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1. El aparato de calefacción de la planta de abajo no funcionaba, sólo echaba aire frío. No podíamos estar en la salita, pasamos bastante frío.
2. No había agua caliente. Ni en la ducha ni en el lavabo. Así que después del frío que pasamos sin calefacción se suma el no poder ducharnos con agua caliente en pleno mes de Enero.
3. La mampara de la ducha no está bien acoplada, por lo que el agua se sale, mojando y empapando todo el suelo.
4. El WiFi no funciona.
Y lo peor de todo es que Eugenia pone excusas y no da soluciones ante estos problemas que considero BÁSICOS de solucionar antes de prestar un servicio de alojamiento.
El apartamento no está mal. Pero todo queda anulado porque la ducha estaba rota y no nos pudimos duchar. íbamos a una boda y no podíamos ducharnos. Íncreible. Llamamos varias veces a Eugenia pero no nos dio ninguna solución. Un desastre. Solo en el último día, Tania, muy amable nos cedió otra habilitación para ducharnos, aunque ya era demasiado tarde. Total: no os quedéis aquí. Esperamos que el dueño les esto y nos compense de alguna manera “Tercermundista las ayudas que ofrece este sitio”