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Platos y vinos clásicos del sur de España en un restaurante sofisticado con terrazas y vistas espectaculares a la Alhambra, especialmente por la noche. Buena atención y precio medio. La calidad del producto y su elaboración, las vistas y un servicio esmerado, hacen que el precio suba algo más de lo normal, pero merece la pena darse un homenaje de vez en cuando. Platos como el bacalao, el rodaballo, la lubina o simplemente las ensaladas, o sus postres caseros, lo justifican. Un consejo para llegar a este lugar, situado en el barrio del Albaicín, es desplazarse en servicio público por lo complicado del estacionamiento.
Restaurante para disfrutar de la gastronomía y vistas a la alambra. RecomendBle el ajo blanco y salmorejo y sobre todo la atención recibida por Raúl mil gracias por esa velada.
Nos atendieron de manera espectacular. La frase de “siempre gracias a ustedes” de uno de sus camareros nos llegó. Fueron súper atentos! Y la comida un gustazo: pedimos el menú degustación y nos pareció fantástico. Nos quedamos con el carpaccio, la torrija, el canelón y el pescado. Y todo eso en una cristalera con vistas impresionantes y estando calentitos con las estufas
Sitio espectacular, tiene las vistas ideales a la Alhambra. Buen servicio y la comida exquisita, las costillas se cortaban con cuchara jaja. Las croquetas de bacalao muy ricas tambien. Lo difícil son las escaleras de acceso que son empinadas y un poco altas, hay que tener precaución.
Lugar inmejorable donde cenamos la Asociación Deportiva y Cultural Grupo Zapatones de Madrid, con vistas a la Alhambra iluminada. Buena calidad de sus platos. Gracias por el servicio recibido al personal de camareros y cocineros. Un abrazo cordial de Pedro el Peregrino
Lo mejor del restaurante, las vistas y el trato del personal. Situado en un sitio clave de Granada, las vistas son realmente espectaculares. Los platos son muy elaborados (tampoco mucha cantidad) y están ricos. La verdad que merece la pena visitar este restaurante y compensa pagar el sobrecoste de los platos, ya que te sientes un privilegiado en dicho lugar. Vuelvo a resaltar la amabilidad de los camareros, en especial la de un chico (no recuerdo su nombre) que estuvo atento a nosotros en todo momento. Volveré con la familia.
Sitio maravilloso y más si es de noche. El trato es maravilloso y la comida bastante acordé precio- calidad. Vinimos por recomendación pero ya quedará para siempre que vengamos a Granada. Mil gracias por cuidar así la hostelería
Unas vistas impresionantes de la Alhambra, porciones generosas y el personal atento. No acerté con mi plato, que para mi gusto tenía demasiado salsa, pero el steak tartar estaba muy bueno.
A destacar el emplazamiento. Si quieres comer o cenar con unas inmejorables vistas a la Alhambra, es tu sitio. Los platos correctos. Precio algo elevado. Se paga el sitio.
Entorno idílico (maravillosas vistas a la Alhambra), buena cocina, local ideal. No le pongo las 5 estrellas porque me faltó un poco más del personal que nos atendió
Reserver por el cumpleaños de mi novio por las vistas que tiene el restaurante, pero la comida está buenísima y los camareros súper atentos en todo momento, si volvemos a Granada repetimos seguro.
Un local con vistas a la Alhambra. La carta es variada y la calidad es proporcional a los precios. El servicio es impecable y su personal sumamente amables y atentos con los clientes. Me sentí muy cómodo cenando allí con una amiga.
Enclave perfecto, para una misión gastronómica en pleno Albaycin, con vistas impresionantes de la Alhambra. Muy buen servicio del restaurante, impecable el punto de la carne a la brasa. 9 de 10.
Qué decir de las maravillosas vistas nocturnas que se pueden observar desde la terraza de este restaurante, increíbles. La carta muy variada y con precios acorde a la cantidad y calidad de los platos. Recomendaría preguntar al camarero acerca de las cantidades de cada plato para elegir correctamente, ya que en mi caso pequé de no informarme previamente y me sobró quizás un plato. Los huevos a baja temperatura estaban riquísimos y el surtido de quesos muy variado, quizás me hubiera faltado algo más de acompañamiento como picos, tostaditas pero eso ya es cuestión de gustos. El personal muy atento y amable. Por último, el precio del gintònic me pareció algo excesivo aunque partiendo de las vistas que se tienen enfrente es entendible. Volveré si regreso por Granada en un futuro.
Sitio muy bonito, balcón vistas a la Alhambra, acogedor, camarer@s como siempre en granada muy amables y educad@s. Es recomendable reservar. Cena: - Huevos camperos a baja temperatura. - Tartar de salmón. - Calamarcitos en salsa de almendras. - Lubina al horno con patata panadera. - Vino. Todo muy elaborado Precio muy razonable. NO LO DEJES PASAR
Hemos celebrado nuestra boda y no podemos estar más felices, siempre dándonos facilidades y soluciones en los preparativos antes de la celebración, la comida estuvo buenísima y abundante al igual que la bebida, los camarer@s siempre pendientes con amabilidad y profesionalidad de que no les faltara a nadie de nada, un servicio fluido y eficiente a pesar de las circunstancias con las restricciones en horario que tenemos por el momento, los invitados quedaron muy satisfechos y prendados de las maravillosas vistas que tiene a la Alhambra, sin dudarlo volveríamos a celebrar nuestra boda en restaurante Las Tomasas mil veces.
Un lugar precioso con el encanto y la magia de la Alhambra, un cumpleaños inolvidable en un lugar increible con una atencion por parte de los camareros buenisima y una cena perfecta con todo en su punto
Siendo de Granada con mis años, me he recorrido todo el Albaicin y puedo decir sin lugar a dudas que es el mejor de todos, y el único donde he repetido varias veces ya, jamás me canso. Tiene a mi parecer la mejor y más grande terraza por lo que cenar con vistas es mucho más sencillo. También está lo suficientemente retirado de San Nicolás que no escuchas más ruido que el del agua correr y el que puedan hacer los comensales que comparten terraza contigo, que suele ser poco ya que reina el silencio, la paz y el embrujo por la Alhambra siempre presente. Hace unos años quise deslumbrar a un muchacho llevándolo allí, y lo deslumbré del todo.este finde hemos renovado nuestro matrimonio y celebrado allí, con la sorpresa que nos han preparado una mini tarta nupcial con su mejor postre "Las lágrimas de Boabdil", un detalle que no podré olvidar nunca. Gran equipo, gran restaurante, la visita es obligada.
Imprescindible visita en Granada. Vistas estupendas a la Alhambra con una carta muy variada y cuidada. Precio algo más alto que la media de la ciudad aunque totalmente justificado. Recomendable cena para ver el atardecer.
He ido a comer con mi pareja. El lugar, con la Alhambra de fondo es de lo más bonito que se puede ver en el país. El trato del camarero, atento, rápido, educado y muy agradable. La comida ha estado estupenda. El entrecot y el solomillo en su punto acompañado de un de una botella de Emilio Moro. He pagado con gusto hoy.
La comida está normal nada del otro mundo y son muy cordiales pero el servicio es malo no es culpa de ellos es que son muchas mesas para dos meseros impossible dar un buen servicio no vuelvo pero esta aceptable la vista de la alhambra muy bonita
Perfecto lugar para alimentar cuerpo y alma. Imposible estacionar, hay que ir en taxi. Atención agradable. Sobre su carta, depende de cada uno. Veo corta la carta de vinos pero.también depende.
Una localización fabulosa, las vistas a la Alhambra inmejorables, un servicio impecable, la comida muy rica. El precio un poco alto pero en consonancia con las prestaciones. Para ponerle un pero, no sé si una persona en silla de ruedas podría entrar ya que hay que bajar bastantes escaleras hasta llegar al restaurante, a lo mejor hay otra entrada que no he visto. Un sitio a recomendar.
Comida muy buena y una vista simplemente espectacular! No pidan muchos entrantes, pues tienen un tamaño generoso y hay que dejar espacio para los platos principales.
Las vistas son inmejorables al igual que el trato y paciencia que tuvieron con nosotros. Desde el primer momento fueron muy atentos. Tomamos el menú 2 y todo estuvo riquísimo. Volveré.
Excelente restaurante, hacia tiempo no me sentía tan agusto en un sitio. Lugar, vistas, atención del personal tan amable, educados, y a la vez, cercanos. Muy buena calidad en los platos que probamos. Sueño con volver
It may be more pricy compare to other good restaurant around, but the view of Alhambra and the quality and authenticity (not dumbed down for tourists) of food justifies it 100%
Todo muy bueno, el personal muy simpático y el escenario, mejor imposible. Pero no puedo dar 5 estrellas cuando nos sentamos a las 2 y media y nos levantamos a las 5.3 personas y 4 platos en 2 horas y media.
Grandisimo servicio acompañado de unas preciosas vistas de la Alhambra. Una excelente comida en familia servida con un pan riquisimo, blando y calentito.
Solo con las vistas merece la pena. Cocina adecuada, con platos que sorprenden por sus mezclas de sabores y texturas. Profesionales en el servicio y aunque a veces parece lento, no importa. Tienes las vistas. Preguntar fuera de carta.
Solo por contemplar la espectacular Alhambra ya vale la pena. Todas las mesas con vistas. Ideal para disfrutar de una cena romántica en pareja o en familia. Carta de calidad. Salmón marinado con pan de cristal exquisito. Guarniciones correctas. Servicio bueno. Relación calidad/precio buena. Vistas. De ensueño
Creo que es la vista más impresionante de Alhambra y sin ser menos importante he recibido un trato por parte del personal super agradable y profesional. El solomillo con membrillo y queso de cabra espectacular! En fin una experiencia única. Merece mucho la pena!
Un servicio excelente, una localización espectacular, igual que las vistas. La comida está buena, probamos el dúo de croquetas, los huevos camperos, la presa de cerdo ibérico y las chuletillas de cordero. El servicio tiene un tempo adecuado y los camareros son muy agradables y educados, necesitamos un taxi y nos lo pidieron.
Las vistas espectaculares y el servicio y muy bueno. Las carnes muy buenas pero el acompañamiento, como las patatas, muy sosas y secas. Las trufas grandes x lo q se hace pesadas pero el hojaldre crujiente y muy bueno
Se trata de un lugar espectacular con unas vistas maravillosas. Se encuentra muy cerca del Mirador de San Nicolás, justo en frente de la Alhambra, por lo que si el tiempo acompaña es un lugar ideal para comer a mediodía. Además, el personal que nos atendió fue realmente amable y profesional, y la comida, estupenda, sobre todo la crema de setas. Nos encantó y por supuesto que repetiremos. Seguid así, que estáis haciendo un trabajo magnífico.
Un restaurante de tamaño mediano, un antiguo carmen Encaramado en la ladera del Albaicin mirando a la Alhambra, con unas vistas increíbles Buena cocina con platos tradicionales y otros novedosos. Muy ricos los chipirones con setas sirtaki Servicio amable y rápido No apto para ir con silla de ruedas Podría ser romántico No caro Recomendable
Muy buen restaurante con vistas a la Alhambra. En invierno las plazas se reducen bastante por lo que es casi obligatorio reservar. Toda la comida muy buena y el servicio atento y profesional. El ritmo de servicio de platos ha estado un poco lento con los entrantes, pero estando en ese sitio con esas vistas no se hace largo.
Fuimos 15 amigas de cena, la atención muy buena, tardaron un poco en servirnos pero nos hicieron la espera más amena con un jamón invitación de la casa. Cada una pidió un plato, pero para el centro fue tataki en salsa de ajo blanco muy bueno. Pedimos algunas lubina, tartar de atún (muy bueno) y steak tartar (brutal). 3 botellas de vino blanco de la casa. Fueron unos 40€ por pax. Lo mejor las vistas de las que disfrutamos. Sin duda un sitio con mucho encanto.