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Comida sobresaliente en Casa Belarmino en Vioño, zona más que conocida por nosotros. Restaurante muy bien puesto y servido donde degustamos un trío de croquetas (jamón, compango y callos) un tomate aliñado, un espectacular rollo de bonito (como hacía muchos años que no probaba) arroz con pitu de caleya y un par de postres.
Muy muy recomendable y obligatoria una segunda visita.
Buenas instalaciones. Comida muy rica. Buena atención de las camareras. Lo que no estuvo en consonancia era el alboroto que había en el comedor, muchos decibelios para poder estar cómodos.
Comida excelente. Las croquetas son una delicia y el arroz con pitu increíble. El personal muy amable y profesional. Para volver seguro! Recomendable reservar con tiempo.
Espectacular! El trato, el servicio, los platos… todo cinco estrellas. Desde las croquetas al postre. Sin dudar para una primera visita “Arroz con Pitu”…
Muy buena experiencia, imprescindible pedir surtido de croquetas y arroz pitu caleya, muy recomendable, precio 4 personas alrededor 120 euros. Servicio amable y profesional.
Un sitio acogedor, el servicio muy profesional y amable y la comida riquísima. Un imprescindible su homenaje al mar y el rollo de bonito. Volveremos sin duda.
Pote y Lubina la cocina impecable muy rico todo Acompañado de buen vino Tiene dos cartas muy buenas de vinos nacionales e internacionales Servicio en excelente De visita obligada
Excelente trato en un local maravilloso, en pleno pueblo de Mazaneda, frente a la iglesia de San Jorge, de estilo prerrománico. Ramona (cocina), Juan Luis (maitre) y Jenny (sala) son los mentores y ejecutores de este local tradicional -data de1930- y moderno, en su concepto, que fusiona la cocina asturiana de autor con la calidad máxima de producto. Podéis probar sus exquisitos callos, dignos de la mejor guisandera, solomillo de máxima calidad, o en mi caso, un delicioso Steak tartar con una mantequilla muy sabrosa. Los vinos y champagnes son otro nivel. Dignos de cualquier restaurante europeo de gran calidad. Puedes encontrar desde un Pingus 2003, un Imperial, hasta Champagnes similares a Krug, Bollinger y a precios razonables para el standard de calidad que representan. Los postres, sobre todo, el tocinillo de cielo, el arroz con leche o los átomos de chocolate son dignos de encomio. Para repetir.
Restaurante que me sorprendió para bien, buen servicio, entradas de croquetas muy buenas y el arroz con pitu muy bueno, postres también buenos, un saludo
Toda la comida buenísima y la atención estupenda. Casi toda la carta es para celíacos. Recomiendo los rollos de bonito, los callos, las croquetas de jamón.
La atención del personal es excelente, sobre todo del dueño del Restaurante que te aconseja muy bien. Comimos los entrantes que nos aconsejó y un Pitó con arroz maravilloso.
Entre Avilés y Luanco está este antiguo bar-tienda hoy restaurante. Esa terraza-antojana cubierta, luminosa, llena de detalles es muy disfrutable. Mantelería bordada, carta breve, pero más que suficiente para poder estar tan cuidada como está. Llevado por la familia, muy atenta, profesional y manteniendo un clasicismo auténtico y limpio, es un buen lugar para disfrutar.
La excelencia solo está presente en sitios donde la profesionalidad se lleva a la máxima expresión. Juan Luis es un fuera de serie en la sala y Ramona reina en las cocinas. El resto del equipo está a su nivel. El arroz con pitu es sublime hasta para los valencianos. Una maravillosa experiencia comer allí.
Muy buena experiencia en Casa Belarmino. Cocina tradicional con los mejores productos (amigos de Joselito). Muy buen trato de Juan Luis y excelentes recomendaciones, tanto de platos como de cantidades. Entrantes individuales y un arroz con Pitu muy sabroso y abundante. Mención especial también al rollo de bonito! Lo único, en mi opinión, que las raciones de algunos entrantes son algo escasas para el precio que tienen. Un placer, volveremos seguro!
Un restaurante extraordinario, una comida exquisita, un precio asequible para la calidad que tienen en sus platos. Lo recomiendo sin dudar. Eso sí, es tal la afluencia de clientes, que hay que reservar con tiempo. ¡¡ Pero merece la pena,
Una pasada el sitio. El servicio muy bueno y amable. La comida riquísimo, el arroz con pitu un 10. El café de puchero muy bueno para acompañar los postres. Para repetir seguro.
Fantástico. Local maravilloso, atención exquisita, una carta de siempre con respeto por el producto. Personalmente, unos callos perfectos con unos "patatones" impresionantes por sí mismos o acompañándolos; unas croquetas deliciosas de compango, pura delicia; y un souflé de chocolate con el que he soñado éstas noches. Acompañando, un godello delicioso, fresco, equilibrado. Obligado conocer este lugar.
Hoy repetimos visita a Casa Belarmino. Es un sitio con mucho encanto, a 15 min.en coche desde Avilés. Pedimos pastel de puerros, dos croquetas por persona (una de jamón y otra de compango), decir que nos gustaron tanto las de jamón como las de compango, el pastel de puerros muy rico. También pedimos steak tartar, muy rico y muy intenso de sabor. Y dos raciones de arroz con pitu caleya (pollo de corral), que estaba realmente delicioso y en su punto (las raciones de arroz son abundantes, pedimos 2 raciones para tres personas. De postre leche presa (parecido al requesón) y borrachinos. Un sitio muy recomendable y la atención de Juan Luis y las camareras muy buena. Volveremos sin dudarlo.
Siempre que vamos a un sitio nos gusta probar los restaurantes de la zona, nos dejamos guiar por varias opiniones en internet y redes sociales y fue todo un acierto. Un día antes estuvimos en casa Gerardo y son comidas distintas pero no tienen nada que envidiarse entre sí. Juan Luis y Ramona nos atendieron como a sus mejores clientes y nos hicieron sentir como si fuéramos amigos de toda la vida, nos quedamos con ganas de comer el arroz con pitu, pero al ser solo 2 nos impediría probar más variedad de platos. Los platos tradicionales con sabores de toda la vida pero con nuevas técnicas y sabores. Se nota que cuidan su materia prima y utilizan productos de cercanía. Si tenéis la oportunidad, no dejéis de reservar, os vais a llevar un magnífico recuerdo. Si tuviera que recomendar algún plato aunque es francamente difícil elegir entre tanta delicia, serían los callos, las croquetas y el rollo de bonito. Nosotros, volveremos.
Restaurante y hotel rural en el concejo de Gozon. Parking propio. Antiguo bar-tienda, reconvertido en restaurante de cocina asturiana con toques modernos. Buena atención.
Con buen tiempo el jardin terraza es realmente guapo para tomar un mojito, una cerveza o algo asi.y ademas tienen muy original el entorno, con puest tambuen para burguer, perrito y mas.
Ko me gustó estar comiendo y la puerta abtiendose continuamente con aquella corriente. No me gustó que viniera alguien a leernos la carta como si fueramos tontas y sobre todo no me gustó que un arroz tardara casi una hora. No puede haber una hora entre plato y plato. Y de los precios no hablo ni del careto de la camarera. Y tanto uniforme para un pueblo? Quedarian mejor vestidos de aldeanos y con comida asturiana.
Todo buenísimo y el trato de diez. Cierto es que no te puedes permitir ir de continuo si tú presupuesto es ajustado pero para un homenaje merece mucho la pena.
Un lugar estupendo para comer, instalaciones cuidadas y de buen gusto, familiar y muy acogedor. La comida inmejorable, tanto la materia prima de máxima calidad como el buen hacer. Sin duda, un acierto seguro para disfrutar de una excelente comida.
El lugar es bonito y la comida está muy buena, pero el servicio es muy lento, entre un plato y otro se demora bastante, sirvieron a los niños después que a los adultos, trajeron el café y se les olvidó la leche.ciertas cosas que hacen que no le de 5 estrellas.
Son un encanto! Sentirse como en casa, perderse en la cremosidad de las croquetas de compango y jamón, alucinar con el rollo de bonito y cerrar con el clásico y sabroso arroz con pitu. Fue un acierto comer allí y tomar el café en la magnífica terraza que han montado en la parte de atrás. Casa Belarmino está ya apuntado como habitual para las visitas a Asturias. Qué gozada!
Un restaurante donde se unen la buena gastronomía con la historia familiar. Hacia tiempo que no comíamos tan bien. Nos tocó una comida gracias a Repsol y teníamos varios sitios a escoger, me siento feliz de haber elegido este puesto que hemos disfrutado de varios platos y todo ha sido excepcional. Volveremos a repetir. Gracias por convertir esos alimentos en un prodigio para el paladar.
Tiene una terraza en la parte de atrás ideal para tomarse unas cervezas. En la terraza preparan comida aunque no la provamos. Será para otra ocasión. El restaurante también será para la siguiente.
Excelente comida con un trato muy profesional y amable. Un sitio que hay que visitar especialmente por sus arroces y sus pescados (con salsa de hortalizas y sidra).
Espectacular, el arroz con pollo de caleya es espectacular las sardinas marinadas buenísimas en un sitio acogedor y con un servicio diez.para repetir muchas veces.
Magnifico lugar para disfrutar de una comida tradicional asturiana. El rollo de bonito espectacular, las croquetas buenisimas y el hojaldre con compota de manzana sobresaliente. De no perderse la experiencia.
Pocas dudas hay que tener para poder ir a Casa Belarmino si tienes la suerte que alguien te lo haya descubierto.
Restaurante de altos vuelos que combina las recetas tradicional Asturiana, con unos ingredientes de una calidad extrema, una bodega con un sin fin de referencias y un servicio impecable.
En cuanto a los platos probados, un pastel de puerros de llorar, degustación de croquetas en la que la croqueta de compango es insuperable y los dos reyes de la carga:
No hay palabras para describir su rollo de bonito, tras explicarle a mi padre que era mejor que el de la abuela, dijo que no era posible, y al llevarle su cara era la mejor expresión de lo que se puede decir del rollo de bonito de Casa Belarmino.
Y el otro plato estrella.el arroz con pitu, plato tradicional asturiano, muy difícilmente te puedes comer uno con pitu de verdad verdad y este, esta de llorar.
Lugar absolutamente recomendable. Calidad y trato excelente. Comida riquísima, muy bien cocinada. Presentación muy cuidada. El rollo de bonito es delicioso y las croquetas de jamón riquísima. El arroz con pitu muy bueno y el helado de compota de manzana es brutal de rico. Volveremos porque queremos probarlo todo. Gracias a Ramona y a Juan Luis, cocinera y jefe de sala estupendos además de dueños del restaurante.
Me encanto.muy.buena comida.buen servicio.y trato admirable. Para repetir mas veces sin duda.gracias por todo.a Ramona y a Juan.sois Mundiales.merece la pena visitar. Casa Belarmino.en Mamzaneda. Gozon. Luanco.
Cuarta vez y siempre igual, satisfaccion absoluta por la calidad de la comida y la excelente atencion del personal sala, mencion especial para Luis, con quien conversamos animadamente un buen rato. De 11, no cambiéis ni un ápice
Excelente trato, una atención más que exquisita de Juan Luis, la carta súper bien explicada por Juan Luis y de los fogones de Ramona salieron unos platos increíbles Muy recomendable
Ha sido la primera vez, y estoy seguro que volveré. Excelente trato y servicio. La comida de 10. El pastel de puerros muy suave, riquísimo. Las croquetas también muy buenas, pero el arroz con pitu, el mejor que haya comido nunca. Con dos raciones comen 3 y hasta 4 personas. Si te sobra te lo dan para llevar. Todos los platos servidos sin demora y eso que el postre (hojaldre con compota de manzana) lo hacen en el momento. Totalmente recomendable.
Recomendable para paladares finos y románticos. Juan Luis y Ramona, aventureros valientes con coraje y mucho gusto. Un viaje delicioso través de su carta presentada divinamente por Juan Luis que Ramona prepara desde sus fogones.
Referente de la gastronomia de Asturias Cocina casera y trato muy cercano Producto de calidad y muy bien tratado, completisima carta de vinos. Enhorabuena!
Hoy hemos tenido el placer de viajar en el tiempo por un ratito. Volver a sentir en el paladar esos sabores auténticos, los de la cocina de nuestros abuelos, curados hasta el mínimo detalle y con la tradición que representa a esta casa. Croquetas caseras de compango, bombón cremoso de callos y croquetas de " joselito" canelo de crema de morcilla, después pluma ibérica en salsa de caza y pita guisada con pure de la casa, de postre tarta de queso y leche presa. Todo acompañado de un ribera del duero excepcional y un café muy bueno. Si tuviera que darles una puntuación sobre 10 sería un 11 o incluso un 12, no sólo por la calidad de los productos, sino también por la atención impecable del personal y por lo bien que comimos y la explicación detallada de cada plato. Gracias por todo, sin duda volveremos muy pronto.
Todo un descubrimiento, la merluza con su toque de campo y unos callos impresionantes, ya habíamos estado en más ocasiones y siempre encantados, tanto con el personal como con la comida y que decir de la bodega de vinos, cada vez nos sorprende el metre con un vino mejor
Restaurante de tradición mezclada con toques cocina de actualidad que permite perros en su terraza, que no hay muchos restaurantes con este tipo de cocina que lo permiten.
Sigue en su linea de calidad y buen producto. Algunas novedades interesantes y la calidad de siempre. Tiene de dos menús degustación, de cara al turismo, con una interesante lista de platos asturianos. Buena bodega y atención. Dispone de cómodo y amplio aparcamiento. Recomendable. Importante reservar.
Cuidando hasta el mínimo detalle. Un lugar donde la comida, el detalle y la música ambiente, combinan y hacen que todo se disfrute por duplicado. Hasta un simple vermut. Gracias.
Restaurante de comida tradicionalmente asturiana. La carta no es muy extensa, pero los productos con los que se hacen los distintos platos son de PRIMERISIMA calidad, como por ejemplo el arroz. El restaurante es muy cuco, con un porche acristalado como comedor exterior, aunque bien climatizado para poder comer en invierno. Dentro hay otro comedor, no muy grande pero muy acogedor igualmente. El servicio es excelente. En resumen,
Delicioso. El arroz con pitu muy bueno, uno de los mejores que ponen en Asturias; la atención inmejorable y el sitio merece la pena el desvío, rodeo, vuelta.precio razonable. El cafetín de después de potera, algo que debes de probar sin lugar a dudas. Tiene aparcamiento propio y terraza cubierta. El restaurante amplio y muy bien decorado
Esta que es nuestra segunda vez juntos pero la cuarta de mi pareja hemos disfrutado del menú que a través de Groupon ofrecían desde este gran restaurante dónde todo está exquisito y una vez mas salimos maravillados tanto de la atención cómo de la gran cocina que tienen.
Muy buena relación calidad precio. Gran atención personalizada por parte de sus propietarios. Rapidez y presentación de los platos insuperable. Instalaciones limpias y muy agradables. Lugar imprescindible para degustar una cocina diferente y pasar unos buenos momentos. Muy recomendable.