Arcea Gran Hotel Pelayo

El hotel mejor ubicado en Covadonga, pegado a la Ermita, buenas instalaciones, está reformado, por lo que muy bien.

El hotel en si tuvo que ser impresionante en su tiempo. Se ha quedado un poco en el pasado. La habitación no estaba muy limpia, el mando a distancia lleno de polvo, la lamparita toda sucia, le faltaban arreglos en algunos sitios
Personal de recepción desagradables tanto el de la noche como la Sra de la mañana. Me molestaron y tuve que bajar a mover el coche cuando no tenía que hacerlo, solo por el echo de no moverse el Sr de recepción y ver que estaba correcto. En fin, esperaba más. No volveré

La atención al cliente es excelente, comenzando por Cristina de la recepción y un señor que estuvo con ella en el día de nuestra llegada (creo que era director). No hay que olvidar a los camareros del restaurante: un 10 en toda regla.
El tema de los servicios:
- el desayuno debería mejorar, es escaso y poco atractivo (en los días siguiente preferimos salir fuera)
- las cenas: hay menús con un precio razonable y es variado y rico
- se puede bajar con los perros al comedor, se mantienen distancias entre las mesas y el espacio es amplio.
- habitaciones: 105 en mi caso. Necesita un reforma y limpieza a fondo.
Pongo un 4 ya que la gente nos hizo sentir en casa en todo momento, lo cual ha causado una buena experiencia en general.

Muy caro para la comida que sirven. Algunos alérgenos mal puestos, nos cobraron el pan sin consumirlo, los baños no tenían jabón y el cachopo estaba requemado. Las vistas espectaculares, pero nada más. Puedes comer en cualquier lado mucho mejor y más barato.

Lamento haber elegido este hotel.no vale la pena el precio. Lo único positivo es la ubicación conveniente y que admite mascotas. Las habitaciones están anticuadas y necesitarían algunas reformas. Parece que las paredes están hechas de papel ya que podíamos escuchar todo desde la habitación de al lado.no recomiendo

Un hotel muy bien preparado, con buffet en el desayuno y restaurante de carta para comer y cenar. Camas muy cómodas, habitaciones con moqueta, baño con ducha hidromasaje. Parece un palacio en medio de la montaña. Muy recomendable. Tiene parking propio. Y las mejores vistas

Reservamos a través de Booking. La habitación era tranquila (ligero ruido de máquina pero no por la noche) y muy limpia. El menú de la cena es de 22 euros, entrante plato principal postre agua y vino tan inmejorable y sobre todo muy bueno para los que quieran probar la cocina asturiana. El personal no es necesariamente amable, pero logramos hacernos entender. La ubicación es ideal para caminar y luego tomar el autobús a los lagos. Tenga en cuenta que no hay tienda de conveniencia en el pueblo.

El hotel tiene una ubicación excelente los trabajadores muy bien.las habitaciones están muy bien.ahora el desayuno buffet más pobre que hemos ido. 12 euros y no hay casi nada.el resto muy bien de verdad

Excelente ubicación, habitaciones pequeñas como viajes en grupo. Por lo tanto también un desayuno miserable. En la mesa había rebanadas de queso, jamón y mermelada. 1 rollo por persona. NO fruta o tomate pp. Nunca nada, incluso cuando se le preguntó. Los huéspedes normales tenían un desayuno buffet

Lo unico bueno es que está al lado de Covadonga y del punto de partida de los lagos.

El desayuno es muy justo y simple para un hotel que tiene 4 estrellas.

Las habitaciones van necesitando ya una renovación urgente, ya que es una vuelta a los años 90. No estan insonorizadas, asi que oyes todo el ruido de los que están en la habitación contigua a la tuya, terrible.

Solo son medio decentes, las camas duras y no muy cómoda para dormir.

Uno de los mejores hoteles en los que he estado.
El servicio 10 puntos.
El menú del restaurante incluye una botella de vino.el camarero un lujo.
Voy a volver.

La ubicación del hotel inmejorable ya que está al lado del santuario de Covadonga. En cuanto al hotel, las habitaciones grandes y espaciosas, lo peor la moqueta para las personas alérgicas, aunque se esfuercen en la limpieza, hay zonas que se ven bastante antiguas y necesitan una reforma. No nos gusto nada la atención demasiado fría y sin ganas. En mi opinión al hotel le sobra una estrella.

Fue una sorpresa muy positiva, encontrar en el Gran Hotel Pelayo un menú del día a un precio muy bueno (22€/PAX) para la calidad de los platos, destacando los postres, que estaban buenísimos. Fuimos un día de diario y el parking tenía sitio de sobra pero sospecho que los fines de semana habrá problemas de aparcamiento y posiblemente no tengan menú del día. Recomiendo llamar primero.

El Hotel para mí de 10.
Se respira una paz qué no la encuentras en otro lugar igual.

Hotel muy bonito, en la mejor ubicación, llegamos de noche y fuimos a ver los alrededores andando y es todo precioso!
La habitación limpia y elegante, y con unas vistas preciosas!
La cafetería con un ventanal hacia la basílica, me encantó desayunar así
Un acierto seguro!

La atención, información y recomendaciones de la recepcionista perfecta.
Habitación preciosa.
Nos ha encantado

El trato del personal me encantó desde recepción hasta camareros en fin todo@s, Todo genial y volveré algún día.

Hemos comido en el Restaurante.
Menú del día 20€; la comida extraordinaria, la ubicación perfecta y en el salón no falta detalle.
Un 10 a María por el trato recibido, amabilidad y eficiencia.todo super

No te informar por teléfono en la reserva del suplemento de las mascotas. 15€/dia. Un atraco a mano armada para animales pequeños

Legamos al restaurante al mediodía, camarero mal educado, supongo que es encargado del comedor. Con la buena visión que llevo de la mabilidad de Asturias este empleado me dejó decepcionada, debería estar en un trabajo que no esté cara al público porque rompe toda la estética de ese hotel e imagino de cualquier restaurante.este hotel está situado en una zona privilegiada pero jamás la recomendaría

Muy buena ubicación y hotel señorial y destacar la amabilidad del cocinero que somos vegetarianos y fue muy amable con nosotros

El lugar es excelente; el servicio es insuficiente.
Pido un plato combinado y una bebida. Espero 25 minutos (de reloj). Se acerca la camarera para anunciarme que tardará "un ratín". Pregunto cuánto es eso: 20 minutos más. Si el problema es de personal, quizá podría haberlo avisado de primeras. Me voy sin comer.

Hotel antiguo a los pies del Santuario de Covadonga, con increíbles vistas a los Picos de Europa.
Posibilidad de visitar los Lagos de Covadonga.
Habitaciones amplias, buen desayuno, personal amable.

Excelente localização, com vista para o Santuário e para a Gruta de Covadonga.
Hotel com bom ambiente. Os funcionários foram profissionais. Para níveis de exigência elevados, há alguns pontos onde há espaço para melhoramentos: seria possível limpar melhor o pó (e teias de aranha) ; o pequeno-almoço poderia ser mais variado e com oferta constante; o restaurante poderia ter uma oferta mais variada ; poderiam prestar mais atenção à temperatura em que servem todos os componentes de um prato.
Na globalidade, foi uma experiência positiva e a repetir.

El hotel está en un emplazamiento sin igual. Estás en el medio y medio de la basílica y la cueva de covadonga. Muy recomendable si se quieren visitar lagos y basílica. Es de estilo antiguo, pero tiene todas las comodidades. El aparcamiento in situ es escasísimo, y los sitios bastante pequeños, pero al lado del museo (que está a escasos 100m) hay otro parking bastante grande y gratuito que puede usarse si el del hotel está lleno al llegar a última jora. El personal es super amable, mención especial al chico que se quedaba en recepción por la noche. La única pega que le pondría es al desayuno, que aunque estaba bien, la variedad era normal y tampoco me pareció que hubiera nada con un sabor destacable; es decir, no me pareció que estuviera a la altura de todo lo demás, que era excelente. Volvería sin dudarlo, pero no repetiría el buffet

It was a privilege to stay in this fabulously built historical hotel at the the entrance to Picos de Europa. We liken it to the hotel at Macchu Picchu, but for 1/10th the price. We had a Mountain View in a room that had a gorgeous granite bathroom and 2 European size double beds (each 30 % larger than a twin). The decor is classic and complements the structure. The front desk, food and bar service- all delightful delightful. But most of all, being able enter the road to Los Lagos at dawn in our own car (taxis and tours only after 8 am) was extraordinary in that it allowed us to take our time enjoying the outstanding views. Happy to be here from Austin, Texas!

Desastroso! No tengo otras palabras para definir mi estancia en el restaurante del Hotel Pelayo. Servicio lentisimo tardamos 3 horas en salir del restaurante además de que la comida estaba mala y fría. Nada recomendado, le sacudirán la cartera en vano.

Atención excelente tanto en recepción como en lo que compete a hostelería, tanto prestación de tiempo al cliente como a calidad de los platos y su presentación, así como a su recomendación acertada.
A nivel personal recomiendo merluza a la sidra, ensalada de salmón y postre de arroz con leche y helado de manzana (unicamente por falta de tiempo para degustar). Insistiendo Excelente atención e impresionantes vistas. Personalmente no puedo opinar sobre alojamiento pero merece la pena comer o cenar.

Hemos estado alojados 1 semana, ubicado en un sitio privilegiado al lado del santuario, pero un poco alejado de la civilización, habitaciones limpias y ventanas con buen climalit, se agradece porque las campanas tocan todo el día, no es muy grande, habitaciones cómodas, camarer@s amables, comida casera muy buena, por poner un "pero"; algo repetitivo el menú para desayunar y cenar todos los dias, en general recomendable.

El restaurante de 10 con vistas a la Basílica. Organizamos una comida en familia. Destacar el excelente servicio, la comida riquísima con un menú de 19 € y opciones a medida para los niños. Lugar tranquilo, con los protocolos Covid muy bien implantados. Repetiremos

Excelente ambiente rural y personal muy amable. Las instalaciones del hotel y sus accesos de 10

Hotel majestuoso y en una localización perfecta para acercarse a los Lagos de Covadonga y disfrutar del Santuario ahí mismo.
Servicio muy bueno y atento con todo.
Nuestra habitación, grande y espaciosa, tenía la puerta y los zócalos como si la hubieran tirado abajo, estaba todo roto y costaba cerrarla. Aún así, cama y almohadas muy cómodas y el baño con todo lo indispensable. La reserva la hicimos con desayuno el cual era buffet muy variado y muy rico.
Reservamos para cenar en el restaurante de hotel y ya aquí, otro cantar, de ahí las estrellas. El pulpo estaba duro.
Cogiendo el menú de cena, el revuelto de setas estaba bastante malo, soso, sin sabor y aguado. Casi ni lo comí, y muy pocas veces (por no decir ninguna) he dejado en un restaurante tanto en el plato. El segundo no mejoró, ya que el pescado (creo que era lubina) estaba seco. El postre arregló un poco la cosa, pero no fue su día.

Para ser un hotel de 4 estrellas me ha parecido que le faltaban bastantes detalles. Comenzamos mal porque habíamos reservado una habitación con cama de matrimonio y aunque habia pocos clientes, nos dijeron que no había ninguna, el baño grande no tenía calefacción y estabamos a 4°. Nos dan un calefactor, pero no hay enchufe en dicho baño. En general, el personal muy atento, excepto la persona que nos tenía que solucionar lo de la habitación que no le vi con mucho interés en hacerlo.

Espectacular lugar para descansar y pasar allí unos días el aparcamiento es lo peor no hay mucho sitio hay que tener suerte pero por lo demás genial, tiene vistas a la sierra y a la iglesia es precioso

Lugar agradable, buena calidad de producto, elaboración algo simple. Buena atención. Unas vistas inmejorables desde el restaurante. Equivalente a otras alternativas de la zona.

Una auténtica vergüenza. La camarera de la cafetería estresada hasta límites insospechados, dando golpes en las mesas, patadas en la puerta, tiró un bocadillo por los suelos, se puso a llorar delante de los clientes y trato boberbio. Solo bocadillo de tortilla frio, no quiso hacer ni siquiera una tostada de pan con aceite. Esta chica deberia estar limpiando habitaciones mejor, que atendiendo al público. Bochornoso. Espectáculo digno de un programa de Alberto chicote.

Nos hemos hospedado en el hotel por una noche y hemos cenado en el restaurante de este. La recepción y servicio de diez, el señor de recepción fue muy amable al igual que las personas del restaurant. La habitación muy cómoda y limpia. La cena me gustaría sugerir si pueden añadir opciones veganas ya que no hay ninguna de momento y a lo que pedí le tuve que retirar el jamón. El desayuno completo y la atención, nuevamente, muy buena.

Hemos estado dos días y nos ha gustado mucho. Esta en un rincón muy especial aunque si quieres hacer turismo queda todo un poco retirado

Hay que decir que la ubicación es inmejorable sin ninguna duda.
Cenamos y desayunamos muy bien.
Me encantó que acogieron a mi mascota en todo momento, para mí es otro miembro más de la casa.
Pero sin duda lo mejor de todo es su personal.
Por añadir algo, diré que estaba limpio, pero la moqueta no me parece lo más higiénico, ya digo que es subjetivo totalmente.

Hay aspectos que no responden a un hotel de 4 estrellas. Sin calefacción en el baño, la habitación no se correspondía a la reservada,

Este hotel me dejó enamorada para disfrutar mi luna de miel, excelente atención, rica comida muy variada, una recepcionista súper especial

Madera para la decoración y oso de bronce en la puerta. Camareros ataviados según los cánones borbónicos de comienzos del XX. Se come bien, se duerme mejor al arrullo de la Virgen.

Lo mejor: ubicación
Lo peor:
Señal del wifi tan débil que no llega al segundo piso.
Parking pequeño compartido entre los clientes del hotel y del restaurante

Es un hotel antiguo pero el trato muy bueno las habitaciones nos dieron una suite compartida y nos encantó el desayuno muy bien las habitaciones impecables un sitio que repetiremos

Ubicación inmejorable, atención muy buena (una chica muy maja por la tarde-noche del día 19/10/21) y comida del restaurante bastante buena, abundante y muy bien de precio. El desayuno hay mucha gente que se queja, para lo que yo desayuno cuando estoy de vacaciones tenía suficiente, zumo, huevos, beicon, tortilla, pan, café, tartas.más que suficiente aunque no esperes un buffet de un hotel de una ciudad céntrica.
El hotel bueno, es un sitio más bien de batalla y no esperes gran cosa.

Hotel de 4 estrellas, penoso y sucio, la recepcionista muy poco simpática en el check-in, para el checkout no había nadie y al final nos lo tuvo que hacer el de mantenimiento. La habitación más vieja que mi tatarabuela. Unos de los cajones estaban pegados por qué alguien lo había manchado con algo pegajoso y no lo había limpiado nadie. Solo dejar las gafas en la mesilla se llenaron de polvo, polvo y más polvo everywhere! El suelo cruje la hostia, hace mucho ruido y es molesto, sobre todo para los de debajo, ya que en la habitación de encima nuestro tenían el mismo problema y lo oíamos crugir por la noche. Lo único bueno que tiene es que aceptan mascotas. Lo peor es que no es un hotel decente por el precio que tiene, con telarañas y humedades.

He solicitado una reserva hoy y la han denegado, el motivo? No han querido decirme el cual, la disponibilidad de días si estaba bien ya que los días seleccionados están disponibles, en fin ellos son los que pierden muy mal trato

El hotel pelayo es genial para venir a visitar la virgen ya que esta a 50 metros de la cueva y a 11 km de los lagos.es un hotel que nos a encantado el personal tanto recepcionista como personal de restaurante buena comida habitaciones muy limpias y que decir más que volveremos y gracias por todo a todo el personal. LO RECOMIENDO A TODOS LOS QUE QUIERAN VENIR A VISITAR COVADONGA.

Hotel de 4 estrellas? Me parece que nos tomaron el pelo. Reservamos una habitación superior, ya que era la única que admitía mascota, pues el hecho es que al llegar y aparcar era una odisea, ya que está situado entre la catedral y la entrada a los lagos de Covadonga, después de 30 minutos esperando aparcar, entramos al hotel y la recepción del mismo fue muy seria y seca, nos pareció que llegábamos en mal momento. Entrando a la habitación lo primero que nos llamó la atención era la antigüedad del edificio y su diseño interior de la época, sobre todo los suelos de madera que a cada paso que dabamos crujían y ya vimos que sería un problema, ya que los huéspedes de encima de la habitación también los tenían y crujían como si estuvieran en la habitación. El colchón era como dormir encima de una tabla de madera, Después vimos varios fallos que no solventaron a lo largo de los 6 días que estuvimos y las reiteradas quejas, la caja fuerte estaba rota y no podían repararla, tenían que sustituirla y por el momento era inviable. Las luces no funcionaban bien ya que las lámparas de las mesitas no funcionaban individualmente, si encendidas una se encendían todas, había mucho polvo en los cuadros, humedades en los marcos de las puertas y techos debido a una gotera que caía del cuarto de baño de la habitación situada encima de nosotros, el llamar a recepción era otra odisea, nunca contestaban a la primera y muchas veces tenía que bajar a quejarme de los ruidos de las fiestas de los huéspedes, el frío de las habitaciones era insoportable, en pleno verano tapados con mantas.podría continuar contando las mil y una pero tan sólo os diré que si buscáis un hotel bien situado cerca de la catedral este es el vuestro, ahora bien si buscáis un hotel dónde descansar, que seáis bien atendidos y encontréis las comodidades de un verdadero hotel de 4 estrellas os aconsejo que no paséis por este, ya que por 115e la noche sin desayuno ni nada, creo que hay muchos mejores por la zona.

Habitación amplia, excelente precio y justo al lado de la Basílica y el santuario de Covadonga. La decoración del hotel es bonita y parece un castillo. La atención excelente. Repetiría estancia en este hotel.

Espectacular Hotel, ubicado en un paraje no menos espectacular.zEl personal muy profesional y atento.
Ummm un café 1,50 €.
En mi opinión un buen hotel.

La comida estaba buena. Tomamos menu asturiano. Pero la comida tardó bastante en llegar. Y no eramos muchas mesas para dos camareros.

El Arcea Gran Hotel Pelayo se encuentra ubicado en el corazón de los Picos de Europa, entre la Cueva de la Santina y la Basílica de Covadonga. Podrá recorrer las más impresionantes rutas de montaña, visitar los famosos Lagos de Covadonga.

Hotel con una situación privilegiada para ver el Santuario y su entorno a 1 minuto andando.pasamos una noche.la habitación que nos dieron (la 102) presentaba descorches fuertes en el techo y ladrillos rotos en el baño.para ser un hotel de 4 * parece poco comprensible.
Respecto al parking es pequeño unas 20 plazas situadas en un lateral del hotel.

Si quieres calma y quieres despertarte con unas vistas fantásticas de la Basílica de Covadonga no dudeis este es vuestro hotel, hotel centenario reformado hace poco con mucho gusto, muy elegante

Ubicación inmejorable, desayuno variado y buen servicio. Eso sí, los colchones y las almohadas para cambiarlos!

Our room with a mirador couldn’t have been better. The view of the stream coming down the mountain and of the church was remarkable. Reception staff were attentive and friendly. The restaurant is a little old fashioned. Breakfast coffee was substandard (our only complaint).

Ubicado en marco incomparable y con un menú muy rico y nada caro. Se nota que fue un local de renombre, aunque, en la actualidad, vive de rentas ya que el restaurante necesitaría un cambio de imagen. No tuvimos el gusto de disfrutar del hotel, pero el restaurante, pese a que la comida está buena, debería reformarse y actualizarse.

Hace tiempo era un lugar ideal para tomar un caldito y entrar en calor en invierno, pero la calidad el pasado domingo ha sido pésima, agua con un poquito de color y además frío.
Es mejor dar un paseo e ir a tomarlo en la cafetería la estación que está en el aparcamiento de entrada a Covadonga

Buen servicio en cafetería limpieza y buenos precios, y de los pocos sitios q tienen leche sin lactosa

Muy buen emplazamiento, aunque creo que las instalaciones están algo anticuadas. El personal es muy atento y el precio esta bien.

Cafetería acogedora para clientes del hotel y externos. Tiene variedad de bocadillos pequeños y dulces asturianos

Hotel tranquilo, renovado y personal atento y educado. Ver 2 noches para visitar los lagos y el personal nos indicó qué más cosas se pueden visitar y las posibles rutas por los lagos

Muy tranquilo. El personal atento y amable. La habitación cómoda. El desayuno está bien, lo malo, tener que coger el coche para todo. El entorno increible

Restaurante perfecto, para un lugar perfecto, la cocina inolvidable el pan es pan de los de antes y el personal muy atento y simpatico