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Asistí a un retiro de Mindfulness, y estoy super contenta de haber conocido a Anna. Tiene una voz que transmite, es una gran profesional y persona. Lo hace todo con mucho amor y cariño.
Un gran descubrimiento de sitio! Anna es un amor, la sala amplia, siempre limpia y huele genial, lo que ayuda mucho a crear un ambiente tranquilo y acogedor para las clases. El material es de calidad y está muy bien cuidado. Las clases son amenas y se nota que están preparadas a conciencia. Además, la opción de poder seguirlas online viene genial cuando no puedes asisitir a alguna. Gracias:)
Asisto a las clases de mindfulness de Anna desde hace unos meses. Es una magnífica profesional, con amplia experiencia y una calidad humana muy poco habitual. Las instalaciones y su entorno también son notables. Si vives en el área de Zaragoza y te interesa el mindfulness, no lo dudes, éste es tu lugar.
Estoy encantada de asistir a las clases que imparte Anna! Gran profesional, atenta, empática y sobre todo la implicación que tiene en intentar ayudar a solucionar los problemas de las personas. Totalmente recomendable.
Anna es de las mejores profesionales que he conocido, y las clases ayudan muchísimo a desestresarse, además de aprender técnicas para aplicarlas cuando sea necesario. Nunca me cansaré de recomendarlo:)
Anna es una excelente profesional en yoga y mindfulness. Tiene muchas cualidades que hacen que las clases sean un auténtico placer para el cuerpo y la mente. Además ofrece una gran posibilidad de horarios para adaptarse a tus necesidades.
Llevo desde que abrió asistiendo al centro de yoga y a las clases con Ana. Las clases son una maravilla y el espacio super acogedor y bonito. Siempre te sientes en casa cuando estas allí. Muchas gracias! Mi sesión de yoga es mi momento cada semana.
He estado practicando yoga con Anna durante más de medio año, para superar una situación personal complicada, y tengo claro que voy a seguir, convirtiéndolo en una actividad habitual en mi vida, no solo por lo bien que me sienta su práctica, sino también por haber encontrado a Anna, la profesora adecuada a mis necesidades. Estoy muy contento con las clases de yoga y las clases de yoga más mindfulness, donde mezcla un yoga suave más la práctica de mindfulness.
Anna es una profesora dedicada y comprensiva, y siempre se adapta a las necesidades particulares de cada alumno, sin superar sus límites y animando a mejorar continuamente. Las clases son muy variadas y siempre hay algo nuevo que aprender. El ambiente del centro es tranquilo y acogedor.
Una de las cosas que más me gusta de Anna es que es una profesora paciente y atenta a los detalles y condiciones particulares de sus alumnos. Siempre se toma el tiempo de explicar los movimientos y de corregir las posturas. Esto es muy importante para mí, ya que soy una persona que se lesiona fácilmente.
Anna también es una profesional excepcional, y siempre se adapta a las necesidades de sus alumnos. Por ejemplo, si tengo un dolor de espalda, ella me da una variación del movimiento que evite el daño o una molestia excesiva.
Además, como persona es comprensiva y atenta, siempre tiene una palabra amable, y se preocupa por tus situaciones personales, poniendo en práctica sus enseñanzas de escucha activa, esta actitud de cercanía también es importante en un profesor en el que buscas orientación, a través de sus conocimientos, para afrontar los problemas que te plantea la vida.
Las clases son muy variadas. Cada semana las centra en una serie de posturas y orientaciones de mindfulness. Hay clases de hatha yoga, yoga suave más mindfulness, clases de mindfulness, vinyasa yoga, yoga con bebés, yoga en familia, yoga para mayores, desde principiantes hasta avanzados.
Anna siempre está ofreciendo nuevas actividades basadas en sus conocimientos, y también en sus contactos, proponiendo extras de colaboradores que siempre enriquecen el conocimiento de la actividad y da interesantes alternativas a las clases habituales, facilitando descubrir nuevas experiencias relacionadas con el yoga y el mindfulness.
El ambiente del centro de yoga es muy tranquilo y acogedor. Las clases se dan en una sala grande y luminosa, con mucha luz natural. La decoración es sencilla y minimalista, lo que ayuda a crear una atmósfera de paz y tranquilidad.
En general, estoy muy contento con mi experiencia en el Centro de Yoga y mindfulness Zaragoza y con Anna como profesora. Recomiendo este centro, y a Anna, a cualquiera que quiera aprender yoga o mejorar su práctica.
Ana es una gran profesional, muy empática, amable y atenta. Sus clases son muy interesantes y prácticas, siempre sales con herramientas nuevas y ganas de volver a la siguiente. Además, tanto ella como el espacio invitan a relajarte y dejar atrás el estrés que llevamos con la vorágine del día a día. ¡Te la recomiendo 100 %!
El local es muy acogedor, silencioso y limpio. Los grupos son reducidos y Anna siempre está pendiente de los alumnos, es muy buena profesora. Flexibilidad en los horarios.