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El café potente, se le puede llamar café te tomas uno y vas despierto todo el dia. El servicio tanto en mesa como en barra muy bien coordinado, camareras muy serviciales. Un sitio que puedes estar tomando algo, suele estar concurrido por las mañanas.
He visitado esta cafetería toda la vida y no pienso volver, esta mañana la actitud de las dos camareras ha sido lamentable, prefiero no entrar en detalles. No vuelvo en mi vida, eso lo tengo claro.
Lo mejor, las patatas Europeo. No dejes de probarlas. Puedes elegir entre varios tipo de salsas, la picante y de queso recomendable. Los bocadillos están también bien. Muy recomendable la tapa de jamón batido.
Cuidado cuando pidáis las patatas fritas, lo hemos pedido y cuando nos ha llegado a casa eran unas patatas fritas de bolsa de toda la vida. Mogollón de malas y por el módico precio de. 4,40. Qué por ese dinero ya me bajo yo a la tienda de al lado y me compro muchas más. Lamentable no lo recomiendo.
Teníamos un buen recuerdo de este sitio y hoy hemos hecho pedido para llevar. Se han equivocado en ambas hamburguesas (sin rastro del rulo de cabra ni los champiñones) y nos han cobrado 3€ por unas patatas de bolsa. No creo que volvamos pronto.
Recomiendo pedir las Patatas Europeo. Desaparecen de la bandeja en un visto y no visto. Los bocadillos están muy ricos. La atención, estupenda. El local sin grandes "florituras", no le hacen falta. El único pero, que no hay platos para celíacos.
Buen sitio para cenar y compartir raciones, las patatas con salsa estaban increibles sobretodo la salsa roquefort. Muy buenos precios y buen ambiente. Lo recomiendo sin duda.
Trato muy desagradable por parte de la camarera en los desayunos tercera vez consecutiva que le pedimos zumo de naranja natural y no lo tiene dice cuando está anunciado en una pizarra, luego se equivoca con parte del pedido y malas caras continuadas que provoca que te sientas incómodo y no vuelvas pese a que la comida sí que merece la pena.
La cena muy buenísima, pero la camarera que nos atendió maleducada y odiosa, literalmente nos hecho del lugar sin amabilidad bueno el dueño debería de estar más pendiente del personal que contrata.
Horrible experiencia, las 3 camareras hablando a un volumen ensordecedor. Y una de ellas sin mascarilla, por cierto. Bueno, en la barbilla Es para no volver, al menos al interior del bar
Bar bastante recomendable. Hacen unas patatas caseras en forma de bolsa caseras espectaculares. Reservamos a las 13: 50 un sábado para las 14: 30 para 15 personas y no nos pusieron ninguna traba. Las chicas del bar son súper agradables.
Tiene una terraza que lo único que tiene de malo es, que pasan bicicletas y patinetes a toda velocidad, cuidado al levantarse. Por lo demás, muy agradable y buen trato.
He pedido un café 50' antes de que cerraran y no me lo han querido servir pq habían limpiado la cafetera y también acompañado de unas malas caras y hacía a mí y mi pareja.
La calidad de la comida no es nada buena, las patatas son interesantes tipo lays pero caseras. Pero la comida las salchichas que nos pusieron no estaban en buen estado.
El dueño es una versión moderna de capataz de Louisiana. Le falta el látigo y la escupidera de tabaco. Sus empleados trabajan entre el miedo y la desgana. El plato estrella: miseria rebozada en decepción.
Tenía muchas espectativas con este local ya que paso a diario por la terraza y veía los bocadillos y raciones que ponen. Hoy he podido ir, previa reserva, y mis espectativas se han visto cumplidas. Lo mejor de todo las patatas fritas, luego las verduritas en tempura, la ventresca con cebolla caramelizada y pimientos de piquillo y para terminar tarta de queso casera. Todo riquísimo. La atención y servicio de las camareras inmejorable. Muy limpio el local, desinfectan mesas entre clientes y veo que cumplen con las normas sanitarias. Yo lo recomiendo, además de precio está muy bien en relación a la calidad y cantidad.
Es una zapateria que merece la pena ir ha comprar pues tienen calzado de todos los precios y siempre hay rebajas durante todo el año y las chicas son muy amables
Café malo. Bocadillos pequeños y caros. Servicio eficaz, pero desagradable. Bar vacio ý me exigen que mis hijos menores de 2 años se callaran. No vuelvo.
Lo primero de todo, comentar que he visto las fotos que tienen expuestas del local, y la abundancia y diversidad de tapas que se muestran, yo no las vi por ningún sitio. Entramos a desayunar 2 personas y pedimos: Un café con leche, una infusión de frutos rojos y dos croissant. Total 6,15€ ️️️. No obstante, lo peor no fue el precio, sino el trato que te dispensan las dos camareras que atienden el local, parece que te vayan a "morder" en cualquier momento. No quiero ni imaginar el trato que aplicarían a los clientes, si no atravesaremos la situación actual. En resumidas cuentas, LOCAL PARA OLVIDAR.
Bueno no puedo decir mucho porke solo me he tomado una cerveza, pero vamos la camarera muy wapa.y lo de los 20 min en la mesa de la terraza me ha matado.
El servicio no ha sido como corresponde. Sobre todo el señor de la barra. No tienen ningún cartel que ponga que no se admiten perros y sin embargo nos han echado después de estar sentados con un perro supertranquilo de 1kg y medio que no dice ni mu. La ensaladilla podrìa ser servida con un poco de pan. Mucho que mejorar. Y màs con los tiempos que corren.
Es un sitio normal de bocadillos y tostadas, con una relación calidad/precio aceptable. Todo sería correcto si no fuera por la actitud, la soberbia y el mal trato al cliente por parte de una de las empleadas, al parecer la encargada, que es capaz de hacer cualquier cosa para intentar amargar una cena a unos clientes que no resulten de su agrado. Eso nos ha pasado este fin de semana (11/01/2020). Si os decidís a ir a este sitio, id preparados para obedecer en todo a esta "sargenta" o prepararos para las represalias.
Está bien para comer algo rápido, una ensalada, que sin generosas por cierto, o tomar un café. Para mí, faltan detalles, como pan sin gluten, por ejemplo, pero en general está bien todo.
Sin duda lo mejor las patatas europeo, aunque parece que siempre quieren racanear con la cantidad que ponen de cada salsa. A mejorar, la atención de la camarera, parecen que no le pagan! Siempre de mal humor, ni una sonrisa ni un hasta luego, bastante desagradable todas las veces que vamos y son bastantes.
Fui a cenar con mi familia el dia de San Jorge, quedé muy sorprendida con el trato del camarero ya que nos aconsejó muy buenos platos de la carta. Estaba muy bueno todo. Volveremos
Un lugar donde tomar un agradable café, un aperitivo o simplemente una cerveza, con una cierta tranquilidad, tanto dentro del local, como en una de las varías mesas del exterior, el trato es correcto y de precios, está bien
Hemos llegado a cenar a las 20.50 con reserva (sabado) A las 21 nos han tomado nota y servido la bebida. A las 21.40, tras preguntar por la tardanza, nos dicen que habian perdido la comanda. Penoso.
Está bien para coner algo rápido, una ensalada, que sin generosas por cierto, o tomar un café. Para mi, faltan detalles, como pan sin gluten, por ejemplo, pero en general está bien todo.
Buena relación variedad precio. Variedad en tapas, bocadillos, hamburguesas, ensaladas, sanwhich, tostadas. Buen trato del personal. Dispone de mesas en el exterior. Recomendable 100×100.
Bocadillos consistentes. No hay demasiada gente y rapidez para servir. Quizás como pega el tener que pagar por poner salsa a las patatas 0.50cents con una cantidad que no da para mucho.
Mal servicio. Casi sin haber acabado nos pidieron que nos fuésemos porque tenían una cena para 7 personas. No nos avisaron con antelación. Deja mucho que desear
Está muy bien en cuanto a la atención y a la variedad en la Carta. Pero la disposición de la silla con respecto a la mesa, no se estaba muy cómodo. El personal muy atento y pendiente. Ya digo: variedad en el menú y buena atención. Esto es lo que debemos recordar