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Hoy día 04/01/22 he vivido una de las experiencias más desagradables de mi vida. Me he visto obligada a poner una reclamación a Oysho Puerta Europa debido al pésimo y negligente trato recibido por las dependientas del mencionado establecimiento. El colmo de la humillación que he sufrido ha sido que mientras rellenaba la hoja de reclamaciones, una de las dependientas me increpaba constantemente, diciendo en voz alta al resto de clientes que yo le estaba faltando al respeto. Inadmisible por tanto exigo una rectificación y disculpas por parte del personal de la rienda
Trato pésimo al cliente, rebatiendo y negando mi palabra. Me he sentido humillada y frustrada. Atención al cliente nefasta, capacidades para gestionar y solventar un ínfimo altercado inexistentes. Las dos chicas que me atendieron carecen de capacidades mínimas para estar de cara al público. Al tratar al cliente es necesario un mínimo de empatía la cual han demostrado que no tienen.