Bar La Plaza

NO RECOMENDABLE BAJO NINGUN CONCEPTO, UNA MOSCA DENTRO DE UNA MANZANILLA SALTO LA ALARMA DE TODOS LOS QUE ESTABAMOS ALLI, Y ENCIMA NOS DICE EL JEFE, OJO A LO QUE VOY A DECIR, NOS DICE EL JEFE QUE "NO NOS COBRA LA MANZANILLA DE LA MOSCA" IMPRESIONANTE, POCA PROFESIONALIDAD YA QUE NI SIQUIERA SE DISCULPARON

Paramos a tomar un café.
Lástima no haber tenido más tiempo para ver el entorno y comer algo.
Tanto los edificios como el bar tenían buena pinta.

El chef Vicente Sánchez nos sorprende con su cocina de autor propia de la Guía Michelin.
Uno de los mejores cocederos de marisco de la zona, donde las nécoras son su especialité.
El arroz de verduras sublime, propio del mejor Quique Dacosta.
Eso si, los postres no los recomiendo, pero en líneas generales TOP!

Despues de 1h esperando sin atendernos teniendo reserva y ofrecernos un entrecot que les ha sobrado nos vamos sin comer. Por no mencionar la higiene inexistente de la cocina.servicio pésimo a otro nivel.

Lugar con mucho encanto en ola plaza mayor de la fresneda junto a sus porches y el portal, servicio rapido, espacio en las mesas de la terraza algo justo, terminamos comiendo a unos 40 centímetros de otra pareja (al final entablas conversacion) pero si buscas algo de privacidad es complicado comida muy buena y de calidad, pedimos entrecote y el punto d la carne era exactamente el que pedimos y a la primera, destacar la calidad del producto y el buen precio, lo que no me gustó fué que el corte de carne, que era excepcional, venia acimpañado de patatas congeladas de bolsa, preferible pagar 1€ mas y poner patata natural que no desvirtua el plato o directamente unos sumoles pumientos del padrón fritos y ya, el interior del local un poco caotico y saturado por eso le doy menis estrellas en ambiente, lavabos algo mejorables, terraza muy aconsejable aunque si hay gente seguramente comas al ladito mismo de otra mesa (poca privacidad) en cuanto a comida, un 9 (por las patatas) en cuanto a lugar y encanto un 10, servicio rápido pero lo dicho hay que pulir un pelin para que le de 5 estrellas, de todas formas volveré seguro.

Pues bastante regular, pedimos las bravas con la salsa a parte por si picaba mucho, pero el cocinero decidió que no picaban y las roció bien de salsa, la dorada "a la brasa" nos hizo creer que la habían hecho en papillote y la cuenta constaba de 4 varios, que me tuve que creer también que estaba bien. Si tenéis alternativas no escojáis esta. La limpieza merece un post aparte.

Si quieres sentarte y disfrutar de las vistas de la plaza, bien. Si quieres comer o tomar algo, olvídate. Jamás te atenderán.

El mejor arroz que me he comido. El dueño es una persona agradable y excelente cocinero, los camareros son muy muy serviciales. Y sólo decir una cosa esto no es una ciudad aquí se viene a tener tranquilidad

Experiencia muy mala. No lo recomiendo. El precio no se ajusta a la calidad. Cocina insalubre. Muy poca limpieza.

Fatal.
Experiencia malisima. Torreznos 10 e y bravas 6.50. Todo malisimo, frito con mal aceite y precio estocada y mas caro para los turistas.

Nos ha estropeado el dia

Horrible, bar sucio, el dueño muy agresivo con el personal. Nos fuimos antes de consumir por la agesividad del dueño con la camarera.

Pésimo servicio! 1h y media esperando para comer una ración de jamón y queso! Nada recomendable.

Desastre total cocina pequeña para tanta mesa llegamos 4 personas a las 12.45 horas pedimos bebidas entre ellas cerveza y nos las sirvieron sin copa porque no tenian mas copas, como cliente no es mo problema, pedimos 4 platos de tapeo esto como digo a las 12.45 y a las 14,30 nos traen dos platos de los 5 pedidos como veis algo mas de 1 hora y media esperando y no conforme deseperado por la espera decidimos pedir la cuenta de lo que tomamos y liarles el pollo como digo un desastre

Sin duda el peor servicio que he sufrido nunca. 40 minutos para unos torreznos. Reclamadas unas simples aceitunas tres veces. Sólo había tres mesas ocupadas. La cuenta la pedí tres veces y tuve que entrar al final para pagar. Cuando entré los dos camareros estaban mirándose y escuchando una canción en la radio y les tuve que preguntar si pensaban darme la cuenta y la respuesta fue " Ah, quiere usted la cuenta ". No volveré jamás. Lástima porque tiene una ubicación privilegiada.

Fuimos a comer unas tapas y unos bocadillos. El resultado no fue bueno ya que los productos estaban muy aceitosos. El servicio un poco pobre.

El 2 de octubre 2022 unos exaltados indepes catalanes, insultando a todos los españoles llamándonos perros, a la guardia civil, a los hijos de españoles y en el Bar la plaza no ejercieron el derecho de admisión sacándolos de la terraza, tuvo q ser un Pacífico Turolense el q les llamase la atención para q dejará de insultar a la mayoría de clientes.
Desde luego para no volver. Vergonzoso

La verdad que al llegar a la Fresneda, no espera ver nada, que ha sido el caso, pero la verdad que llegar a La Plaza ha sido lo mejor que me ha pasado hoy. La atención muy cercana, incluso familiar diría yo. El único punto negativo que le pondría al sitio, es que no había Nestea.
Muchas gracias por todo y perdón por tan poco <3

Te dan la carta sin los precios. Te tienes que levantar para leerlos en el cartel. Precios carísimos. Y encima algunas raciones y platos del dia te las sirven solo si pides dos (prepara 25€ por dos platos de paella, por ejemplo. Porque uno solo no te ponen). Lo más barato, las patatas bravas, nos dicen que se habían acabado. ¿En qué bar de España se quedan sin patatas? Y cansados de esperar los calamares pagamos lo bebido y nos fuimos.

Nos queríamos quedar a comer pero cuando hemos visto como tenían a su perrito encerrado en una "habitación" yendo hacia los lavabos con mucho calor y que sólo podía sacar su morrito por una especie de gatera nos hemos ido.

Bar sencillo y sin pretensiones. Servicio muy amable y rápido. La ensalada y los calamares que pedimos eran raciones copiosas.

Hemos comido hoy allí y el arroz meloso con setas, conejo y caracoles estaba riquísimo, cantidad abundante. Servicio amable y rapido. Buen precio. En la misma plaza (ojo que hay dos bares juntos, pero no son los mismos). Quizá sería mejorable la decoración, un poco anticuado.

Un horror de sitio al que fuimos a comer porque no había nada más abierto en el pueblo. Y es una pena, porque la ubicación es muy buena.
Tardaron una hora y media en servir dos simples bocadillos de jamón y una ensalada.
Cuando preguntamos al camarero por el retraso nos contestó muy maleducado y con cachondeo.
La limpieza brilla por su ausencia.
Podría seguir escribiendo cosas negativas sobre este sitio, pero vamos a resumirlo diciendo que ni se os ocurra ir a este bar, es mejor que comáis cualquier cosa de una tienda de gasolinera.

No volveré. Tardan una eternidad en servir. Nos fuimos sin comer lo que habíamos pedido después de 45 minutos y, además, el cocinero un maleducado, criticando a los turistas. Sobrevivirán por el sitio porque por lo que es el servicio.

El menjar molt bò, sobretot les braves i el pimentons del piquillo. Encara que els daria falta un altre cambrer/a perquè el servici ha sigut bastant lent.

Però molt bò i a bona zona.

Buenas noches: Le pongo una estrella porque no se puede poner menos. Impresentable en todo. El día 21 de agosto llegábamos mi pareja y yo de viaje y fuimos a este bar para ver si nos podían dar de comer el trato fue nefasto Nos dijo con mala cara, ahora estoy comiendo ; si quieren se sientan ahí y esperan a que termine, nos fuimos. El bar sucio, un mal educado, falta de profesionalidad. Tenían que pasar una inspección. Si tuviera una visita de Chicote a este le daría un infarto. No recomendable. No volveré nuncaaaaaaa.

Menú molt digne. Servei molt bo. Molt amables i rapits. Un lloc molt recomenable. Relació qualitat preu molt bona

Mala experiencia. Fuimos a comer y no tenían de nada, pedimos unas patatas bravas y nos sirvieron patatas hervidas acompañadas de ketchup.

Me duele dar un uno, pero cuando ves al cocinero con la mascarilla en el cuello todo el rato, se te quitan las ganas de comer. Eso sí, las camareras muy amables, culpa suya no es el que haya decidido no comer aquí.

Comida ok, adecuada al precio. Las patatas especialmente buenas. Sin embargo, falta de profesionalidad al no ofrecer alternativas al plato pedido cuando no les quedaba uno de los ingredientes principales y directamente servirlo sin él.
No repetiría.

Vergonzosa la actitud del personal. Para 2 cañas y un platito con 6 aceitunas rellenas (que ni siquiera del terreno) primero me dice un precio y acto seguido y descaradamente me dice que no, que es 1 euro más ¡¡¡ las aceitunas que van a precio de oro! Y la hijiene brilla por su ausencia.

MALA ELECCIÓN

El sitio en su interior no es comodo, pues tiene mucho humo, pero fuera se esta bien.
Las paellas estan muy buenas, es la segunda vez que vamos. El dueño no tiene buen caracter, grito a una de las camareras.
El servicio y las chicas genial. Tardan mucho pero te avisan de la demora.

Chicote tendría mucho trabajo en este local (pesadilla en la Fresneda), más de una hora para servir el primer plato, otra hora para el segundo. Gambas crudas, no repetiremos, lastima, local con encanto y emplazamiento privilegiado, con un poco de profesionalidad se podría sacar un mejor rendimiento a este establecimiento.

Por el trato que tuvimos, parecía que no nos querían atender; hubiera sido más fácil decirlo desde el principio que no podían atender, en lugar de querer que nos sentaramos para tomar sólo unos refrescos. El lema que te decían era: " ahora voy" y nunca venían, y cuando entrabas dentro estaban de cachondeo, así que no merece gastar tiempo yendo a este sitio.

Mejor no pedir fideuá. 4 trozos de pimiento rojo, 4 judías redondas y 4 trozos de calamares y muchhhhoooooo pimentón rojo por 12euros el plato.

Lamentable, mesa reservada para las 14: 30 y nos trajeron la comida a las 16: 15 h, ademas anulandonos platos porque decian q el aceite estaba demasiado refrito, el plato d sepia el peor q hemos comido, los vasos de plástico, lo unico bueno el morro. Con unas ganas d ir al meson d al lado q por respeto no lo hicimos

Mas de una hora paraservir un entrecot, el resto de los comensales de la mesa habíamos comido cuando uno estaba sin comer. Las mesas de alrededor llegaban comían y marchaban cuandoseguiamos esperando. La gestion del chef muy mala.

Impresionante. Un modesto bar en el que te hacen en el momento cualquier ración o tapa. Con un mimo y una dedicación que en pocos lugares consigues. Algo tan sencillo como unas papas bravas hechas de patata tierna y con piel. Una excelente salsa suavemente picante. Cerveza fría y un trato exquisito. Enhorabuena. Esto es trabajar bien en la hostelería. La Fresneda ofrece muchos lugares de restauración pero es seguro que este es uno de los mejores para tapear y poder comer. Tapas, raciones, carnes brasa, ensaladas, una forma muy saludable de comer o cenar

Es un bar muy pequeño pero la comida está buenísima. La camarera que nos atendió fue muy agradable. Recomendadísimo

Pedimos fideuá, y la verdad que todo era pimiento, con mucho menos piedes hacer mejores fideuás. Nada recomendable, y el precio alto.

Simplemente no perdáis el tiempo. Servicio lento y malo con engaños y malos modales. El dueño impasible. Un desastre. Lo peor que he visto en la zona

Servicio muy lento, raciones caras y escasas. Mejor no pedir las almejas a la marinera. Para tomar una cerveza y poco más

Las patatas brabas solo cocidas no tocaron el aceite para nada.
Lo demas se podia comer y muchas cosas cuando pedias no tenian en tapas.

Aunque llegamos un poco tarde a comer nos atendieron de forma estupenda, pedimos varios platos combinados, ensalada y puntillas para el medio. Cremaet excepcional a pesar de que en esta zona lo hacen sin café, este lo sustituyen por varios granos de café.

Las bravas que pedimos estaban buenísimas tardaron un poco en servirlas, pero en general la comida y atención buenas. Buen precio.

Bar de pueblo que te sorprende gratamente. Servicio un poco lento pero trato entrañable por lo que se perdona todo.

Si pasas por la Fresneda, no dudes en parar y probar sus tapas! Y la terraza en verano con vistas espectaculares

Buena situación pero, a mi juicio, mal gobernado. Tomamos un arroz caldoso con conejo y caracoles, rehogado en pimentón y sin más sustancia. Durante toda la comida, desde el interior del pequeño local, no dejó de sonar durante una hora, regetón a todo volumen y para rematar la faena, no dejó de pasar cada miembro del restaurante a preguntar si todo estaba bien.
Espero que mejoren en el futuro porque si no, les auguro una corta vida.

Pedimos dos cafés y se liaron, mucho camarero y mala organización y la limpieza de la barra deja mucho q desear

Muy Caro dos cervezas dos cocacolas unas almendras i 4 banderillas de aceitunas i anchoa 16.30 €.