Restaurante Canfranc

En general todo bien. Lo único que mencionar es el precio que está un poco carete. Dos huevos con gamba y dos cervezas algo más de 10€

Un bar clásico en el centro de Zaragoza. Excelente servicio, terraza, buenas tapas y raciones. Muy recomendable

Comimos tapas. Estaban muy buenas, comida casera. Los tacos de ternera picante buenísimos, y la tapa rellena de longaniza y cebolla buenísima también. Servicio bueno. Había menú diario y tenía súper buena pinta!

Entre a tomarme un cortado y un pincho de tortilla a eso de las 10 de la mañana. La tortilla era de cebolla y estaba muy jugosa. Tenían varias tapas a elegir ya a esa hora y también churros y bollería. El camarero que me atendió fue muy amable. Es un clásico de la zona, suele estar muy concurrido. De precio no es barato pero está en consonancia con la zona. Tenían menú de mediodía.

Recepción bastante buena al principio, finalmente como éramos 4 con un bebé nos vimos obligados a entrar porque una mesa era demasiado pequeña para servir (podría haberlo hecho)
No hay agua en la jarra. Obligado a comprar botellas de plástico (viva la ecología).
Precio asequible, comida realmente ps terrible.
Sin espera
inodoro limpio
Nada para el bebé, ni silla, ni cambiador.
No hay aparcamiento en la calle peatonal.bastante decepcionado

Local céntrico, pequeño, acogedor. Menú con sólo 3 opciones, pero muy bien preparado. Comida deliciosa. Precio 15€, razonable. El trato, muy amable. Una elección muy buena.

Comida casera, muy buena, atencion y servicio muy correcto y los dueños muy simpaticos y amables.

Tome un almuerzo de camino para hacer unas gestiones me puse en una esquina y me fui pronto.

Ambiente casero lleno de jubilados.
Comida casera con 2 platos a elegir. Por desgracia el día q fui se les había acabado la opción q yo quería pero me ofrecieron algo de la barra en su lugar.
Personal muy amable.

La dueña nos ha echado la bronca por darnos un abrazo. Al parecer es algo que suele hacer. Deleznable

Todo perfecto.
Muy buen trato
Y muy cómodos
La comida perfecta.
Muy sabrosa

Pongo 1 estrella porque no se puede poner menos. En la vida he visto un trato al cliente tan deleznable como en este sitio. Hemos optado por irnos incluso si haber acabado de comer. Desde luego si tienes niños ni se te ocurra venir a este sitio, no he conocido a nadie con tan mala educación.

Un buen lugar para hacer una pausa, dentro o en la terraza.
Buenos productos, buena cocina y los camareros auténticos profesionales.

Personal excelente, muy amable y atento… nos sirvieron unas jarras bien fresquitas, y lo que mas nos gusto es que si vas con tu perrito le ponen agua con hielo y le miman un montón, la verdad que salimos encantados de allí.

Calamares que luego son rabas 9.5 e sándwich simples de casi 5 euros.precio algo disparado, ni la mesa limpia al sentarse

A las 21: 45 nos sentamos para cenar y nos dijo él camarero mayor que ya no era hora de servir que la hora de cierre era a las 22: 00. Lo que sí vi que se podía hacer era fumar en la terraza, para eso no había impedimento, incluso este mismo camarero.

Un restaurante muy agradable, ideal para tomar un café tranquilo en la terraza o en el interior, las tapas espectaculares, no sabría con cuál quedarme y para comer un menú muy acertado. El trato del personal correcto y muy agradables, siempre pendientes y super rápidos, también están los dueños trabajando y te tratan super bien y con una agradable conversación y te recomiendan muy acertadamente. La verdad es que es de esos sitios que sabes que vas a pasar un rato agradable y que te van a atender nada más entrar por la puerta. Lo recomiendo, no defrauda.

It's a old local bar, which you can have a good coffee or have a tapas lunch.situated at center of the city.

Restaurante familiar, los Huevos rotos están riquísimos y l@s camarer@s súper amables. Tienen terraza y cuando hace viento se está protegido.

Pasó con bastante frecuencia por el sitio y hace tiempo quería entrar porque llama la atención el sitio y que tienen una carta con comida tradicional.
Fuimos a la hora de comer, lógicamente poca gente y servicio rápido y correcto. Lugar espacioso, cómodo y bonito. Pero en cuanto a la relación calidad - precio. Creo que salen perdiendo.

El menú (no sé si fue algo oportuno del día) constaba de 2 primeros y 2 segundos a elegir, además de pan, bebida y postre. Las raciones y la calidad de las mismas algo escasas y normales teniendo en cuenta el precio que tiene (13.5€). Esperaba algo más abundante o con un toque más casero, sobretodo en las patatas.

No lo veo tan malo como para no volver, pues tienen muchas cosas más (raciones, tapas y otros platos además de bebidas y café), pero si tenerlo en cuenta en cuanto a menú del día se refiere.

Fui aquí con mi novia a tomar un café después de comer. La dueña que es una señora impresentable nos echo a gritos de la terraza por darnos un beso con comentarios bastante machistas y de otra época. Una vergüenza, además visto lo visto le ha pasado a más parejas y familias con niños. NO VOLVEREMOS NUNCA MÁS.

Le doy un 3 pero más por el recuerdo de lo que fue. Ha bajado mucho, sólo espero que entren con la piqueta un día y nos ofrezcan una nueva versión.

Otro local en zaragoza que sirve desayunos y que no sabe la difrenciala entre tostada y pan la plancha con aceite. Me he quedado sin desayunar y sin ganas de volver

Pongo 1 porque no se puede poner 0 que es lo que se merece la dueña de este local.

Ibamos con un carro y nos dijo que en su epoca las mujeres se quedaban en casa cuidando al bebe y no iban por la calle con semejantes carros que no caben. Muy desagradable.

Señora abra un poco la mente que ya no estamos en la edad media.

Experiencia mala. La dueña no puede ser más desagradable y con unos ideales un poco atrasados para la época en la que estamos.
Ha sido entrar y sentirnos muy incómodos por su parte.
Por no hablar de la higiene que había en el baño.
Y el olor.que sales con un olor a aceitucho que ya puedes ir directo a la bañera

Parece ser que ir con un bebe de siete meses y su correspondiente carrito no le hace mucha gracia a la señora que no hace mas que pasearse y molestar a los clientes, esta señora que es la dueña debería de poner un cartel indicando que no es apto para niños.si cree que un niño que ni habla aun y ni siquiera a llorado molesta no se imagina la mala presencia, lo grosera y mal educada que resulta ella!

HORRIBLE! Mal educados! La dueña esta loca! No ha dicho que era un bar tranquilo y que con un carro de bebe estuvieramos poco rato! Eso si despues de haber pedido la consumicion! Unos sin verguenzas!

Céntrico. Personal amable. Ideal tanto para un café, el aperitivo o comer. Buenas tapas. Menú aceptable. Precios asequibles. Terraza estupenda

Ha perdido mucho con el paso de los años. Yo creo que siguen pensado que son la cafetería elegante de la Calle Canfranc y siguen un poco anclados en los 80. Una manita de pintura no vendría mal.a todos los niveles. Mejores opciones alrededor.

Brutal! Para recomendar! El servicio estupendo. He pedido una menestra con alcachofas albardadas exquisitas! El sitio nvitaba repetir tanto para tomar un aperitivo como para comer a diario o tomar una copa. Cuenta con terraza en una localización en el centro de Zaragoza ideal.para cualquier gestión tanto de ocio como de trabajo. Repetiremos!

Llevo comiendo aqui desde hace muchos años. La comida es muy buena. Mucha calidad. Muy bien cocinada. Unos platos exquisitos.

Solo he estado tomando unos, montaditos
Por lo que no puedo opinar sobre su condición de restaurante.
En cuanto a los montados y raciones, bien, calidad razonable, precios ajustados a la zona y la calidad que ofrece
Trato del personal entre bueno y aceptable
Ambiente tranquilo.
Buena zona, céntrica a tres minutos andando del paseo independencia
Mala zona de aparcamiento, el poco que hay es, o zona azul parking de pago
En general recomendable

No me gustó la comida que me pedí. Era bastante insulsa y con raciones muy simples. La calidad muy normalita.

Buen café, una estupenda terraza, gran selección de vinos y la calidad de las tapas regular. El servicio profesional y muy amable. Para resumir un sitio que merece la pena.

La dueña nos quiso echar de la terraza a mi novia y a mi por darnos dos picos mientras tomábamos un cafe para bajar la comida, que por cierto muy cara. Los camareros muy cordiales y atentos, se nota que el negocio funciona gracias a ellos.