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Solía ir mucho y me encantaba pero anoche tuve una experiencia malísima. Uno de los camareros me tiró la copa cuando acababa de indicarle al otro que la copa era mia, que no la tirase. Reconocer el problema bien, decir que es lo que hay, que te fastidies ya no está tan bien. La próxima vez me gastaré el dinero en otra parte.
Muy buen lugar para ir a pasar un buen rato con amigos. Lugar tranquilo, inclusivo y con un buen ambiente. Creó que la gente +30/+40 puede ir sabiendo que va a pasarla muy bien. Me parecieron muy amables los trabajos, en especial Mario, el encargado de seguridad.
Solo una pega, pero enorme: Permiten fumar (y fuma incluso el personal del local) en la zona del guardarropa; algo que, a parte de ser ilegal, es una torpeza, ya que se está permitiendo fumar precisamente en la zona donde los clientes dejan su ropa, garantizando un olor a tabaco en ella.
Regulero. La música bien, pero podría ser perfectamente uns playlist de Spotify de lo previsible que es. El WC más sucio que he visto en una discoteca, para vomitar.