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Recomendable para tomar una copa después de cenar por la zona. Vistas al río Guadalete, suele haber una brisa suave y ka variedad y precio de las copas está bien.
Desastre total. 23.30 no hay hielo picado para hacer mojitos. La Radler está caliente. El tirador de cerveza no funciona. No hay servicio en mesa. Que mala suerte hemos tenido.
Es una pena tener que esperar 40 minutos por un cóctel mal servido. La mitad de los cócteles de la carta ya no están disponibles, y encima no nos sirven los cócteles que queremos
NO SE DEJEN ENGAÑAR, son unos caraduras estafadores. Primer aviso: carta sin precios. Y concretando, las caipiriñas son limonadas cobradas a precio de caipiriñas, deben llevar unas gotas de cachaça, si es que llevan algo. Y para colmo, las camareras se niegan a llevar las consumiciones a las mesas, bueno, mejor dicho, llevan las que quieren, que es peor
Ubicación fenomenal. Para ser un establecimiento que solamente dispone de terraza no se realiza servicio en la misma, se trata de autoservicio en barra.
Sitio bueno y acogedor para ir a tomar unas copas o unos cocktails ya que tiene gran variedad donde elegir y muy bien preparados, tienen música de fondo y puedes sentarte en una mesa alta o baja, el único pero que le pongo es que tienes tú que levantarte a pedir las cosas si tuvieran servicio en mesa sería un sitio 10
Sitio agradable si hace buen tiempo. No tenían cócteles, sólo el típico mojito, no sé si porque nunca los tienen o porque lo tendrán por temporada pero a mí me ha faltado eso.
Buen sitio para tomarte algo (solo.mirando al río y el recorrido que lleva tanto por el agua como por la la ciudad), o por la compañía de tu pareja (umn me encanta tranquilos charlando tomando algo y viendo pasar.) O en grupo! Los amigos! Woooo! Y excelente trato! Lo recomiendo!
Ambiente muy bonito, con un vista hermosa al río. Lo único que no me pareció fue la atención, estuvimos un buen rato esperando en la mesa hasta que se nos acercó la camarera y nos dijo que el pedido se realizaba en la barra.
Paré a tomar un vino, el tinto era normalito y el blanco algo mejor. Servicio normal. Un lugar bueno para la noche y tomar copas, pero no para la tarde y tomar vinos.
No hay mucho que comentar, copas 6,50€ pero te tienes que ir a pedir tu a la barra y llevártelo a la mesa, cuyos taburetes necesitan un repaso de bricolaje.
Pésima atención! Fuimos a las 5 de la tarde, pedimos café y no tenían, pedimos cócteles y no tenían.le dijimos a la camarera que pensaríamos que pedir pero nunca vino. La mesa de al lado también se tuvo que levantar porque después de 35 minutos la camarera nunca más vino y había 3 mesas en total.nunca más volveremos, el sitio es ideal la atención nula
Sitio muy agradable y ambientado para tomar desde una cerveza a cockteles, no sirven en mesa, precios normales 7€ los cockteles, nos gustó, pasamos un buen rato.
*Por Puerto Chico no asomes el hocico* La carta es sin precios, tienes que pedir tus propias consumiciones en barra y una camarera nos lo indicó de una forma muy borde. El sitio llama mucho la atención porque está muy bien decorado, es muy bonito, tienes música animada y buena vista. Una pena!
Muy buen sitio para tomar una copita después de cenar en el puerto de Cádiz. Tienen bastante variedad de cócteles y atienden muy rápido. Además tengo entendido que antes de la época COVID había dj y música en directo (aunque cuando estuvimos nosotros estaba un poco alta). La calidad de las bebidas para el precio que tiene, de 10! Muy recomendado.
Bien el día que atentienden las mesas, bien, mal el miércoles pasado que después de lo que le cobran a uno por una copa o lo que tomes, tienes que autoservírtelo.mal, muy mal.
Un bonito lugar a la orilla del río Guadalete para escuchar música y tomar una copa. Ambiente tranquilo, distancia entre mesas y cortesía por parte del personal.
Catastrófico. El cuarto de baño da muchísimo asco y por lo que se lee en las críticas no es algo puntual. No había papel higiénico en ninguno de los servicios y la mitad estaban encharcados de mejor no saber qué. Pido papel en la barra y me dan dos servilletas pequeñas de mala gana, le digo que si por favor me puede dar más y me da otras dos contadas perdonándome la vida. Atención lenta y poco motivada. Pasa una camarera por nuestra mesa, le preguntamos si le podemos pedir otra ronda a ella y nos contesta que sí pero que ahora no y nunca más vino. Es una pena porque el sitio está bien situado pero con esa atención no vale la pena volver habiendo tantos otros donde tratan con amabilidad.
Ha habido cambios respecto al año pasado y anteriores, menos personal, no atienden en mesa, hay que pedir en barra, pero no me parece grave. Música, para mi gusto, demasiado alta que dificulta la conversación. A pesar de todo, un lugar para pasar un rato agradable.
Buen sitio para tomar una copa tranquilo después de cenar, cuando no tienes ganas de mucho jaleo. Sólo tiene dos pegas para mi gusto, la primera es que la música está alta teniendo en cuenta que es un lugar para tomarse una copa sentado, no es para bailar; y la segunda es que no atienden en mesa.
El lugar está bastante bien, es una terraza agradable para tomar una copa al lado Del Río en el Puerto de Santa Maria. La oferta de bebidas es buena y de cálida y tiene varios ambientes para sentarse a disfrutar de la consumición.
El único problema es la actitud, o la carencia de ésta, por parte del camarero que estaba por la noche el 13 de julio, alrededor de las 23: 30 horas. No había demasiada gente en la terraza, quizás esta circunstancia le animó a sentarse en una de las mesas, como si de un cliente más se tratara, tanto es así, que pensamos que era eso, un cliente esperando a ser atendido que, aprovechaba la espera tecleando en un teléfono móvil.
Fue tras acomodarnos y llegar otras personas cuando comprendimos que el sujeto del móvil era el camarero quien, como no prestaba atención alguna al desempeño de su trabajo, atendió a otras parejas, a pesar de que nosotros habíamos llegado antes. Tanto es así, que opte por acudir a la barra a pedir nuestra consumición, siendo atntido por la camarera que en esta se encontraba de manera correcta.
Hemos llegado y estaba el bar casi vacío. Nos han dicho que nos atendían en mesa. No ha venido nadie. Hemos vuelto a ir a la barra y nos han dicho lo mismo. La camarera rubia se ha dado 3 paseos, ha atendido a dos mesas que han después y a nosotros ni caso. 15 minutos sin ser atendidos y el bar vacío. El personal deja mucho que desear
No lo recomiendo, pedimos un botellín y un salito nos cobraron 8€, lo vi un poco caro, bueno ere un buen sitio y lo entendí, pero luego Voi l cuarto de baño con una peque y todos sucios, sin papeles higiénicos, papeleras sin recoger.para no ser ir en mesa y tener a cuatro en barra tranquilos pq no había gente, no debería de estar eso así y sin servicios en mesa, no lo entendí, no volveremos.
Lugar encantador de cócteles y copas frente al río pero tardaron en servir muchísimo. Lo cual baja calidad frente al servicio. Más personal, respaldaría el problema, el único coctelero, muy bueno por cierto, estaba desbordado.