Este sitio web utiliza cookies para mejorar la experiencia del usuario. Al utilizar nuestro sitio web, usted acepta todas las cookies de acuerdo con nuestra Política de cookies.Aprende másOK
Estuvimos un grupo de amigas este viernes pasado y fue un desastre, nos pusieron lo que quisieron poniéndonos lo que a ellos les pareció porque nos lo habían preparado. Y el ambiente horrible, estaba el que parecía el dueño, con un grupo de amigos que nos llegaron a intimidar. No volvería ni gratis
Pésima atención, camareros nada profesionales, más de una hora para que te atiendan. Tuvimos que irnos y ni pedimos el postre, no puede ser que reserves a las 14: 30 y no te tomen nota hasta las 15: 30. Platos escasos, entrecot pequeño y pasado con cuatro patatas, rabo de toro ni lo pidáis, parece de cordero. Nada recomendable
Un dia se me rompio la suela de las converse me la comi sin querer y estaba mas blanda que el filete, el vino espectacular…. Los monaguillos lo beben mejor.
Pongo esta reseña porque no me parece bien, por mucha fiesta que sea, que te sirvan las cañas en vasos de plástico tipo dentista a tres euros. Una vergüenza, sinceramente
Reserve una mesa para comer dos personas con dos días de antelación, y sentados en la mesa me ofrecen un menú escaso por 25 eur, pedí la carta, que no me dieron, y solo había dos ensaladas, unas alcachofas y de segundo entrecot y preguntaría a cocina por un posible arroz, totalmente desencantado aquel local con raciones de temporada, rabo, steak, solomillos etc etc (según pizarra) me levanté y marché, decepcionante de lo que fue éste local, no volveré nunca.
Sitio sobrevalorado tanto en Google como en otras redes. Pedimos unas migas, normalitas, pero bien. Cuándo se pidió el chuletón fue cuando empezaron los problemas. Queríamos un chuletón de 1kg tal y como viene en la carta, y lo trajeron como un carpaccio. El detalle feo fue echarnos a medio comer. Apagan las luces, se ponen a barrer y a limpiar. Entiendo que tienen que descansar si regresan a las 20h a trabajar, pero entonces no cojan más mesas. Pongo 2 estrellas porque me parece muy triste poner una, pero háganse la idea: 1 botella de Ramón Bilbao crianza 2019, unas migas para compartir y en carpaccio de chuletón 72,50€
Lo mejor sin duda es ver como bebe cerveza el dueño en la barra, sentando cátedra de lo que es empinar el codo mientras se trabaja. Sentí vergüenza ajena.
Nada que ver con lo que era.la barra atendida por una persona, con mucha lentitud. Tardaron media hora en servirnos la tapa de jamón con chorreras, que tampoco tiene nada que ver con la que tomábamos antes, en fin, para olvidar.
Resulta lamentable que en Zaragoza pongan una tapa de lingote de ternasco que es de una oveja vieja y lleno de grasa, frío y a saber de cuando era. A evitar este bar.
En esta ocasión nefasto. Hacia mucho tiempo que no iba, probablemente mas de un año. Entramos, dijimos que queriamos tomar algo y elegimos unos huevos rotos y mientras esperamos pedimos algo de beber. Cuando trajeron los huevos rotos, nos dijeron que no habia pan. Que yo sepa y hasta la fecha en todos los sitios que he comido huevos rotos, estos se comen con pan. Era un dia entre semana, y bueno, aunque es raro un restaurante se puede quedar sin pan y no tener alternativas, pero deberían haberlo avisado en el momento que la comanda entra en la cocina. No aceptamos los huevos rotos y pagamos las consumiciones y nos fuimos. Así que perdimos media hora consumiendo bebidas que de otra forma no hubiéramos consumido y ellos perdieron producto. Un pco absurdo por simplemente una mala gestión. Por otro lado el bar olia muchisimo a humedad y en la zona donde estan los baños junto a la cocina había mucha grasa en el suelo. Se veía una cocina sucia. Para mi era un bar emblemático de al ciudad pero me temo que no volveré mas. En conjunto todo un poc de asquete.
El arroz con bogavante un poco flojo, por no decir bastante. Estaba insípido, demasiado caldoso y los trozos de pimiento y cebolla eran excesivamente grandes. Con el tiempo que tardaron en hacerlo esperábamos algo mejor.
Excepcional bar, camarera súper atenta, y el cocinero que salió un momento un crack. Probamos varias tapas, y sin duda la de ternasco.es es-pec-ta-cu-lar.un 10 no, lo siguiente.
De cinco Segundo platos, solo tenían dos, y de eso nos enteramos después de pedirlos y esperar a que nos sirvieran. Pedimos uno, no tienen, pedimos otro, volvemos a esperar a que nos lo sirvan, tampoco tienen, y así hasta tres veces. Vaya que hemos comido como menú y nos han cobrado a la carta. Creo que si no tienes comida para atender al cliente, antes tienes que informar de las pocas posibilidades de elección Eso si, por lo menos lo que nos han servido estaba bueno
Un 10. Un lugar que no defrauda nunca. Fui a comer un frito de jamón con chorreras y como siempre espectacular. Buen vino, de muchas DO. Para repetir siempre que voy y para recomendar a todo el mundo.
De misnlugarws favoritos en Zaragoza para tapear (también hay restaurante y también tuve muy buena experiencia). Recomiendo el calabacín relleno, el erizo de mar, los jamones con chorreras, el cuesco de cabra.todo.
Fuimos por recomendación de unos amigos y no nos convenció. Trato y servicio regular. La carta algo justa. Presentación de los platos normalita. No volveremos.
Fuimos, ya que participaba en el concurso de tapas de Zaragoza. Al llegar, les dijimos que íbamos aparte de a por la tapa, a cenar. No quedaban tapas del concurso. Eran las 22: 00h. Aun así, nos quedamos para poder cenar, dadas las horas. Nos sientan, pedimos la carta. Al rato, le decimos que ya sabemos qué vamos a pedir, nos dice que la cocina está cerrada ya, 22: 15.le decimos que nos tenía que haber avisado cuando le habíamos dicho que queríamos cenar. Como favor, nos hacen unos huevos rotos.el resto de cosas de la carta, no tenían, sólo lo que había en la barra 4 cosas y.hecho desde por la mañana, poco pudimos probar. Vimos como varias personas se iban yendo conforme les decían que no estaba abierta la cocina. Un lugar que ha empeorado con los años, antes no era así, sólo lo salva del 1, la amabilidad de la pobre camarera que nos atendió, como mejor podía, dadas las circunstancias. Una pena, y más, dada su buena ubicación. Ojalá vuelvan a sus orígenes.
Una verdadera pena como ha acabado este sitio.las camareras amables, pero no tienen ni idea de lo que venden, les preguntas lo que lleva una tapa en concreto y no lo saben. El bacalao estaba bueno, para ser un frito recalentado, el jamón con chorreras con jamón de York del cuadrado. No digo más.
Un poco de desajuste a la hora de servir los platos. Muy lento el servicio. Pero la comida estaba muy bien. Imprescindible el jamón con chorreras y los huevos rotos con foie
Muy lentos de servicio. Muy mal organizados, les faltaban varias tapas y raciones de las habituales y te avisaban 1/2 hora después de pedirlas. En fin, han perdido mucho de la calidad y el servicio de antaño.
Ayer fuimos a cenar y la verdad que no nos gustó mucho. Pedimos un Lingote de ternasco que estaba malo y olía mal, la tapa de bacalao rebozado precalentado y el pan duro, el taco de chuletón un poco quemado y muy hecho. Sales con olor a frito.
Pasando un día por Zaragoza, leyendo diferentes páginas webs sobre lugares para tapear por Zaragoza, decidimos probar este local. Probamos 4 tapas diferentes, entre ellas, su característico y recomendado “jamón con chorreras” (la que más me gustó). Optamos también por el ravioli de rape y gambas (muy rica), por el calabacín con chipirón (también rica) y por la croqueta de jamón (estando también buena, quizás la que menos me gustó, por su gran tamaño y falta de cremosidad). Si te gusta ir de tapas, sin duda este sitio puede formar parte de tu ruta de tapeo.
Espectacular todo, las tapas, jamón con chorreras, erizo, bacalao delicioso, los platos espectaculares, y el trato el mejor, gracias por hacernos sentirnos como en casa.gracias al chef Michel.volveremos siempre.
El bacalao es su especialidad. Y lo bordan. Lo sirven en pincho, frito, al horno con alioli y de otras maneras. Tienen también un buen surtido de tapas tradicionales y otras creaciones mas modernas. Buenos precios y además son majetes. Local muy estrecho con unas cuantas banquetas frente a la barra y al fondo un pequeño comedor con 4 o 5 mesitas. Se suele poner hasta arriba los fines de semana. En resumen, un clásico de Zaragoza desde 1929, muy recomendable para echar unas rondas de Ambar y tomar unas tajadas de bacalao.
Menú de San Valentín a 22 euros muy bien trabajado. Variedad, cantidad y calidad por encima de su precio (es mi opinión). Para tapear también está muy bien y además está situado en pleno centro de la ciudad. He ido varias veces y sin duda volveré. No dejéis de probar los erizos con un vino blanco bien fresquito. El menú de diario también está muy correcto.
Bar de excelentes tapas y raciones a buen precio, famoso desde hace decenas de años.situado muy cerca de la plaza del Pilar y calle D. Jaime. Aunque ya no fulo ellkeva ndadorla familia original, mantiene decentemente la calidad y variedad de siempre. Espectacular su JAMÓN CON CHORRERAS (huevo con jamón y queso rebozado), especialidad de la casa.
Fui a probar los famosisimos huevos con chorreras y sinceramente, me defraudó y no poco. Los he comido mucho más buenos en varios sitios de Zaragoza y alrededores y recién hechos. Además, me pareció un poco caro.
Tapas variadas y con movimiento, con lo que estan siempre recien hechas.y respecto al restaurante, comida casera y de autor ademas de sus variadas paellas.
Buena variedad de tapas y la mayoría buenas, especialmente el cuesco de cabra y el solomillo. Alguna tapa bañada en aceite es lo que no hace que sea perfecto.
Acabo de comerme un plato de patatas a la importancia con bacalao.comida de verdad por fin¡¡¡¡sabor que me ha hecho recordar la cocina de mi madre.gracias¡¡¡¡
Comida de mucha calidad y sabor, aunque los platos del menú eran de cantidad muy escasa, sales con hambre. Y el servicio extremadamente lento, casi 2h para comer, tardaban una eternidad entre cada plato. Si pusieran más cantidad y fueran más ágiles en el servicio, seria un restaurante estupendo!
Calidad media, precio no demasiado caro, algunos detalles son buenos pero algunos errores graves, el postre una estafa (no pedir pastel ruso, cantidad ínfima).
Fuimos a parar de casualidad y que acierto, nosotros fuimos a comer había un menú de la constitución que estaba buenísimo todo de primero había ensalada (riquísima), fideua, y huevos estrellados, a cual mejor, y de segundo paso y pescado muy rico también al igual que el postre y el vino de la casa, volveremos sin duda
El típico jamón con chorreras, paso a mejores épocas, ignoro si la causa era, la calidad del queso o la ausencia o escasez del mismo, pero el resultado es que cuando te lo comes, se forme un polvorón en la boca, difícil de digerir. Respecto a los erizos, únicamente sabían a cebolla, ningún sabor a erizo, si la carne del mismo no llega para hacer las dos mitades, señores hagan solo uno. (Que tienen un precio irrisorio) El intentar sacar dos, lo único que hace es q ninguna de las dos mitades sepan a nada, es preferible que suban el precio a vender esa pasta como erizo.
Fuimos hacer unos pinchos durante el pilar y la verdad que geniales! Muy ricos un poco más de simpatia por parte de los camareros de la barra no estaria mal.