Laurel Spiritual

Me senté a última hora en la terraza a tomar un gintonic, lo pedí con limón exprimido que no tenía, además de servirlo en mesa ya preparado sin poder comprobar que ginebra me servían. Una vez servido viene una chica y me dice que en 15 minutos cierra. Perdona? No saben decírmelo antes de cobrarme los 8 euros? A ver.soy incapaz de beberme una copa de gintonic en 15 minutos. Creo que lo mínimo si te sientas en un establecimiento a tomar algo es decir que la hora de cierre está próxima para tener la opción de decidir el qué pedir, si se pide algo.
Tengo que decir que después de quejarme y no querer moverme sin que me pusieran el gintonic para llevar, hubo alguien que salió y me devolvió el dinero

Pésimo servicio, el camarero muy seco, nos dice que no van a poner el aire, para sacarnos a la terraza, nos dice los whisky que hay y se deja la mitad, salimos a pagar y vemos que hay de todas las marcas, no volveremos

Fuimos por primera vez y última. Estuvimos 20 minutos esperando a que viniese el camarero y eso que apenas había clientes. Pedimos 3 cafés y un té, los cafés llegaron templados tras un rato de nueva espera. Precios caros para lo que era, sé que es centro, pero ofrece buen servicio por lo menos. Mal.

Los bocadillos genial, pero me parece fatal que en la carta no ponen los precios de los cafés y batidos y es donde luego te encuentras la sorpresa. (3 cafés laurel 14.70€) Creo que deberían poner los precios de esa forma mucha gente pensaría antes si pedirlo o no y así no llevarse el susto después.

Fuimos a cenar unos bocatas, pero no estaban buenos, mucho aceite, etc.
Pero lo que más nos llamó la atención es lo mal insonorizado que está, no se podía llevar una conversación del ruido de ambiente que había

Experiencia en terraza muy desagradable, lentos en atender y precios desorbitados. Cala con limón pequeña 2,70€

I had salad caprese (nothing special, just a lot of oil), bocadillos were ok. We can recommend coffee laurel (coffee with baileys)

Un poco cara la terraza. 3.20 una copa de cerveza. Y no tienen picoteo. Sólo bocatas y ensaladas

Buen servicio en general aunque en la terraza a veces tardan un poco (poco personal para la cantidad de mesas. No es culpa de los empleados)
Los batidos espectaculares

No te dejan juntar mesas porque por política de la empresa, literalmente "se lían y no se aclaran con los números"

Mal servicio, los cafés y tés muy normales para el precio, un Frappuccino imbebible. No recomiendo ir para nada

Más de media hora esperando dos bocadillos y una ensalada cesar, hasta que le pregunte al camarero que había pasado. Estaba tranquilamente comiendo mi ensalada cuando de repente noto algo muy duro, pensé; será un hueso del pollo, pues no.al sacarmelo vi un metal, sí, un metal de esos para atar los embutidos.ya se me fastidio la cena.solo recibí un, lo siento! Y la cuenta integra

Caro, carísimo, los camareros peores no los pueden tener, solo vale el sitio y no se diferencia en nada con cualquier otro de plaza San Francisco, no nos volveremos a sentar.

Restaurante bien decorado grande, pero pésima comida comer, ensalada infumables y solo bocadillos hace que no tenga ni menú ni carta para comer como un Restaurante al uso, personal correcto y cerveza muy cara 3.20 cada copa de cerveza.

Una terraza de la plaza S. Francisco con muy buenos bocadillos. Si hace buen tiempo se está muy bien.

Servicio malisimo una hora esperando a bocadillo encima se confundesn de mesa y nos traen los mismos.bpcadillos que llevan a la oyra mesa vamos y aun me pteguntan si quiero postre xon lo que tardan igual me llega para cuando cierren

Muy recomendable si estás por esa zona, para tomarte un bocata o una ensalada. En el caso de los tes o cafés tienen una variedad bastante amplia. El precio es normal, nada caro. La calidad es acorde a lo qu pagas. Volvería.

Porque no puedo poner ninguna estrella ns sentamos en la terraza llamamos a un camarero y se hizo el longi atención pésima tuvimos q llamar a otra chica q también atendía ns tomo nota d la bebida al parecer termino el turno y para pedir ls bocatas tuvimos q estar más d 20 mints.no nos levantamos y no fuimos por educación pq ya teníamos el vino en l mesa.no volveremos.

Pues hemos llegado a las 23h y las copas nos la han servido pasadas las 23.30h y no es la primera vez que voy y me pasa, creo que ha sido la última vez que me tomo algo ahí.

Los bocadillos estaban muy buenos pero los camareros son muy inexpertos y hacen mil viajes para nada. Les pedi la factura de la cena y el camarero me miro muy raro y me dijo: factura? Es la primera vez que me piden eso.
Le dije, no te preocupes, te dejo mis datos y me la mandáis mañana por email.después de 4 días no he recibido la factura cuando estoy en mi derecho de pedirla.

Llegamos a las 8.45, nos atienden a las 9.15 para bebidas pero se olvidan de trer la carta, traen la carta a las 9.45, pedimos y seguimos esperando.no se acerca ningún camarero a no ser que insistas, no nos traen la cena, tardan en todas las mesas pero clientes que han pedido mas tarde que nosotras ya estan atendidos.hemos pedido bocadillos, nada superelaborado.la barra y las mesas llenas de vajilla sin recoger.son las 10.30 y seguimos esperando la cena.el sitio cierra a las 11.30.esperamos cenar antes del cierre

Alucinante. 9€ por un café con baileys y hielo. Le pedí al camarero que en vez de echar el baileys en el café lo echase en el vaso con hielo y me cobró más que por un gin tónic. Por un dedo de baileys que me tomé le pagué La botella entera. La terraza está bien pero a mi no me vuelven a ver por allí.

El camarero de la terraza nos ha estado ignorando un buen rato y cuando por fin hemos conseguido que nos tomara nota hemos tenido que volver a esperar bastante hasta que nos ha traído las consumiciones. Mi copa de vino, por cierto, mal lavada, con la marca del pintalabios de vete a saber quién y cuándo.
Tampoco tienen cerveza sin gluten.
Ya no volveremos y es una pena, que la terraza está muy bien situada

Bar cafetería con mucha capacidad pero poco camarero. Tardan en servirte una eternidad. Precios elevados. No les cuesta nada contratar a una o dos personas más para dar un mejor servicio.

La tarta de queso que ofrecen en este local es incomestible: solo sabe a queso Philadelphia, le falta dulzor por todos lados y la textura es un mazacote.

Todo muy rico sobre todo los bocatas. Excepcionales con un sabor esquisito. Terraza muy bien situada y acogedora.

Los bocadillos y las ensaladas están bien, pero la lentitud es inigualable. 30 min para que nos tomen nota en terraza. Probablemente sea porque haya pocos camareros (normalmente hay uno para toda la terraza) y se ven sobrepasados. Pero es un aspecto a mejorar si no quieren acabar perdiendo clientes

Desastre. Hemos estado una hora esperando para que nos atendieran y finalmente nos hemos ido sin que nos sirvieran. Hemos entrado para ver si nos servían en la terraza y nos han dicho que sí. Pasados 20 minutos, sin acercarse hemos preguntado a la camarera si nos iba a atender, y ella visiblemente agobiada y algo enfadada nos ha dicho que estaba sola ella y que eso era lo que había, nos ha tomado nota, se ha ido y hemos seguido esperando, cuando hemos visto que servían a gente que ha llegado más tarde que nosotros, nos hemos levantado y nos hemos ido.

Después de haber ido muchas veces, hoy nos hemos ido sin comer de allí.
No es de recibo casi una hora y media esperando para tomar unos bocadillos.
Espero que sí volvemos, vaya mejor

Lugar perfecto para tomar un bocadillo, para mi son los mejores de Zaragoza.
Carta muy extensa y variada con bocadillos de todo tipo y a cuál mejor. Todo un descubrimiento.
Sólo le pongo una pega por lo que no le doy las 5 estrellas (que se las merece de largo) es que, para mí gusto la iluminación es un poco oscura, a mi me gusta que haya luz para comer.
De cualquier forma está acorde con la decoración del local.

Bocatería situada en un emblemático emplazamiento de la ciudad. Bocadillos diferentes y un excelente trato. No fallarás.

Servicio pésimo, mucha dejadez y cero interés. Unas esperas desmesuradamente largas (para nada) y además pareciendo que lo hacen a posta. Nos vamos con la sensación de que la gente que allí trabaja quiere hundir el negocio y que el cliente se vaya descontento. Objetivo conseguido!

La terraza está muy bien, tienen muchas mesas y está en plena plaza San Francisco. El problema es que son lentísimos, tienen demasiadas mesas para poder atender en condiciones. Tardaron 45 minutos en sacar 2 bocadillos. Además la bebida es cara, cualquier sitio de alrededor es más barato y tardan menos

3€ por un vermut. Con dos hielos que si los sacos se queda en un dedo de vermut, haber si paramos y no se juega con el dinero ajeno. No obstante aquí no vuelvo.

45 minutos esperando tres cervezas.
25 minutos esperando la segunda ronda; culpa nuestra por quedarnos.
No sé si no se apuntan las comandas o directamente no les interesa.
Entiendo que es una terraza que lleva mucho tiempo en Zaragoza y siempre ha tenido clientela, pero eso no quita que se cumplan unos mínimos de servicio.
Esto sin nombrar que una copa de cerveza te cuesta más de 3€.
No es la primera vez y, desde luego, no volveremos.

Fatal. No pongo cero Estrellas porque no se puede. Más de media hora esperando. Hemos pedido bocadillos y Coca-Colas. Luego, hemos pedido los postres y antes de traérnoslos nos han sacado la cuenta. La camarera se ha quedado de pie junto a la mesa sin mediar palabra, de forma que hemos entendido que teníamos que pagar ya.

Una vez pagado, hemos estado otra media hora esperando. Le hemos pedido de nuevo los postres y nos han dicho que si los queríamos, para llevar, y si no nada.

Le hemos dicho que no, que nos devolvieran el dinero correspondiente a los postres y cafés que nunca llegaron. La camarera, sin decir nada, nos ha tirado el dinero en la mesa.

Una absoluta vergüenza. Por cierto, 4 bocatas y 4 bebidas, casi 70€. No volveremos nunca.

Me gusta la estética del lugar por dentro. Las veces que he ido, suelo tomarme unos batidos que tienen de varios sabores (KitKat, Huesitos, etc.), Y que son bastante grandes (si lo ponen con nata, se cobra aparte).

También está bien para tomar cerveza, aunque para mí está un poco cara.

La última vez tardaron más de lo esperado en servirnos y atendernos, aunque es cierto que en la terraza había mucha gente y supongo que sería excepcional.

Tiene una gran terraza, buen servicio pero algo lento. Si tuvieran estufas sería un sitio ideal.

Acabamos de pedir con delivero y nos han mandado una ensalada de quesos llena de moho. A saber cuántos días lleva preparada. Y encima no contestan el teléfono para reclamar

El serbio bien, la, ensalada, mal absolutamente insípida, los bocadillos uno bien el otro, tenéis que mejorar la calidad

Atención rápida y muy bien, hemos estado en la terraza, hemos pasado un poco de frío porque no tiene calentadores y hasta que ha llegado el sol a tardado, pero es normal estamos en diciembre jejeje lo que pagas es la zona 3€ el te y 2€ un café de sobre!

Un sitio original y muy agradable. Sirven un té rico en las teteras más grandes, dónde sientes que te has tomado un té.

No te hacen una tortilla francesa. Su respuesta fue solo bocadillos. La nuestra. No tiene dientes es un bebé de un año. Y se encogió de hombros. Nos quedamos sin tortilla y ellos sin clientes.

Bocadillos geniales con mueva carta. No pongo las 5 estrellas porque la música a ratos no es la que era.esa selección de fantástico chill out!

20 minutos de reloj esperando por un batido y una coca cola.

De verdad lo de esta ciudad en tema de hostelería a veces es de coña.

Bocadillos super ricos y una decoración muy original. Además a muy buen precio. Imprescindible si vais a Zaragoza.

Lugar bien decorado y con variedad de bebidas y bocadillos. Camareros despistados, que venían constantemente o se olvidaban

Un sitio popular por sus sandwiches. Hay terraza, muchísimas variedades de ensaladas y bocadillos. Lo recomiendo

Gran variedad de bocadillos pero pecan un poco del pan con semillas.eso sí la decoración y el ambiente para tomar algo por la noche es magnifica

La calidad de la comida es buena. El servicio deja mucho que desear. No están atentos a las mesas que tienen en el restaurante.
Nos tenemos que levantar para que nos tomen nota de la comanda.
30 minutos para pedir los postres estando el establecimiento vacío.
La música es buena.

Nos pedimos un bocadillo, nos lo trajeron frio y con el queso ahí encima sin fundir (cuando la descripción ponía claramente "queso fundido") Cuando corrigieron el error, el bocadillo estaba bueno

Hemos estado tomando un café después de cenar.
El sitio impresiona, la decoración es espectacular, pero resulta incómodo. Los cojines resbalan y estas mal sentado.

La comida exquisita, el servicio por parte del camarero muy lento y mal, muy borde y parecía que nos tuviésemos que disculpar por estar ahí y cortarle la charleta que llevaba con su amiga la camarera de la barra.

Cualquiera de sus ensaladas son deliciosas y el ambiente íntimo del local es genial. Me gusta muchísimo el tema de que la luz sea baja y pongan velas en las mesas.

Mucha variedas de bocadillos y la ensalada de espinacas y champiñones muy buena. El batido no tanto. Hay muchisimo ruido dentro y poco espacio. Ya es la segunda vez que vengo y habra una tercera

Un robo que te.cobren 7 euros por.un bailey's con hielo.y que pidas copas sin nata, te pongan la nata y te cobren suplemento por ella.

Le doy una estrella porque no se puede dar memos, bocadillos muy buenos, camareros antipáticos e incompetentes. El sábado día 11 se negó a un grupo de 7 personas a dar cafe después de haber cenado. Nos dijo que estaba la cafetera a tope. Automáticamente al salir estaban las 2 cafeteras sin utilizar. Vergonzoso

Buen sitio para comer o cenar. Bocatas de calidad. Han aguatado la crisis. De los pocos locales que estaba lleno cuando todos flojeaban.

Bocadillos muy buenos. Las tartas caseras y exquisitas. Pero por favor. Un poco más de luz! Me gusta poder ver lo pido.

Servicio de terraza pésimo, después de 30 minutos esperando a que nos sirvieran nos hemos levantado y nos hemos ido. Segunda vez que nos pasa. El camarero se desentiende y nos dice que el solamente está para servir.

Bocateria venida a más. Buenos bocadillos, muy pocas luz y no ves al de enfrente, la música muy alta, te cuesta hablar con la gente, las mesas muy cerca una de otras, se enteran todos de lo que dices porque tienes que gritar. Bien decorado.