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Frutos secos bastante pequeño comparado con los demás de la ciudad, las cajeras no son especialmente amables, tal vez por tener un flujo de gente alto o quién sabe. Si podéis, bajando la rampa hay otro, mas completo y menos abarrotado.
Hace unos días fui a la tienda de la planta baja de gran casa y me atendió una chica súper maja y amable en la chapa ponía Paula, se necesitan dependientas así en más sitios. Gracias por tu atención!
No compréis en esta tienda. Son unos ladrones y encima la dependienta que está el día 8 de Junio a las 12h 45, es una prepotente y quiere tener razón. Tienen unas bolsas con unos merengues de chuchería y pone que valen 1 euro. Adjunto foto. Voy a cogerlos a granel y están duros como una piedra los de granel que valen a 1,29 el kilo. Decido coger la bolsa y al pasar por caja me los quieren cobrar al precio que valen a granel siendo que en las bolsitas preparadas indicaba 1€. Le indico el precio que marca el cartel y me dice que no es así cambiando el cartel a otro sitio donde había otras gominolas y de esta forma dejando el producto que yo había cogido sin precio, de forma altiva me dice que me los va a cobrar al precio a granel sin darme otra solución o cobrarme el precio marcado en la etiqueta como indica la ley que hay que hacer si es un fallo del comercio. No me importa la diferencia de precio porque no era significativa sino el trato recibido por la dependienta.
Siempre me han encantado todos los productos y en eso no tengo queja, pero la persona que me ha atendido en la tienda de la planta ocio de Gran Casa, literalmente ha sido muy poco amable. Ha habido que repetirle varias veces que queríamos café con leche no un cortado… y ella insistiendo que “era lo mismo”…No llevaba la chapa con su nombre, y no me ha transmitido confianza. La palmerita de chocolate seca, por cierto. No volveré. Prefiero las dos tiendas de abajo. Sobre las 19 de la tarde, quizá un poco antes.
El día viernes 11 de marzo a las 22 horas en el rincón de la planta de arriba (zona restaurantes) me atendió un chico muy amable, atento y educado. Es la primera vez que me han atendido así en un frutos secos de Zaragoza. Por personal tan servicial como el, vale la pena comprar allí.
Es una pena la bajada de calidad y atención sobre los productos a la venta. Ya van varias ocasiones que compró palmeritas de chocolate duras y frutos secos que saben a rancio.
Las gomitas estaban muy buenas y blanditas, sin embargo, los frutos secos estaban blandos y manios.
A la hora de pagar, observé que una de las trabajadoras (Laura) estaba colocando todos los dulce sin guantes. Termina de hacerlo y se limpia las manos en la camiseta, vuelve a entrar a por otra hornada, tocando la puerta y todo lo que había a su paso y vuelve a colocarla sin ningún tipo de protección.
Le pregunto a su compañera (Yvanna) si no sería conveniente el uso de guantes a la hora de manipular la comida, a lo que responde con un tono indiferente y soez que si tienen guantes pero que se le habrá pasado.
A todo esto, Laura sigue colocando pasteles, metiendo prácticamente todo el cuerpo dentro de la vitrina a lo que decido decirle directamente que no lleva guantes y es antihigiénico. Me marcho molesta por las respuestas recibidas.
Desde luego un fallo lo puede tener cualquiera, pero hay que tener especialmente cuidado en el sector de alimentación porque puede ocasionar algún que otro susto. Lo importante es reconocer y corregir los fallos y no tratar al cliente como si te dijese las cosas para molestar.
Muy amplio surtido de frutos secos, gominolas y otros manjares antialimenticios. La tienda es pequeña y es fácil que se abarrote, pero en hora punta hay cuatro personas atendiendo en caja al mismo tiempo, por lo q la cola pasa rápida.
Las gomitas estaban muy buenas y blanditas, sin embargo, los frutos secos estaban blandos y manios.
A la hora de pagar, observé que una de las trabajadoras (Laura) estaba colocando todos los dulce sin guantes. Termina de hacerlo y se limpia las manos en la camiseta, vuelve a entrar a por otra hornada, tocando la puerta u todo lo que había a su paso y vuelve a colocarla sin ningún tipo de protección.
Le pregunto a su compañera (Yvanna) si no sería conveniente el uso de guantes a la hora de manipular la comida, a lo que responde con un tono indiferente y soez que si que tienen guantes pero que se le habrá pasado.
A todo esto, Laura sigue colocando pasteles, metiendo prácticamente todo el cuerpo dentro de la vitrina a lo decido decirle directamente que no lleva guantes y es antihigiénico. Me marcho molesta por las respuestas recibidas.
Desde luego un fallo lo puede tener cualquiera, pero hay que tener especialmente cuidado en el sector de alimentación porque puede ocasionar algún que otro susto. Lo importante es reconocer y corregir los fallos y no tratar al cliente como si te dijese las cosas para molestar.
Franquicia con un surtido de productos de baja calidad. En concreto el pan, que desde que dejó de apostar por la barra rincón, ha dado un bajonazo a peor. Tienen que cuidar que los frutos secos no se enracien en la tienda.
Como tienda está muy bien. Pero los precios comparados con tiendas pequeñas son bastante caros. Lo q es bueno es q tienen de todo desde pan, revistas y periódicos, frutos secos, caramelos y chuches. En general muy bien lo peor el precio (cambia bastante)
Un producto como ya conocemos y una atención personalizada por una dependienta maravillosa, profesionalmente y con un trato que hacen de ella una excelente profesional. GRACIAS
Las dependientas mal educadas no. Lo siguiente! Hablando de su vida sus vacaciones planes y reuniones y no atienden a los clientes. Una vergüenza. Después de pagar le tuve que pedir que me diera mis cosas y encima de malos modos. Una Latina para ser más específicos, y la compañera igual de maleducada. No pienso volver a esa tienda.