La Colomina

dimos con este sitio de casualidad porque estaba de camino a Baqueira. La impresion inicial fue un poco rara, una granja con animales y algo descuidada. El restaurante era una sala tipo cueva. La sorpresa vino cuando la camarera empieza a traer platos y platos de comida, todo casero y rico. No habia limite de cantidad si querias repetir algun plato pero he de decir que la cantidad que te pone es abundante.
La verdad es que comimos estupendamente. La atencion fue muy buena aunque un poco lenta, pero en general, todos quedamos muy contentos.
El dia que vuelva a Baqueira, seguro que hare una parada en este sitio para volver a comer.

No vayáis. Tiene 4,4 estrellas porque pedirán favores a conocidos y amigos. Es un timo en el precio, muy discreta en la calidad, el servicio justo y el personal amable. pero con eso no se come. No hay por donde cogerlo, creedme. No creáis las reseñas positivas. Comí allí por una lamentable casualidad. a esa hora y en carretera tenía que parar en algún lugar. vi las 4,4 estrellas y pare. Enorme error.
Lo único bueno que tiene es que es un gran negocio con unos enormes márgenes para los dueños.

Sitio para ir sin manías menú cerrado, comida de calidad, personalmente yo no soy amante de las verduras pero como estas hacía tiempo que no la comía, la tortilla de patatas, la verdura y los guisos e carne sin comentarios todo buenísimo, yo repito

Tal y como se puede leer en otros comentarios parece una cosa y luego.es una grata sorpresa. Lugar para ir, disfrutar de la comida y la gente "de siempre"

Sólo puedes comer lo que te ponen, pero por 25€, aunque sea comida sorpresa, fueron 4 platos más postre. Todo casero y bien servido en un sitio diferente.
Destacable el yogurt casero con miel y la tortilla. Me sorprendió.

Fuimos el domingo un grupo de 13 personas, nos hicieron sitio a pesar de llamar poco antes, el sitio es acogedor, sin lujos, muy acogedor, muy como antes, nos encantó el trato, la comida buenísima y abundante, las señoras se preocupaban que nos gustará todo, y que si querían nos hacían más comida, encantadores.
Hacía mucho que no encontrábamos un sitio tan familiar.
Sin duda para repetir.
Excelente!

Inmejorable.no se puede decir nada mas. Si te gusta la comida casera y lo antiguo, poco como eso.
Gracias por todo a la familia, por su atención y la visita que nos ha proporcionado a la propiedad.

Un sitio de toda la vida. Recomendada parada ahí si estás por la zona. Menú cerrado, 100% casero por lo que parecía y a nuestra niña le encantó el sitio.

Me sorprende las reseñas positivas, me da pena hacer este tipo de comentario, siempre que realizo una reseña es para agradecer y dar mi testimonio positivo. Hoy me siento en la obligación moral de hacerlo por las personas que como yo esperan una estupenda experiencia gastronómica en sus vacaciones, y lo que se van a encontrar es la peor de sus vidas. Para mí una estafa.

Las propietarias nos atendieron con amabilidad y rapido, nos preguntaron si queriamos repetir de todo y siempre atentas.
La comida era abundante y el vino de buen beber.lo recomendaria sin pensarlo

Buena comida y ambiente rural auténtico! Menú de 25€ con lo que han preparado del día (muy abundante). Está a 6km de Roda de Isábena. Sirven la comida a partir de las 14h.

No quiero añadir ningún comentario para que este lugar permanezca un poco desconocido y poder disfrutarlo los que por suerte lo conocemos Jajaja.es broma pero la verdad es que no es un lugar para todos los gustos.

Magnífico sitio para desayunar o comer. Productos propios y de proximidad. Personal super amable. Lugar pintoresco. Recomendable al 100×100

Fuimos a comer. La barriga está llena, algo me ha faltado. Abundante de comida, platos caseros.

Un sitio con mucho encanto, además que son súper atentos, muy agradables y te hacen sentir cómodo y que no te falte de nada, nosotros repetiremos

Comida casera, muy recomendable.
Precio económico y calidad superior.
Vino de su cosecha.
Postres 100% caseros, recién ordeñados.
Más que recomendable.

Experiencia algo atipica, te sirven un menú cerrado (25€), el cual no sabes lo que te van a sacar (mejor si vas con hambre), el sitio de primeras es muy raro.todavía estamos flipando.la mujer muy atenta.algo para no olvidar

It is a house with a room where there are 4-5 tables. It is not identified as restaurant anywhere except maps and as there is no signage it's extremely difficult to identify on site at night, you need to enter the house and ask.

They only offer is a fix menu of 25€ pp even if you ask or even are vegan they won't change it. Their pales are so oily and heavy you end up with stomachache or headache (we ended up with migrain) and not to mention going through a bad night. Their 'castilian cuisine' is an extremely oily and raw spanish tortilla, an enormous salad and a lot of bread with really bad serrano ham, really cheap wine and old and dry meat.

Sorry but too bad to remember.

Lugar bonito en medio de la Ribagorza oscense y comida riquísima con un trato muy amigable
Lo recomiendo

Restaurante muy recomendable, al sentarte en la mesa te dicen los platos que tienen ese dia (si algun plato no te gusta te lo adaptan). Platos muy buenos de comida tradicional y raciones muy abundantes. En nuestro caso comimos (una tortilla de patatas entera, pan con tomate y jamón, arroz con conejo, langostinos, conejo a la brasa y longaniza a la brasa). Incluye bebidas, postres y cafe, por 20€! Muy bien de precio y muy bueno!

Lugar muy peculiar, llegas y comes de lo que hayan cocinado ese día. En nuestro caso, tortilla de patatas, pan con jamón, arroz de conejo y cordero a la plancha. Te van trayendo todo según van haciendo, y no hay unas cantidades establecidas.es un lugar para llenar el estómago pero no como experiencia gastronómica. 20 euros por persona.hacen lo que pueden pero es muy mejorable. El servicio lo mismo, caótico, solo 2 personas, gente muy humilde, eso lo valoro pero como digo no para repetir.

Estuvimos comiendo esta semana santa y ha sido muy mala experiencia. Habíamos estado hace años y salíamos encantados.
Ahora ha cambiado mucho. Las raciones muy escasas y el servicio pésimo. Una tortilla fina para 6, el arroz una cuchara por persona, cordero no llegaba ni un trozo por cabeza. Fatal!
Nos costó 3h30 comer y salimos con hambre.
No lo recomiendo.

Comida de la iaia en lugar con encanto. Menú sorpresa de producto de cercanía y por 20 €, comes hasta no poder más. Comimos olivas negras, queso, tortilla de patatas, pan con tomate y jamón, 1 gamba, brócoli, llonganisa y cordero. Postre crema de iogurt con miel, cafés y orujo. Trato cercano y lugar muy recomendable.

Llegamos nos sentaron en una mesa y simplemente nos dijo que si comeríamos lo de todo el mundo a lo que respondimos que si, olivas negras, longaniza y chorizo secos caseros algo insípidos, pan bastante duro con tomate muy bueno y jamón casero, tortilla de patata, garbanzos con oreja y 15 gramos de pechuga de pavo reseca, raciones justitas sobre todo la carne, ¿sales con hambre? Pues si te comes el pan duro y la tortilla de patata no, pero si esperas un segundo de carne como debería de ser pues saldrás con cara de haba, trato bueno y atento pero no es lo que me esperaba la verdad, precio 20 € por cabeza y la impresion que me lleve es de comida de lunes en mi casa de sobras

Un restaurante a pie de carretera lascuarre - roda de isabenaq no esperas encontrarte. Es un restaurante en una especie de castillo con iglesia toda de piedra. Al lado del río isabena, con sus viñedos, cultivos y el cementerio de la iglesia. Todo un lugar especial. En lo que refiere al restaurante es atendido x sus dueños, desde el primer momento te dan la bienvenida y quieren que estés a gusto. El menú mi compañero y yo lo hemos bautizado como. "menú fiesta". Es un menu sorpresa y/o de picoteo donde te van sacando cosas. Tú no eliges, es realmente un menú único del día. Y si algo no te agrada ellos te lo cambiarán x otra cosa. Hay platos que son resultado de su propia cosechas o crías como las olivas maceradas x ellos mismos, su propio jamón curado (uffff), las chuletas de cordero, La tortilla de patata, el vino de la casa. Y otros platos son preparados con productos de calidad, el pan con tomates y aceite de oliva, el queso, las longanizas de la carnicería de graus, el yogurt de cabra y miel, el pan.la comida es casera, abundante. El menú termina con café o infusión y chupito. Productos de calidad, hecha con esmero. Y con la intención de que disfrutes el lugar. Hay q ir sin prisa, con hambre. Y ganas disfrutar!
Le pongo 4 estrellas xq el arroz con pollo y la tortilla muy normalitas. Pero en general una experiencia q merece la pena. Nosotros repetiremos. Gracias

Sitio pintoresco, muy bonito y con espacio.el trato inmejorable por parte del personal.y de la comida, que decir.muy buena, abundante y toda una sorpresa al ser menú cerrado y hasta que no estás en la mesa, no sabes que hay de comer.sinceramente un sitio para tener muy en cuenta.y con toda seguridad que repetiremos, no una, sino muchas veces

Comida muy discreta, poca cantidad, no nos preguntaron en ningun momento si queriamos repetir (he leido alguna reseña en la que se indica que si lo hacen.pues ni a nosotros ni tampoco a los comensales de la mesa de al lado les preguntaron, e imagino que estaban igual de sorprendidos que nosotros por el tamaño de las raciones).
Al entrar no te informan en que consiste el menu, no te dicen q vas a comer y tampoco el importe del servicio.
La señora era amable. El sitio no es para volver.

Una locura, no hay carta, te sientas y te van trayendo, queso, pan con tomate y jamón, judías verdes, tortilla, langostinos, butifarra, y te quedas con gana, cordero o jabalí, o corzo. Postres y café. Precio simbólico. Si no vienes no te lo crees. Gracias por este lujazo de comida.

Calidad precio increíble. Es un menu cerrado, hay que ir con hambre porque es muchísima comida. Los postres espectaculares. El trato muy amable.

Estuvimos hace unos días. Nos pareció pintoresco por fuera y no nos defraudó. Hay que ir con ganas de comer. No tiene carta y el menú es cerrado, a mí me parece un sitio bastante económico. Si hay algo que no te apetece del menú, se esfuerzan en darte soluciones. Todo es como un poco exagerado, pides un sólo con unas gotas de coñac, te traen la botella.si eres de comer casero y tienes claro el baile de fuentes por las mesas. Este es tú sitio.

Un sitio peculiar de los que quedan pocos. Los dueños súper amables, Pepito nos ha enseñado la Iglesia que tienen propia. Su hija nos ha servido una comida excelente y para no comer hasta el día siguiente. 100% recomendable

Hemos comido muy bien. Sitio acogedor y familiar, trato muy amable y cordial. El cordero buenísimo. No te quedas con hambre, aconsejable. Repetiremos!

Según mi cuñado "juegan con nuestras emociones" pero lo cierto es que fue una experiencia sorprendente, a momentos inquietante, siempre desconcertante. Pese a este preámbulo toda una experiencia positiva. Comimos mucho y muy bien. Comunicación verbal escasa, pero actitud volcada en alimentar mucho y bien. Muy recomendable.

En primer lugar, decir que este es un sitio para comer que no utiliza la mecánica habitual de un restaurante normal. Por que digo esto? Muy sencillo, de entrada la hora para comer la fija el sitio y son las 14h. Estamos hablando de una casa de piedra con algún siglo de antigüedad que tiene adosada una pequeña iglesia románica preciosa y mantiene enterramientos privados en su lateral. Esto nos da una idea de lo "potente" que era esta casa en su momento.
En segundo lugar, aquí no existe ni carta ni menú, se come lo preparado por la casa para ese día e.ir con apetito voraz porque os hará falta para dar buena cuenta del aluvión de comida al que os someterán las dos pizpiretas mujeres (madre e hija) que sin conocimiento alguno de hostelería, pero con un desparpajo extraordinario os daran de entregados maitres
La comida es casi en su totalidad casera, por lo que podremos disfrutar del sabor de las cosas de verdad.
El precio es de 20€ por persona, y en relación al entorno donde se sitúa el restaurante, las propias instalaciones, la atención prestada, la calidad y cantidad de los ingredientes empleados, he de concluir diciendo que no se puede dejar de visitar este sitio. Nos daremos cuenta de lo bien invertidos que han estado nuestros 20€.
Una cosa más que añadir, la casa no dispone de ningún rótulo que la identifique como restaurante, por lo que parece una casona particular, por lo que debemos de estar atentos a los rotulos que nos indican "La Colomina"

Wao, teníamos hambre y dijimos aquí mismo, no había sitio ya que estaba lleno pero aún así nos pusieron una mesa al sol y nos dieron de comer muy buena comida casera, postre y café por buen precio. Los buenos sitios acogedores hay que valorarlos.

És un bon lloc per anar a menjar sense presses.
Aliments de Km O, servei molt amable, és menja el que hi ha. Segur que tornarem

Es un restaurante con mucho encanto tanto por el entorno como por las personas que lo llevan. Se nota que utilizan productos de proximidad o incluso propios. Es cocina tradicional y muy abundante. Ir con hambre. Te Dan un primero a elegir entre 2 opciones dependiendo del día, siempre sacan una tortilla de patata, unas rebanadas de pan (bueno) con tomate y jamón como (al menos a mí) me lo cortaba mi abuela, después te Dan a elegir un segundo, nosotros pedimos muy poco porque ya no podíamos más pero sabíamos que estaría riquísimo, por último postres caseros muy buenos. Con el café te sacan licores o cremas y la señora tuvo el detalle de darnos a probar el bizcocho de la casa que estaba buenísimo. Toda una experiencia si vienes de ciudad o no estás acostumbrado a la cocina casera del pueblo.

No apto para tiquismiquis.
Ofrece una rígida propuesta que tan solo varía el plato del día, en función de la temporada de su propia huerta, como columnas de esta menú: rebanada de pan con tomate y jamón, excelente tortilla de patatas, plato de queso.de segundo cordero a la brasa o longaniza.todo muy bien manufacturado. El precio 20 euros con postre, café y orujo.
O lo amas o lo odias. La crítica es que deberían reducir la edad del cordero.no es lo mismo ternasco que res mayor.

Casa de comida familiar de platos sencillos, exquisitos y generosos que por 20€ puedes disfrutar de una comida estupenda.
Nuestro agradecimiento para Gloria la propietaria-cocinera que mantiene ese guiso casero aderezado de cariño que convierte los platos en placer. No podemos olvidar a Enrique y Belén sus hijos que aportan generosidad, buen trato y cercanía desde el primer moment y Pepito que con su esfuerzo abastece de productos de la hermosa huerta que tienen.
Un abrazo de Silvia y Daniel

Productos muy caseros, de la huerta km 0. Si no buscáis sofisticación sino los platos de toda la vida pero riquísimos. Entre semana, coincidimos con otra pareja donde estuvimos hablando las 4h que estuvimos en el restaurante incluido la visita por distintas zonas de la casa, donde además nos dimos cuenta del tesoro familiar antiguo que poseen, sus cuevas y utensilios dignos de conservación y quisiera que diesen una ayuda por parte de la administración para que no se pierda.resumen: turismo en estado puro.

A pesar de no tener en el menú opciones vegetarianas nos crearon un menú adaptado a nuestras necesidaded. Comida excelente, lugar maravilloso, lo valoramos con un 10! Sin duda volveremos!

Comida y trato excelente. Más casero imposible. Difícil de creer lo barato que es con la cantidad y calidad de los platos que nos han servido. Lo mejor de todo la tortilla de patatas y también el yogurt con miel. Un 10.

Buena comida y trato cercano. No hay un menú, te sirven un menú degustación de comida casera y productos locales según temporada. Comida abundante para ir con hambre.

El tracte deliciós per part de la noia de la casa. Vam arribar tard i ens esperava amb el dinar preparat. Es menja b i abundant. Hi tornaria sens dubte

Great food. Generous portions. Friendly service. The veggies were grown in their garden, meat from their animals and wine was house made. Highly recommended.

Una sensacional acogida en un entorno rural auténtico (medieval) dónde tuvimos una estupenda comida, todo absolutamente casero y bien hecho. Hay que ir con ganas de comer y saber que el menú es cerrado: se come lo que se ha guisado ese día.
Precio muy barato en relación al extenso menú (6 platos) y su calidad. Y completo! Se incluye bebida (2 vinos), pan, postre, café y chupitos. Muy, muy, muy recomendable.

Llamamos para reservar mesa sobre las 14: 30. Nos indicaron que a las 14: 00. Llegamos 15 minutos antes pensando que tendrían muchas reservas. La sorpresa fue que cuando entramos no había absolutamente nadie en las mesas. Cuarenta minutos después aún no habíamos empezado a comer. En total fueron dos horas y media de comida. Respecto a la calidad, fue una montaña rusa de sensaciones. Para empezar pan con tomate y jamón: pan de pueblo bueno, tomate excelente y cortada de jamón de 5 mm.de grosor que puso a prueba nuestras dentaduras. Tras eso sacaron unas tortillas de patatas recién hechas, muy ricas. En ese momento nos avisan que la fideuá iba a tardar un poquito. La verdad, se la podrían haber dado directamente a los animales. El aspecto ya tiraba de espaldas y el sabor tampoco arregló la situación. Fue una pena porque en la fuente habría para 10 personas y nosotros éramos 4. No nos preocupó porque aún faltaba el plato estrella: cordero y longaniza a la brasa. Tras retirar la fideuá (por darle un nombre a aquello) nos trajeron un platito con 4 trocitos de cordero, todos bastante pasados. Tanta fideuá y tan poca carne. Lo arreglaron trayendo otro plato con carne incluso más pasada. Y al final llegaron las longanizas, que estaban riquísimas. Cada plato era una aventura, alguna difícil de catalogar. El postre, nada del otro mundo. A elegir entre helado contessa industrial, yogurt con miel o fruta. Café y chupitos. Todo 20€. Resumiendo, comida en cantidad, con poca calidad y de muy sencilla ejecución. Calidad/precio nefasta.

Ir a La Colomina es ir a comer a la mejor versión de "tu casa": el mejor producto de su propia producción, de rica elaboración casera en el día (comerás lo que se cocine ese día) y con el trato amable y abnegado de quien te trata como a un cliente de su propia familia. Ana Belén está al mando de un establecimiento amplio, limpio y de especial escenario: una casona medieval de piedra asociada a una coqueta iglesia tardorománica.
El menú que cuesta 20€ consiste en 5 platos, aunque ya te reciben con un plato de olivas, vino claro de casa, vino embotellado del Somontano, agua y gaseosa. Mientras te organizas te acompaña un plato de queso de Alcampel y el menú da comienzo con una rebanada de hogaza de pan untada de exquisito aceite virgen acompañada de rodajas de tomate del huerto y una loncha gruesa de delicioso jamón. Sigue con la riquísima tortilla patatas de casa hecha en el momento con huevos del corral y el primer plato de hoy: judías verdes con patata, con el formidable sabor que solo tienen aquellas recien cogidas del huerto. La zona central del menú se nutre de una buena y sabrosa ración de gambas a la plancha y después un pedazo de estupenda longaniza. Así llega el segundo plato que hoy era un delicioso conejo guisado en salsa natural. Y terminamos con un postre a elegir: cremoso yogurt con miel, natillas, helado, brazo de gitano, melón.rico, rico.
Siempre atentos e interesados en cómo te sientes y si te está gustando, cierran está maravillosa y abundante comida un buen café y unos variados chupitos.
Excepcional relación calidad, cantidad y precio. Si te gusta la comida casera, este es tu restaurante.

Comida casera, no tiene carta, elaboran un menú para todos con sus productos, todo casero y natural, el vino los postres todo muy abundante y rico
Sin duda lo recomiendo

Impresionante, no pidáis nada, aceptar el menú que tengan ese día y a disfrutar.
Raciones para no comer en varios días.
Muy muy recomendable.

Una experiencia para repetir. Productos cultivados en su propia huerta con un sabor único. Nos gustó recibir los platos y no tener que decidir entre las distintas opciones que se plantean en una carta o menú. Prometimos volver para disfrutar de nuevo la experiencia.

Un GRAN àpat! Si us voleu atipar de menjar cassolà de bona qualitat no dubteu a venir a aquest restaurant. Serveixen un menú de 20€ on no es poden escollir els plats però tots son molt bons i fets amb productes de la casa. El menú també inclou café i licor. El servei també excel•lent. Anavem amb una nena de 1 any i 9 mesos i tot i no cobrar-nos el menú ens van oferir de tot i fins i tot ens van preparar un postre per ella. Repetirem

Hace años que conozco este restaurante. La calidad ha empeotado con el tiempo. Quieren atender mas gente de la pueden. El resultado es peor calidad de la comida y tiempos de espera interminables. Puedes tardar tres horas en comer. En la ultima visita, tuvimos una experiencia muy negativa. Tenian un Land Rover al sol, con una saco dentro, con cachorros de perro. La temperatura era de 38 grados. Pedimos que los sacaran de estas condiciones. La reaccion de una persona (imagino el dueño) gritandonos por hacerle esta peticion, fue muy desagradable. Increible de entender, esta falta de sensibilidad con los animales

Después de visitar el pueblo paramos en este restaurante tipo taberna y adoramos la experiencia. Servicio espectacular, comida rica y buen ambiente
Por un precio de 20 € te sirven unas raciones muy ricas, ensalada, y en nuestro caso hoy tenían gambas y cordero, todas las bebidas q pueden ser refrescos, vinos, agua están incluidos, el postre, el café y los chupitos también, además viajamos con nuestro perro y nos dieron la opción de comer dentro y dejarlo cerca de nosotros, después de una mala experiencia dentro del pueblo este restaurante nos ha dejado muy buen sabor de boca, gracias por la amabilidad a todas las señoras del servicio, desde luego es un lugar diferente.

This is a typical local restaurant. It is located in a farmhouse. Really nice and cosy. It is not really clear where the entrance is, but the owners are happy to help, just step inside. The owners are very friendly! Service is super, food is delicious. There is no menucard, it is the menu of the day, you just sit and enjoy what is brought to you. Wine, water and soft drinks are included. The owners don't speak English, but they do their best to speak slow in Spanish. A side note: There are a lot of courses! Primeros consist of a lot of separate dishes. Secundos is also 2 dishes and then we still have postres (dessert). We paid €20 per person, really cheap for what is offered!
I recommend this place to everyone who wants to taste the great, fresh and delicious local kitchen. Waw! 5 star worth. Owners, thank you for this experience.

Nosaltres estem encantats sempre de venir aqui i mai ens decepciona o sigui que el recomano moltissim bon menjar bon preu i la gent estupenda un 4,4 no jo li posaria un 8

Sitio diferente donde comer y compatir experiencia muy gratificante con la dueña y su familia que te hacen sentir como en casa.

La Colomina es una casa del año 1724 muy bien conservada y muy auténtica. Ya la entrada es preciosa. Al frente con unas escaleras de piedra que suben al piso superior, con una ventana redonda y debajo unas tinas de piedra que eran para guardar el aceite (ahora en desuso)
El restaurante está en la planta baja, entrando a la izquierda, con un techo abovedado, todo de piedra. Y al lado otro comedor con chimenea.
Por todo, nos esperaríamos a que la camarera viniera vestida como hace 2 siglos. Pero no. Es una mujer de ahora que nos obsequia con un menú degustación por 20€ por persona.
Empieza con la bebida: una jarra de agua, una gaseosa, una botella con vino rosado suave (hecho por ellos) y otra de vino tinto Somontano de 14°. Una cesta con pan. Y a continuación ya viene la comida: unas rodajas de pan con tomate y jamón serrano. Unas aceitunas. Espárragos con cogollos de Tudela. Calamares a la romana. Una tortilla de patatas (no un trozo, sino un plato enterito) Paté. Gambones a la plancha con ajo y perejil. Y el plato fuerte: unas longanizas, gordas y ricas (hechas por ellos)
De postre un bol de crema de yogurt con miel.
Y para terminar de reventar, perdón, quería decir: terminar de rematar.el café o cortado y unos chupitos de orujo, que como no sabíamos cual elegir, nos ha dejado las 3 botellas y los vasitos y, ala! A servirnos nosotros mismos el que queramos y las veces que queramos.
En definitiva, un sitio muy recomendable para el que le guste el buen comer en un ambiente rural.

Maravilloso servicio. Muy buena gente. Y comida casera, de calidad y en cantidades industriales.

Excelente atención. Una familia con mucho cariño y gran esmero. La abuela de 96 años y la casa son todo un ejemplo de vida. Gracias por la comida tan rica que nos han cocinado. Gracias!

El sabor tradicional y el gentil y buen trato valen la pena repetir muchas veces más. Mucha variedad de alimentos y preparados con sus propios cultivos. EXCELENTE!

Comida casera muy rica. Te sientas a la mesa y ahí te van sacando de todo. Queso, y jamón, tortilla de patata, sopa con garbanzos, pasta, carne, Y por supuesto la típica longaniza a la brasa. Los postres también variados y ricos. Calidad precio buenísima.

Buena y abundante comida casera sin estridencias.
Muy buen trato.
Menú sencillo pero completo y sabroso. Entorno original y auténtico.