Hospital San Juan de Dios

La Dirección del Hospital . Dtor médico Pérez y la Dr Coarasa (Servicio de rehabilitación), deja mucho que desear . Mi opinión de acuerdo al tratamiento de mi padre por un Ictus es totalmente real. A mi madre le dijeron que si mi padre estaba solo la mayoría del tiempo(cuestión falsa, fuera de lugar y que se podría corroborar con los enfermeros que son los que verdaderamente ven al paciente) . Se me dijo a mí personalmente que mi padre sin placa en la cabeza o con placa no iba a mejorar, y que le querían dar el alta de cualquier manera( en contra del criterio de los neurocirujanos). Luego le pusieron la placa en otro centro(una operación temporal), y a las 48 h le quitaron la habitación en el SJD. Luego mi padre mejoró, y ellos alegaron con pruebas desfasadas que mi padre estaba mal y no le iban a dar otra. Cuando los neurocirujanos habían mandado correos a su hospital posteriormente a la operación, diciendo que mi padre era apto para seguir su rehabilitación. Por último el director firma una carta ignorando las comunicaciones de los neurocirujanos citando TAC de la prehistoria. El resto del personal es más que bueno, pero las decisiones clave que influyen en el enfermo las toman personas que no están a la altura. Si van con seguro privado busquen otro centro.

Concuerdo con las reseñas negativas de otros usuarios. El personal carece de habilidades sociales, tratan a las personas como cuerpos. Se percibe la sensación de que quieren dar altas de forma rápida sin tener en cuenta la verdadera progresión del paciente.

Después de estar ilusionada porque llevaban a mí padre a San Juan de Dios,después de un ictus . Ahora estoy totalmente decepcionada . Te tienen un mes y ya te dicen que a la calle ,que ya estás estancado y no hay nada más que hacer. Es un negocio Total. No están ya ,nada encaminados a la rehabilitación . En un mes y medio una persóna con ictus no se puede recuperar . El negocio estará entrada y salida de pacientes .

Nuestra experiencia mala. Empezando por errores con la medicación. Doblando pastillas y teníamos que volver a preguntar a enfermera si estaba bien y no no estaba. Empezó mi padre a tener sarpullido y picor por el pañal y jues que no lo limpiaban bien. Teníamos que limpiarle y echarle crema nosotros, además que no hubo aviso por parte de auxiliares a enfermería.
Tenía que tomar unos inhaladores a deshoras del resto de medicación. Cuando llegábamos se lo dábamos nosotros porque ellos no. Solo un enfermero es el que ha preguntado.
Al sacarle la chaqueta le hicieron dcomprarle una cerula pagada por nosotros cuando el daño se lo hacen allí. Con este daño mi padre lógicamente no trabaja igual en el gimnasio nos dicen que se ha a por que le pusieron un ratito en andador y dicen que no sabe de allí a muleta. Lógicamente la muleta es más difícil. Con todo esto mi padre se ha atascado. Pues bien entra mi hermano y les dice que sigan probando con el andador y ya viene cerula y se le pasa dolor en el dedo y ahora si que ha avanzado dicho por la doctora. Pero igualmente le van a dar el alta a una persona que no tiene acondicionada la casa y que está mejorando y trabajadora. Aquí a los 2 meses te dan el alta.
Gracias a voluntarios que ayudan a los que están solos. Otra cosa pedimos que lo valorarán para ir a rehabilitación por las mañanas.
Lo valoran en 15 minutos y no nos dicen nada. Tenemos que buscar a doctora porque no sabemos sus horarios pasa tiempo. Cuando nos enteramos de sus horarios va y le dice que tenía que haber bajado hace más de 1 semana. Que da orden para el lunes y el lunes no lo bajan otra vez a buscar a la doctora y al final lo bajan. Con todo esto pasa más de semana y media de retraso. En fin un descontrol y me dejo cosas de anotar.
Los que vayáis enteraros bien de todo y estar al loro q a los 2 meses os dicen que se ha atascado

Estimado equipo de San Juan de Dios:

Me dirijo a vosotros para manifestaros en nombre de mis hermanos y en el mío propio, el profundo agradecimiento que sentimos ante los cuidados y atenciones que, durante estos días tan difíciles que hemos vivido, ha recibido nuestra madre Ana María por parte de todos vosotros. Las atenciones profesionales han sido impecables, así como la diligencia e interés con las que habéis respondido a cualquiera de las necesidades que ella ha presentado de forma tan frecuente. Pero más allá de la profesionalidad, es sobre todo el trato humano tan cercano, tan afable y tan cordial con la que le habéis tratado, lo que nos emocionaba tanto y lo que hacía que ella se sintiera tan agradecida en los que iban a ser sus últimos días. Sinceramente, no tenemos palabras. GRACIAS
Queremos además mencionar las atenciones espirituales con la que los hermanos de San Juan de Dios la han rodeado, fundamentales para una persona que vivía la fe de una forma profunda y que veía la llegada de la comunión con una emoción tan especial. Es seguro, y así lo creemos, que todo ello la ha ayudado a vivir con alivio sus dificultades de estos días tan difíciles y a aceptar su último tránsito con la paz que merecía.
Una vez más, el agradecimiento más profundo de todos nosotros.

Mi madre, de 87 años, ha estado ingresada -derivada del Hospital Militar- durante un mes; y hasta su fallecimiento, en julio de 2023. En cuanto a las instalaciones del Hospital, su estado y el cuidado en el mantenimiento redundan en la comodidad de los familiares: excelente. En concreto (hablo de la planta segunda), el personal de enfermería es sumamente educado, diligente y siempre pendiente de las necesidades del paciente y los allegados (obviamente: hay entre ellos personas muy cariñosas -la inmensa mayoría- y otras -muy pocas- más circunspectas. Pero el denominador común, sin excepciones, es la consoladora seriedad, la solvencia profesional y la suavidad en el trato).
En cuanto a los médicos, quiero dejar constancia enérgica de que es radicalmente falsa la afirmación que he leído en una valoración (no sé en qué hospital estuvo la persona que la escribió) : hay siempre médicos de guardia por la noche. El trato de los doctores es completamente profesional, intachable: en concreto, la doctora Ortiz y su equipo se han mostrado siempre partidarios del trabajo en colaboración con la familia; y no hurtan jamás un diagnóstico, aceptando toda pregunta y conversación acerca del mejor modo de abordar los problemas. Yo mismo, apenas ingresar mi madre, puse una reclamación por una confusión en los medicamentos (magnífico y atentísimo el personal de Conserjería) y fue la propia doctora quien me convocó a cita para aclarar el asunto cara a cara.
Quiero dejar también constancia de la excelente asistencia espiritual que brindan los hermanos de la Orden. Mi madre era creyente y, por su deseo expreso, solicitamos auxilio espiritual constante. La diligencia, discreción y entrega de los religiosos son dignas de encomio (en absoluto invasivos con otras creencias o con posiciones agnósticas o ateas).
Por lo tanto, mi gratitud sin fisuras a todo el personal de San Juan de Dios. El tránsito final de mi madre fue infinitamente más dulce y en paz gracias al buen hacer de esta Casa.

Sara Valcarcel tiene una sonrisa muy bonita como enfermera. Creo que su sonrisa es la mejor terapia.

La atención es pésima, no hay médico por la noche, no hay rehabilitación para todos los enfermos, no tienen un criterio unificado, no cambian el pañal a los enfermos entre las 21: 00 y las 08: 00 o 09: 00 no tienen la menor implicación con su trabajo, se muestran maleducados y prepotentes, su política va encaminada a que pidas el alta voluntaria. No recomiendo este hospital de no ser por obligación.

Empezaré diciendo que nada más llegar al centro, la inseguridad que transmite cierto personal que trabaja allí, y dejadez, deja mucho que desear. Se os deriva una paciente con posible riesgo de atragantamiento por su patología, y nada más llegar nos decís que puede comer sola y sin tener dicho personal en cuenta que la comida y medicación debe ser triturada, debido a las secuelas de su enfermedad, puede sufrir dicho atragantamiento. Imagino que no os informáis lo suficiente sobre el historial del paciente. Algunos
de los trabajadores con el teléfono móvil en la mano mientras solicitas en control, un triturador de pastillas, y te lo entregan sin mirarte a la cara, mientras continúan mirando su teléfono móvil personal. La trabajadora social mal educada, no nos quiso atender sin nosotros haber contactado aún con ella previamente, malas contestaciones por teléfono, nos derivaron a la trabajadora social de nuestro centro de salud directamente. Varios fisioterapeutas de baja laboral, cogieron a la paciente con 2 semanas de retraso, cuando el tiempo en un paciente con secuelas de movilidad tras estas patologías juega en su contra para recuperar movilidad. Un Celador incompetente y con falta de profesionalidad, debido a que se le solicita que eche a la paciente a la cama, ya que se estaba venciendo hacia adelante la paciente, a causa del descuido por parte de dicho celador y personal que lo acompaña, de no colocarle un cinturón para que no se venciera hacia adelante en la silla de ruedas, autorizada y firmada por mi, dicha contención. El celador no acudió cuando se le solicitó, acudió más tarde, con peligro de lesionarse y caer hacia adelante dicho paciente, tuve que moverla yo hacia la cama. Personal de hospital (TCAE) hablando en los pasillos levantando la voz y delante de otros pacientes, y familiares, de el diagnóstico y tratamiento de la paciente, en tono de queja, con otro trabajador, vulnerando la
confidencialidad del paciente y faltando a la profesionalidad. Un fisioterapeuta sustituto, dijo que "lo veía negro", literal, sin intentar prácticamente nada, cuando realmente a ella le correspondía otro fisioterapeuta, no un sustituto temporal. Ellos sólo querían que la paciente se sujetara de pie, cuando considero que el proceso de recuperación de movilidad empieza por intentar bipedestar, no que vengan los pacientes andando, sino no tendría sentido tener un servicio de neurorehabilitación.
Solo la han tenido 9 días en el supuesto gimnasio.
El seguimiento por parte de la facultativa de San Juan de Dios, nefasto, ni siquiera prestaba atención a los pequeños cambios que hacia la paciente, por ejemplo levantar un poco la pierna o flexionar un poco el pie, para mí era una evolución aunque fuera lenta, pero partía de que no movía absolutamente nada. La persona responsable de fisioterapia me comentó que no le iban a dar más rehabilitación porque supuestamente el paciente no colabora. Cuando le pregunté si sabía el nombre de la paciente, lo desconocía, tuvo que consultar la hoja donde estaba escrito, de ahí el reflejo de la falta de profesionalidad, desgana, falta de coordinación entre profesionales. Apatía y poco interés por el paciente, con excusas vanales para despacharla a casa cuanto antes. Creo que, todo esto va en contra de los principios y valores de este Hospital, de cualquier otro, y en contra de el derecho a la protección de la salud que todos tenemos. Pusimos la correspondiente reclamación, y aún estamos esperando a que la persona responsable de dirección se ponga en contacto con nosotros. Experiencia horrible, en la que me he visto obligado a escribir esto, debe saberse y aunque sé que ellos dirán que tienen un equipo de profesionales y que mis expectativas eran altas, esas respuestas de falsa asertividad echando balones fuera, no valen. Si fueran profesionales no ocurriría esto. Todos tenemos fallos, pero esto son fallos muy graves, y los pacientes son personas humanas, no son objetos. La estrella es para las chicas de Recepción/Admisión que eran un encanto.

El trato y el trabajo con los enfermos estupendo.
Pero la alimentación es pésima no hay ni un plato que se pueda comer una persona en un estado de recuperación, en este ámbito hay mucho que mejorar.
Todo hay que decir, después de poner una reclamación al día siguiente pasaron dos personas del personal y empezaron a cambiar la comida notablemente

“Hacer fácil lo difícil” Grandes profesionales únicos en Aragon, gran empatía y calidad humana, médicos enfermeras psicóloga auxiliares limpieza cafetería. Gracias por vuestra ayuda

Ya hace mas de un año que tuve una experiencia en este hospital pero es ahora cuando hago la reseña.
Hubo una enfermera que me trató inmejorable. No recuerdo su nombre pero agradezco mucho la atención, cariño y empatía que tuvo conmigo (a pesar de que es lo que vive cada día) Gracias, ojala supiera tu nombre.
Por otro lado, hubo otra enfermera joven, morena de pelo largo y alta que a mi parecer no tenía ninguna de las habilidades que hay que tener para dedicarse a lo que se dedica. Incluso se atrevió a contestarme desafiante. Mi padre era paciente terminal con cuidados paliativos, el cual sufrió muchísimos dolores durante muchos días antes de fallecer. Recuerdo que le ponía la inyección que le dejaba dormido al segundo y ni siquiera le sujetaba el brazo que tenía agarrado a una especie de triángulo. (otras enfermeras si lo hacían) Yo veía como ella entraba indiferente, incluso comentó molesta una vez diciendo "otra vez, " le pinchaba y se iba. Y yo desde la silla sentada viendo como el brazo de mi padre caía a peso muerto al quedarse dormido.
No soy nadie para decir a la gente lo que tiene que hacer pero me tomaré las molestias ya que sus sucias manos tocaron a mi familiar. Mejora como ser humano o directamente cambia de trabajo. No se cuantos años tenías. Pocos, no llegabas a 30, ¿ ya te molesta tener que poner inyecciones?
Si no me enfrente a esta mujer fue porque mi padre me pedía que no lo hiciera. Que tenga cuidado porque alguien puede sentirse igual de ofendido y tener, por desgracia, menos herramientas para el control de impulsos.

Mi más profundo agradecimiento al personal que trabajáis allí, mi marido ha estado en cuidados paliativos, y vuestra profesionalidad y trato humano ha sido de gran ayuda, en estos momentos tan duros para la familia, muchísimas gracias a todos.

Paliativos: TODOS buenos profesionales, pero más aún, mejores personas.
Destacando el personal de enfermería por el buen trato al ingresado y familiares.
Muchas gracias
Manel Ferrer Forcadell

Magnifico trato de todo el personal del hospital y muy buena atención nada que ver con el matadero conocido como Royo Villanova

Hoy he acudido a realizarme una analítica de sangre y el trato ha sido inmejorable. La persona que me ha atendido (un chico, pero no recuerdo su nombre) ha sido muy amable y prácticamente ni he notado el pinchazo.

Ayer llamamos porque no tenía claro que todo lo que me pedían en la analítica lo cubriera mi seguro privado, y se tomaron muchísimo interés en solucionar mis dudas, enseguida me dieron respuesta.

Es un gusto dar con buenos profesionales y empáticos,

Deseo expresar mi agradecimiento por el trato y la atención recibidos por mi madre la semana que estuvo ingresada hace unos días. Estuvo muy bien atendida hasta el final, y queremos destacar el cariño de todo el personal, tanto médicos, como celadores, auxiliares y enfermeros, así como trabajadora social.
Son momentos muy duros para la familia y se agradece que los hagan un poco más llevaderos

Una deficiencia absoluta de tacto. Una comunicación inexistente. Una falta de empatía brutal. Profesionales? Responderé a esto cuando se dejen ver. Rehabilitación? JA, JA. Los pacientes están sometidos a un aislamiento excesivo, solo se les permite salir al pasillo a una hora determinada que ellos eligen. No puede permanecer con ellos mas de un persona, ni siquiera en el jardín o cafetería (a la cual no pueden acceder). Qué lástima que un hospital neurorehabilitador tenga tanta falta de psicología teniendo a los pacientes encerrados. Las abundantes salas de espera tampoco se pueden utilizar. Si os trasladan aqui para rehabilitación, pensarlo, es solo 30 minutos al día. Así que puedes verte en un ingreso de meses en el cual no podrás salir de tu habitación mas que para el tiempo rehabilitador y el momento horario pasillo. Normal que sea especialista en paliativos, es entrar y dan ganas de cortarse el cuello.

Acabo de estar un mes largo en rehabilitación y ha sido fantástico.
Aparte de salir con el hombro recuperado me he quedado alucinado de lo buena gente que son Raquel, Carlos, Pilar y un largo etcétera.
Merece la pena romperse algo para descubrir sitios y gente asi.

En Mayo tuve un accidente con la bici y me rompí el codo y acabé haciendo fisio terapia en San Juan de Dios.
Debo destacar la profesionalidad del centro y la amabilidad del staff.
Me gustaría destacar el gran trabajado realizado por Javier Bravo (Fisio terapeuta) y también el servicio de Carlos y demás personal.
Realmente ha sido una experiencia muy positiva y si hay alguien que tenga la oportunidad de hacer fisioterapia en H. San Juan de Dios que sepa que estará en buenas manos.

Un hospital muy ansiado te atienden con mucho cariño sólo que para entrar al gym del hospital de día si no es x la calle fray Julián garas no hay otra entrada y hay muy poco o espacio para pasar con una silla de ruedas

Pésimo en la parte paleativa por parte de algunas enfermeras no todas.pero algunas.puff no le dan de comer a las personas si ma necesitan.cuando a lo mejor no se dan cuenta que le tiembla las manos.
No hablemos de la forma de hablar que tiene algunas. Con los familiares.
Esta parte del hospital super feo sin decoración las paredes sin vida.solo color marrón neutro. No hay flores.ni nada que no sea la cama y una mesa de comer.
Después los médicos como no tengan camas. Le da igual los intenta hechar para no tener pacientes. Es una vergüenza. Pero bueno es lo que hay que aguantar.
Y encima han quitado una planta de abajo supuestamente para hacer una cafetería comedor para que se gasten dineros.los ricos.ya que es concertado.

Solo puedo tener palabras de agradecimiento, tanto en la parte de neurorrehabilitacion (auxiliares, enfermeros, médicos, rehabilitación) y en la parte de convalecencia (médicos, enfermeros, auxiliares, rehabilitación) atentos y profesionales a la vez que humanos al igual que la parte de recepción o atención al usuario, un hospital de referencia en rehabilitación sin ninguna duda, sólo os puedo decir que gracias

Esto es más que un hospital. La vocación de sus profesionales se percibe en cada detalle. La familia de Benito estamos muy agradecidos del trato recibido

Hoy mi primer día en rehabilitación, imposible mejorarlo! Tanto recepción, enfermeros y médico han sido súper atentos y todo el rato con una sonrisa. Muchas gracias!

Cómo paciente de Diálisis en el Servicio de Nefrología la atención por las doctoras cómo por enfermar@s y auxiliares, de sobresaliente.
A pesar de las circunstancias de cada paciente, el trato es excelente. Un sobresaliente. Muchas gracias por vuestra atención y trato.

Pésimo trato, mala atención por parte de la mayoría del personal, información mínima cuando no inexistente, trato rayando la mala educación en ocasiones. He estado en otros hospitales de la Seguridad Social y el trato es infitamente mejor. Siendo privado, no entiendo como no se les exige una mejora inmediata de la atención, es penoso

Buenas, por parte de los administrativos fue un recibimiento ejemplar, por parte de los médicos sentí muy poca implicación y poco esfuerzo por salvar a un padre y marido ejemplar de 63 años cumplidos en el hospital.

Tanto los médicos como sobretodo los enfermeros/as y ayudantes son espectaculares, tanto en atención como en trato. La verdad que muy contenta con el trato recibido a mi madre el tiempo que ha estado en rehabilitación. Saludos

Hace muchos años que por un motivo u otro he sido usuaria indirecta, conozco la atención de primera mano, siempre muy humana y profesinal. Pero siempre se puede mejorar sobre todo tema burocracia y dirección. Una buena idea lo de los contenedores de caritas, en los jardines. Gracias.

No es la primera vez qué acompaño a una persona allegada en su estancia en este hospital, y no tengo más que buenas palabras y recuerdos maravillosos, especialmente de mi estancia allí con mi abuela. Es un lugar tan acogedor que no parece un hospital, el personal es tan amable y comprensivo que acabas encontrándote como en tu casa.

Sin palabras. Maravillosos profesionales y mejores personas. Ninguno estamos preparados para dar el último adios a nuestros seres queridos, y gracias a ellos, ese trance tan doloroso, se hace más llevadero. No tengo palabras para agradecer a todos su cariño. Desde los celadores, hasta el médico, pasando por enfermeras, personal de limpieza, administración. Todos. Gracias.

Es increíble el personal, te ayudan mucho a la hora de acompañar a tus familiares en sus peores momentos. Son todos increíbles, tanto profesional como humanamente, sin excluir a los voluntarios, excelentes personas al servicio de todos dedicando su tiempo a ayudar a los demás.

Hora de los hechos 16: 15 de la tarde del día 1-10-2018 he pasado hacer una donación de unos libros de aventuras en perfectas condiciones para el hospital y la persona que me atendido en recepción muy antipática y borde ella, me a puesto un montón de trabas total que me he tenido que llevar los libros anterior mente he llevado libros a este hospital y nunca me han puesto ninguna pega

Mi marido está en lista desde enero y no hay manera de que lo lleven, tuvo un derrame cerebral hace 6 meses y se está deteriorando por no rehabilitar he llamado varias veces y dicen que ya me dirán, estoy desesperada, los médicos del clinico que es donde está mandan informes y aún por esas, no se el motivo lo que si se es que estoy enfermando yo por no saber que hacer. ️️️

Bueno ya está mi marido en San Juan de Dios al fin, estoy encantada, nos sentimos mucho mejor toda la familia, el trato fenomenal, deseando que empiece la rehabilitación.

Limpio, tranquilo, atienden bien, pacientes. Desde fuera el edificio es bonito, con jardines. Habitaciones grandes

Buena experiencia con nuestra madre en cuidados paliativos. Buenos profesionales, buen trato, nos ayudaron en todo momento e hicieron mas cómodo el final de su vida. Un 10 en todos los aspectos.