Palacio De Larrinaga

Encantos ocultos de la ciudad de Zaragoza. Realizan visitas guiadas de vez en cuando. Hay que estar atento.

Queremos agradecer el trato recibido por el equipo del cachirulo. El lugar impresionante, como se puede apreciar en las fotos.
Gracias a Sonia por asesorarnos tan bien y por venir el día de la boda a ver si estaba todo a nuestro gusto.
Gracias a Carlos el maitre, como bien nos dijo el día de antes, fue entrar al palacio y desaparecieron todas nuestras preocupaciones, todo funcionó de maravilla a lo largo del día.
Gracias a Dani el DJ, ánimo a todo el mundo y puso la música perfecta en todo momento.
Por último, muchas gracias al resto del equipo, estuvieron pendientes en todo momento de que todo saliera perfecto.
Gracias por hacer posible la boda de nuestros sueños.

Lugar magnífico para eventos pero la comida solo pasable. Y un frio terrible en la carpa comedor.

Un emplazamiento de ensueño con un trato perfecto

El Cachirulo, que decir de ellos, son un valor seguro y un referente en cuanto a servicio y cocina se refiere, pero en nuestro caso fue algo más, en la búsqueda de un lugar perfecto para celebrar nuestro enlace sabiamos que no queríamos otra cosa que la perfección, y por ello elegimos El Cachirulo, y fueron ellos, en especial Sonia, la asesora de eventos, quién nos descubrió esa maravilla de sitio que es el Palacio de Larrinaga, un gran desconocido pero precioso.
Ella fue la que comentándole las personas que seríamos en el banquete la que nos dijo que ese lugar podría ser perfecto, y que razón tenía! Una mañana quedamos para visitarlo y desde el primer momento nos maravillo, así que con el sitio decidido, nos encaminamos a la elección del menu, Sonia y su equipo estuvieron siempre a nuestra disposición, resolviendo nuestras dudas, aconsejandonos en cómo hacer nuestro enlace perfecto, nos aconsejo que no pusiésemos mucha decoración, ya que el lugar ya habla por sí solo y que gran verdad! Y más cuando la boda no era civil.
En cuanto a la comida estaba todo perfecto, nos dejaron cambiar todo aquello que no nos convencia para poner cosas que si, es decir lo adaptaron al 100% a nosotros y también a nuestros invitados, y es algo que todos los asistentes nos recalcaron, estaba todo riquísimo y perfecto, además teníamos varios menús especiales, intolerantes al gluten, vegetarianos, alérgicos a pescados, mariscos y a frutos secos lo cual es todo un reto para la cocina, pero ellos confeccionaron un menu con su cocktail propio para ellos.
El día antes de la boda pudimos llevar al Palacio todo lo que íbamos a necesitar al día siguiente y como había cosas que no podíamos dejar hechas fue el equipo de Sonia, con Pinilla, el maitre, a la cabeza quienes lo pusieron y dejaron perfecto.
Nos hicieron todo muy sencillo, nosotros quisimos poner como regalo a los invitados una barra libre de tatuajes, así que trajimos a un tatuador de verdad, y ellos se encargaron de planificarlo todo para que nadie lo viese, al igual que la rondalla de jotas que contratamos para el cocktail, Sonia y Pinilla fueron los que les dieron paso, los acomodaron y "escondieron" hasta que llegásemos, fue increíble y perfecto.
Y que decir de la empresa que amenizó nuestra fiesta, T2Eventos, fueron los mejores, se amoldaron a como queríamos la música y los momentos claves de los regalos y sobre todo nos lo hicieron pasar genial en la fiesta, las fotos son una descripción gráfica de ello!
Así que solo nos queda agradecerles a todos su familiaridad, su empatía, predisposición y ayuda y sobre todo su profesionalidad.
No hay nada más gratificante que tus invitados recuerden tu boda por lo bien que comieron y lo bien que lo pasaron.
Gracias por hacer nuestra boda perfecta para nosotros y nuestros invitados.

Antiguo colegio, noviciado y escolasticado de la Compañía de María (marianistas). Grandes y emotivos recuerdos de haber vivido allí.

Palacio de estilo eclecticista de principios del siglo XX.
A finales del siglo XIX, Miguel Larrinaga, un acaudalado naviero vasco, encargó su construcción a Félix Navarro, un arquitecto de los más importantes de la ciudad. Este palacio era un regalo a su mujer Asunción Clavero, que era de origen aragonés. Ya que ambos vivían en Liverpool y su objetivo era trasladarse a vivir tras su jubilación, cosa que no ocurrió pues ella falleció en 1939, tras esto el palacete se puso a la venta en 1942.
Tras varios propietarios y usos el Palacio de Larrinaga fue comprado en 1993 por Ibercaja quién lo restauró y amuebló, utilizándose en la actualidad para realizar eventos y celebraciones, además de visitas guiadas.

Bonito lugar. Estuve en una celebración y descubrí uno de esos rincones de Zaragoza que no conocemos muchas veces y tiene una gran historia.

Todo el edificio y los jardines están muy bien cuidados. Celebramos una boda allí y el trato que nos dieron fue perfecto.

Muy agradable. Cuidados jardines en los que apenas notamos el calor que hacía ese día. Instalaciones correctas. Comida buenísima y personal muy correcto, atento y profesional

El 9 julio celebramos la boda de Marta y Román, solo puedo decir que todo maravilloso, empezando por Israel es un profesional de 10 y en todo momento estuvo pendiente para que todo saliera perfecto, los camarer@s también de 10, a Sonia mil gracias por estar allí y todo el trabajo que realizó previo a la preparación de la boda. Entre todos hicisteis que el evento saliera mejor que bien y que los invitados estuvieran a gusto y disfrutarán y por supuesto los novios que se lo pasaron genial. Gracias a todos por vuestra profesionalidad y buen hacer.

El 25 de junio oficié la boda de Cintia y Blas. Encantadora pareja y familias.
Y me gustaría destacar la labor del maitre Israel por su amabilidad y atención profesional y, al mismo tiempo, cercana. Así como la de todo el equipo de profesionales que lidera. Especial mención para Laura, la responsable de cuidar el acceso al Palacio, que se mostró en todo momento atenta, diligente y detallista, haciendo mi labor mucho más fácil, así como la de los invitados a la celebración.
Calificar con un 10 mi experiencia allí se queda corto.

Lugar de buenas celebraciones gestionado por EL CACHIRULO (lo malo que yo lo visito por motivos de trabajo)

Nunca lo he visitado, quizás porque paso y lo veo a menudo. Por mi oficio si he visitado y consultado los muy valiosos fondos bibliográficos de la Fundación iberCaja. Se q' allí está esperando el libro de mi Maestro DALi: "mi vida secreta " q' tanto daño hizo al calandino el admirable LUiS BUÑUEL. Este palacio no lo construyeron los hombres sino EL AMOR. A veces te encuentras la notificación: "este es el palacio d' LARRiNAGA. ¡ y no el de la REiNA HAGA! El amor fue la base de su construcción. Caminante.el quiere conocerte ¿ a qué esperas?

Zaragoza es un sitio muy agradable muchas vias jeniales para trancitar tiene vias solo para bicicletas que puede recorer todo zaragoza argon selo recomiendo

Me parece lamentable que una entidad como Ibercaja saque negocio de esto. No olvidemos que uno de los laterales donde va la carpa de la fiesta oculta una parte del edificio. Me imagino que el explotador de los eventos será colega de algún alto ejecutivo

Espectacular sitio para la celebración de eventos. En mi caso fue la boda de un amigo. Todo perfecto y el lugar chulisimo. La comida del catering del Cachirulo, espectacular, como siempre.

Para mi 4 es la máxima puntuación porque siempre se puede mejorar algo. Todo perfecto. Solo falta poder visitar el palacio.

El de Larrinaga es uno de los palacios más bonitos de España, y también el protagonista de una agridulce historia de amor.  Su dueño, Miguel Larrinaga, conoció en misa a la que sería el amor de su vida, Asunción Clavero. Tras las nupcias, el empresario compró un terreno en Zaragoza y mandó construir este palacio al que llamaría Villa Asunción, en honor a su nueva esposa. Lamentablemente, antes de llegar a habitarlo, Asunción murió, por lo que Larrinaga, roto de dolor, decidió vender el palacio. Hoy en día se usa como colegio.

Lugar precioso para celebrar una boda, el palacio ya en su construcción fue un símbolo de amor que perdurará en la mente de muchos.

Para celebrar bodas y banquetes en privado. Lugar muy cómodo, esos sí debido al COVID lo típico, distancias, pocos comensales por mesa y separados en salones internos y mesas externas, por lo que hace calor si te toca fuera, pero esto es algo pasajero.

El palacio de Larrinaga es un palacio de Zaragoza de principios del siglo XX que, cuando fue construido, se encontraba alejado del casco urbano pero que, actualmente, se encuentra plenamente integrado en él. Por otro lado, el Ayuntamiento de Zaragoza lo etiqueta como neorrenacentista.

El palacio fue encargado al arquitecto Félix Navarro, uno de los más prestigiosos de la época. El proyecto es del año 1901. El palacio se edifica en el antiguo barrio de Montemolín de Zaragoza.

Se finalizó en 1908 pero nunca fue habitado ya que fue un encargo para disfrute del matrimonio formado por Miguel Larrinaga de Luzárraga y Asunción Clavero. La pareja residía en Liverpool y tenían dos residencias de vacaciones en San Sebastián y Málaga. Su objetivo era retirarse aquí, pero ella murió en 1939 y el palacio se puso a la venta en 1942. Giesa fue la empresa que compró la parcela incluido el palacio, construyendo su fábrica en los terrenos adyacentes (se conserva con el nombre de Schindler) e instaló sus oficinas en la casa. Al poco tiempo la parcela se pone de nuevo a la venta, siendo los compradores los Hermanos Marianistas quienes lo usan como colegio residencia. Finalmente la compró Ibercaja en 1993, su actual propietaria, que la restauró dándole uso como centro de fondos documentales.

La decoración del inmueble alude al mar y al comercio marítimo, ocupación de los Larrinaga. Los materiales usados son específicamente aragoneses: piedra, ladrillo y cerámica.

Ramón de Larrinaga, importante naviero vasco y fundador de " Olano, Larrinaga & Compañía" murió en 1888.

Ramón de Larrinaga y su esposa Telesfora de Luzárraga tuvieron cinco hijos: Félix (el mayor, que vivía con él en Liverpool), Anselma, María, Miguel (quien compró los terrenos y ordenó construir el palacio) y Domingo. Al morir Ramón y habiendo muerto anteriormente Telesfora, los cuatro últimos eran menores de edad quedando bajo la tutela de varios de sus tíos (D. Miguel A.de Luzárraga y D. José de Larrinaga). Éstos trataron de que tuvieran una educación perfecta para que se encargaran de la empresa de su padre en el futuro.

Su hijo Miguel de Larrinaga tenía por entonces 15 años y vivía en el País Vasco. Le obligaron a estudiar Derecho para poder hacerse cargo de la empresa de su padre. Viajará a Zaragoza para ello y allí conocerá a la que será su esposa y su gran amor: Asunción Clavero, nacida en Albalate del Arzobispo, Teruel. (Se dice que fue durante una misa en El Pilar).

Una vez terminada la carrera, viajará a Liverpool, en donde se casará ese mismo año con Asunción. En 1898 se hace con el poder de la empresa de su padre (pese a no ser el mayor de los hermanos) que se pasa a llamar "Miguel de Larrinaga Steamship Co. Ltd. " Tras tres años allí, en 1900 decide viajar a Zaragoza para adquirir un terreno en donde, un año después, iniciará la construcción de un palacete llamado "Villa Asunción". Éste, quieren que sea su nido de amor maduro donde vivan a la jubilación de Miguel (cerca de la tierra que vio nacer a Asunción. La mala salud de ella no permitió que se consumara ese futuro idílico. Roto, y con pocas ganas de volver a una tierra que no era la suya, después de la Guerra Civil, en 1942, vende el terreno a la empresa Giesa (con el palacio incluido sin enseres ni mobiliario), que establece en él sus oficinas y construye las naves adyacentes que a día de hoy, abandonadas y en un estado lamentable aún pueden verse. Estos, más interesados por el terreno que por el edificio, venderan a no tardar a los Marianistas (compañía de María) que lo usan como colegio.

Este edificio nunca fue habitado desde que se termino de construir 1908, ha tenido diferentes dueños y el último y actual es Ibrecaja dándole uso como centro de fondos documentales. Todos los materiales usados son de origen aragonés.

Las bodas realizadas en este sitio con el grupo Cachirulo un auténtico desastre. Una pena con el sitio que es y lo mal que lo pasamos en la boda.

Un palacio construido a principios del siglo XX como regalo del esposo a su amada. Detrás, toda una historia de amor que no tiene nada que envidiar a las magistrales novelas de amor que se han escrito.
El edificio está en perfectas condiciones y los guías te llevan a la época. Merece la pena.

He acudido como fotógrafa en un trabajo y tengo que decir que me han quedado ganas de verlo de día, muy chulo, no lo conocía.

Recomiendo la visita al 100%. El palacio está totalmente restaurado. La guía, con su entusiasmo, nos ha hecho pasar un rato estupendo, contándonos la historia de amor y penas, que vivieron sus propietarios.

Se finalizó en 1908 pero nunca fue habitado ya que fue un encargo para disfrute del matrimonio formado por Miguel Larrinaga de Luzárraga y Asunción Clavero. La pareja residía en Liverpool y tenían dos residencias de vacaciones en San Sebastián y Málaga. Su objetivo era retirarse aquí, pero ella murió en 1939 y el palacio se puso a la venta en 1942. Es muy recomendable su visita guiada a este bonito palacio de zaragoza donde verás la bonita historia de amor que hay detrás de su construcción.

Gran visita guiada a un palacio con una historia muy romántica!
Te transporta a otra época. La guía que nos explicó la historia lo hizo de un modo maravilloso.

Precioso palacio lugar de celebración de una boda. Todo buenísimo, desde el aperitivo, la comida y los vinos y licores en un entorno tan bonito ñ.

Si el edificio el precioso por fuera, por dentro aún te sorprende más. La visita fue muy interesante y sobretodo gracias a Lara, nuestra guía, entusiasta de la historia de Miguel Larrinaga y Asunción Clavero. La vista la gestiona la fundación Ibercaja y cuesta 3€, salvo pensionistas. Dura mas de hora y media y es muy interesante. Se visita tanto la planta baja como el primer piso, y te cuentan toda la historia del inmueble. No hay problema para encontrar aparcamiento en las proximidades

Una visita que no te puedes perder. Una guía muy informada, apasionada de la historia te hace la visita muy interesante y entretenida

Lugar con mucho encanto e historia. Lo visitamos con una empresa que se llama mandrágora actividades y las explicaciones fueron de 10.

Es un sitio precioso con una bonita historia, aunque poco conocido fuera de las inmediaciones del barrio. Merece la pena visitarlo.