación turística". Los seres bípedos que abren y cierran cada día este tesoro del arte, parece que les molesta que la gente vayamos a verlo. Los caretos que ponen, las formas frías, las miradas inquisidoras a los visitantes, hacen que uno se sienta incómodo incluso para rezar. Una pena. Pero así es Jaén: falta muchísimo para que estemos a la altura de Europa en lo que a turismo se refiere y a mostrar con alegría, ganas y orgullo nuestro patrimonio artístico religioso
Si eres cristiano es un lugar magnífico para hincar la rodilla y entretenerte un rato, por ejemplo, repitiendo hasta la saciedad Adoro Te Devote! Si eres musulmán, judío, zoroastrista o ateo, te fascinará su belleza, su forma ovalada y su silencio. No molestes mucho a quienes están rezando con tus fotos. Eso sí, no te vayas sin visitar la planta superior, el Sagrario de la Catedral. Es para irte de Jaén flipando por lo espectacular de esa capilla. Berniniana.