Este sitio web utiliza cookies para mejorar la experiencia del usuario. Al utilizar nuestro sitio web, usted acepta todas las cookies de acuerdo con nuestra Política de cookies.Aprende másOK
Después de llamar y que nos atendiera un tío que no tenía ni idea, esperamos 1h y pico hasta llego el pedido, cosa que no es culpa del repartidor, los productos de pésima calidad, como si los hubiesen estampado contra los recipientes, de unas 7 hamburguesas, 6 estaban mal, sin hablar de la poca cantidad de carne que había en ellas, y para colmo los precios que marcan en la carta de la página web, no están actualizados, no salieron más caros de lo que ponía en la web, para comerte una hamburguesa después de salir de fiesta con la caraja probablemente te pueda valer, pero para cenar un día normal, absolutamente pésimo.
Abierto hasta tarde y el campero clásico nunca falla, es inigualable. Lo único deberían ser más génerosos y añadir más cantidad ya que te quedas con hambre
El típico, el clásico, el único, el del sabor inconfundible. Llevé a mi hijo de 10 años, que no había estado nunca y yo, quizá hacía 20 años que no estaba y me sorprendió que conservaba la esencia y el sabor que tantas noches de borrachera de juventud me había acompañado. Pedí el "CAMPERO" y para mi hijo una hamburguesa completa, patatas fritas y bebida. El niño salió encantado, y yo, retrocedí 25 años. Ahora que está tan de moda los "remember". Si habéis tenido juventud en Zaragoza finales de los '90 principios de los '00, no dejéis de volver porque "LOS CLÁSICOS, NUNCA MUEREN".
Un clasico de la comida rapida en zaragoza, personal atento y sobre todo rapido. No le pongo mas estrellas porque creo que hace falta una renovación en el local y que se pueda pagar con tarjeta como en el de Madre Vedruna
Después de llamar y que nos atendiera un tío que no tenía ni idea, esperamos 1h y pico hasta llego el pedido, cosa que no es culpa del repartidor, los productos de pésima calidad, como si los hubiesen estampado contra los recipientes, de unas 7 hamburguesas, 6 estaban mal, sin hablar se la poca cantidad de carne que había en ellas, y para colmo los precios que marcan en la carta de la página web, no están actualizados, no salieron más caros de lo que ponía en la web, para comerte una hamburguesa después de salir de fiesta con la caraja probablemente te pueda valer, pero para cenar un día normal, absolutamente pésimo.
Pedido tarde, productos erróneos y malisima calidad he visto lo que me tenía que comer y me ha dado vergüenza y NO por la culpa del repartidor. Han bajado la calidad por ganar unos pocos euros más y los clientes no les importan ni los más mínimo. Nunca volveré a pedir en este sitio y no es un sitio donde haya cenado pocas veces.
Es un buen lugar para tomar algo rápido o para recenar después de una gran noche de fiesta. Tiene poco espacio para tomar algo allí mismo, pero normamente es para pedir e irse. Los precios son muy asequibles y el personal es muy amable. Cuidado con la ropa que llevas, que se queda el olor. Hay varios de ellos, aunque el mejor en cuanto a sabor me parece el de la zona centro. Para mí, la especialidad es la hamburguesa con todo.
Tardaron mucho en tomar nota, la cena llegó con muchísimo retraso. (Más de media hora, en total esperamos hora y media un domingo por la noche) El retraso no fue por el repartidor. El pedido llegó mal, no hicieron caso a las indicaciones. Algunas hamburguesas estaban en condiciones pésimas, subiré fotos. Odio tirar la comida, pero con dos bocados me repitió toda la noche. Desde luego nada recomendable.