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Nos casamos el 17 de junio de este año en la finca. Quedamos encantados! Miguel Ángel la decoró con muchísimo estilo y cariño. Estuvimos súper a gusto. Nos ayudó en todo momento, siempre con muy buena predisposición. Muy, muy profesional. Te da muchísima confianza que es lo que necesitas en esos momentos. César y Emer, los jardineros, encantadores y serviciales. Tienen la finca y todos sus jardines, preciosa, muy muy cuidada. Son muy amables y te ayudan siempre en todo lo que necesitas. Muchas gracias por todo!
Un buen lugar para celebraciones, íntimo, apartado del centro de la ciudad y con salida inmediata a cualquier dirección por su cercanía a la autopista y el cinturón
De todas las fincas que se dedican a la restauración está en un término medio -bajo, este tipo de instalaciones están enfocadas a bodas, banquetes, eventos y demás, comida normalita y la atención del personal simplemente correcta.
Nos casamos este finde pasado en la finca, gracias a Miguel Angel, Cesar y compañía por todo el trabajo, haciendo que la finca estuviera espectacular encargándose de nosotros facilitándonos todo lo que les pedíamos. Gracias por hacer una boda de 10.
Del sitio nada que reseñar, es bonito, pero que no os engañen en tema de decoración ni de espacio, por que no ponen lo que le pides y del espacio para 200 están las mesas pegadas unas a otras sin espacio y si os dejais algo x allí cuidadito, por que desaparece y ni te dan solución, ni por supuesto te lo devuelven
Excelente sitio para celebraciones, lo mejor su personal un doce, ya que el entorno es de diez, todo amabilidad, educacion y un servicio exquisito. Nos atendio una camarera la mas de simpatica, muchas gracias por hacernos pasar un dia tan agradable. Y gracias a los novios por elegir ese maravilloso sitio, imaginaros que despues de la celebracion de la boda, comenzo a llover y nos refugiamos en la carpa, y aun asi fue un dia inolvidable, el sitio especial y el acontecimiento extraordinario. Felicidades sobrinos que seais muy felices.