Este sitio web utiliza cookies para mejorar la experiencia del usuario. Al utilizar nuestro sitio web, usted acepta todas las cookies de acuerdo con nuestra Política de cookies.Aprende másOK
Que bien…. Comimos muy bien…. Platos muy caseros…. Los chicharrones espectaculares…. El sitio, pura añoranza de casa de campo. Que lugar mas bonito. El menú es cerrado . No hay carta. Visitad si podeis.
No vayas. Nosotros éramos clientes habituales y hoy nos hemos ido con hambre y muy descontentos. Han bajado la calidad y la cantidad de una forma descarada. El servicio también ha decaído muchísimo. En definitiva, fue bonito mientras duró.
La verdad que no he estado en ese sitio, no puedo hablar de su comida ni bien ni mal, pero viendo las fotos, no veo muy higienico que un par de gatos esten comodamente en una cesta al lado de frutas y verduras que luego la gente ha de consumir. Si llega a ir Sanidad para hacer inspeccion, estoy segura que no les iban a decir a los dueños algo bonito, si no que les pondrian una buena multa hasta pudiendo cerrar el local. Los gatos muy monos, pero cada uno en su sitio, por favor.
Sigue siendo un lugar fantástico sin embargo, un año después de nuestra última visita la calidad ha bajado mucho. Ración de chicharrones escasa y plato principal a elegir (carrillada o sepia al curry) en el que la carne y el pescado brillaban por su ausencia. Los postres “caseros” si la tarta de limón royal se puede considerar casera. La coca-cola tenía menos gas que los gaseoductos de Ucrania. Para resumir, lo que antes estaba bien, ahora ya no. Espero que sirva para mejorar y volver al nivel anterior
Llevábamos bastante tiempo queriendo llegarnos a comer así que nos decidimos y reservamos una mesa para 4 comensales, el sitio es espectacular integrado en la naturaleza, las vistas una maravilla, el restaurante muy acogedor, al no tener tantas mesas se agradece esa paz a la hora de saborear los platos, la comida es todo muy casero y cocina tradicional, los platos son generosos y muy bien preparados, vamos que la cocinera es un lujo, las bebidas están incluidas en el precio, cervezas, tintos o blancos de la casa, también se puede pedir algún que otro vino fuera de carta, mención especial para el personal, súper atentos y simpáticos el servicio entre plato y plato es el correcto, altamente recomendable, sin duda un sitio en nuestra comarca que no se puede pasar por alto.
Lugar precioso para ir a comer o cenar, la comida exquisita y muy abundante, el trato ha sido impecable, con un trato muy familiar y agradable, el lugar precioso ya no solo las vistas sino las instalaciones, todo muy rustico, preciosisimo, volveremos a repetir sin duda y eso que vivimos algo lejos, y mi pequeño se lo ha pasado fenomenal. Lo recomiendo totalmente
Un lugar increíble atendidos por los dueños que son estupendos. La Comida riquísima de las manos mágicas de Eva. Preparan todo siempre bajo reserva y lo cocinan solo para la ocasión. Para volver y volver.
Dimos un paseo explicándonos la historia familiar y el entorno, la comida casera buenísima y el sitio embruja, recomiendo reservar y tener esa experiencia
El sitio espectacular no sólo por las vistas y lo acogedor que es, sino por la calidad de la comida, soy celíaca y me adaptaron el menú. El personal extraordinario hacen que sin duda quieras volver. DE DIEZ
No puedes creer que en medio de esos imponentes montes haya un lugar así. Precioso. La cocina, una maravilla. Todos los platos buenísimos. Lola y Rosa, encantadoras. Un auténtico descubrimiento. Por supuesto que volveremos siempre que podamos.
Si eres amante del buen producto ecológico y de un enclave natural y rústico, éste es tu sitio. El servicio es estupendo y el menú amplio y abundante, con cocina de leña a la antigua usanza. 100% recomndable, ambiente privado y tranquilo. No duden en llamar.
Somos clientes desde hace años de este lugar y por desgracia cada día está peor, este fin de semana cerramos la celebración de otro bautizo más, muchísima gente, embutidos en mesas sin espacio para comer tranquilamente, no puedes disfrutar del entorno pues no tienes lugar en el que poder asomar por el exceso de mesas y tengo serías dudas de la capacidad de atender a tanta gente, el menú es menos variado y con menos cantidad por el precio que ofertan, poner dos bandejas de pollo con patatas a cuatro niños y cobrar a 15€ cada uno es un abuso, el servicio por desgracia no fue tampoco el mejor, es por eso que hoy por hoy no aconsejo ir, algo que tras años celebrando eventos y celebrando comidas familiares en fechas señaladas nunca pensé que haría, espero que corrijan y vuelvan por sus fueros, sino, de momento a un grupo de quince personas que hemos sido habituales, nos han perdido, no vamos a volver.
Un sitio con encanto y comida de rancho.sin embargo, presenciamos un accidente de una señora y el servicio no actuó de forma correcta.no les dejaron emplear el baño principal! es una tontería pero hizo desmerecer la jornada y el servicio prestado
La comida muy rica y abundante. Se me olvidó sacar fotos de los platos posteriores. El servicio increíble. El lugar inmejorable. Perfecto para hacer alguna ruta por montaña y luego comer. O una cena romantica
El sitio sigue siendo encantador.la atención magnífica.pero para me gustó la calidad ha bajado.los platos son menos sofisticados y quizás el precio no se ajuste a lo actual. Nosotros fuimos hace 2 años y la expectativas eran súper altas pero esta vez de verdad que ha bajado bastante. Espero que recuperes la línea porque la verdad que es muy buena opción. Toque de atención a los dueños
Una pechá de andar, bien guiados por Kadri, creo que se llama así, una chica de Estonia alta y rubia como ella sola, la tía está en forma, no como yo que doy pena arrastrándome por esos montes. Teníamis tantas ganas de terminar que ni nos despedimos de ella Después fuimos a comer, todo buenísimo, bueno los pimientos del piquillo rellenos de espárragos del mar no me gustaron, pero por cuestión de gustos, todo lo demás muy bueno, recomendable. Así que animarse
Lugar situado en el Parque de los Alcornocales, en pleno campo, alejado del mundonal ruido, donde se come estupendamente con platos cocinados fuera de lo que común.