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Demencial atención e insensibilidad ante una urgencia de salud. Mi madre de 87 años, diagnosticada de arritmias y fibrilación auricular. Enseñándoles el informe del cardiólogo y la receta en foto, no nos quisieron vender el medicamento que controla su corazón. En el centro médico San Sebastián ya no estaban los médicos y no teníamos la receta físicamente (aunque la llevábamos en foto). Les aseguramos que les llevaríamos la receta posteriormente. Y nada. No hubo manera. Es increíble que una profesional de la rama de la salud, no se haga cargo de una situación así. No se trataba de un simple dolor de cabeza, sino, de una arritmia de una persona de 87 años enferma del corazón. Nunca volveré a esta farmacia. Ni yo, ni ninguno de mis allegados. Nada que decir de las empleadas. Siempre amables y super profesionales pero la responsable de esta farmacia no estuvo a la altura de las circunstancias ni profesional ni humanamente.
ALUCINANTE! El trato que he recibido parece de cámara oculta, no he metido bien la tarjeta y parece que le molestó y ya se encargó de colocarla ella con una violencia nada propia. Y cuando le di una de las recetas de mi hijo y me pidió la tarjeta que no tenía la chica se ríe con ironía, para que luego se de cuenta que ni lo pasaba! Vamos, lo que yo digo, una falta de educación y falta de humanidad GRANDISIMA. Nunca más volveré a entrar.
Es la farmacia más cara de Conil, el mismo medicamento y encima poniendo problemas 85€ en otra farmacia 35€ y sin ningún tipo de problema con receta médica por supuesto y aún así, ponen problema! No la recomiendo…
Hay mucha variedad, todo muy ordenado, cumple las medidas covid y las muchachas son muy agradables. Además tiene fácil acceso y facilidad para aparcar.
La rubia una autentica borde, parecia que me estaba haciendo un favor vendiendome el producto, es tu trabajo crack, si no te gusta, pues te buscas otro. Andare un par de manzanas más para irme a otra farmacia con tal de no ir a esta. Ni me miraba a la cara cuando me hablaba, asquerosa. Lo dicho, no volveré