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La casa muy acogedora y la señora muy amable. Pero hay 2 puntos flojos: 1: a las 6 de la tarde no hay mucho ocio en el pueblo, por no decir que a las 7 era un pueblo fantasma, todo cerrado (excepto el supermercado). Así que tienes que irte a la casa y NO HAY TV en la habitación, por lo que te aburres un poco estando en la habitación a las 7 de la tarde. 2: el desayuno un poco flojo. Café - zumo de naranja y tostadas con mantequilla y mermelada. El eran rebanadas y estaban tan tostadas que se partían como si estuvieses comiendo galletas. Al ser un pueblo tan famoso x el queso. Me esperaba algo de queso o algún dulce casero tipo (bizcocho).
Con TV y el desayuno un poco más fuerte, sería perfecto
Un lugar ideal para quienes deciden visitar el Parque Nacional de Picos de Europa.
Disfruté de mi estancia en esta casa de huéspedes atmosférica. Esta es una casa antigua con detalles en madera, construida en 1919. Puedes encontrar algunas antigüedades en la casa que crean una atmósfera única y te sumergen en ella. Cama doble grande, baño cómodo y hermosa vista desde las ventanas. Para algunos, las manchas en la colcha pueden ser un problema, pero a mí no me importó en absoluto. El desayuno incluía una selección de té o café, zumo, tostadas con mantequilla y mermelada y magdalenas pequeñas. La anfitriona es muy amable y receptiva. Habla mal inglés, pero no fue problema para nosotros entendernos. Si necesitas poner algo en el refrigerador, puedes pedirle que lo haga. Para algunos, las habitaciones no serán de cinco estrellas, pero no las comparo con hoteles ideales. En primer lugar, se trata de una experiencia placentera y nuevas sensaciones, una oportunidad para escapar del bullicio de la ciudad, sentirse más cerca de la naturaleza y sumergirse un poco en los viejos tiempos. Hay aparcamiento. Teniendo en cuenta el precio razonable y todo lo anterior, puedo decir que fue la estancia más cómoda posible.
La casa es muy agradable, con arquitectura típica de Picos de Europa, y muy bien cuidada. Fuimos muy bien recibidos, con gran amabilidad. El desayuno siempre es suficiente y siempre se sirve con amabilidad. Nos gustó mucho este lugar y lo recomendamos ampliamente. A repetir en el futuro.
Hemos ido ha hacer la ruta del Cares y ha sido una decisión increíble quedarnos en Casa de Aldea Florentina. Florentina es una mujer muy atenta que nos ha ayudado mucho. El desayuno muy bueno.
Estancia inmejorable. Florentina, una mujer muy agradable, siempre sonriente. La casa es antigua de pueblo, preciosa y muy acogedora. Las habitaciones limpias y baño propio. El desayuno bueno y abundante. Una experiencia muy recomendable y para repetir sin duda alguna.
Una estancia de 10! Florentina es una mujer encantadora. Una casita rural con encanto a la que no le falta un detalle. Desde luego un gran descubrimiento
La estancia a sido inmejorable en casa de Florentina. Destacar el trato de Florentina la dueña de la casa en todo momento amable, atenta, cariñosa y pendiente en todo momento de las necesidades que podíamos tener. Es una casa acogedora con puro encanto con un jardín precioso y cuidado y unas vistas estupendas. La ubicación ideal para el silencio y el relax. Esta a 2 minutos andando al centro del pueblo Las Arenas de Cabrales. La habitación comoda y muy limpia, el colchón y almuadas muy cómodas. Limpieza de habitación a diario y cambio de toallas también. Huele muy agradable la habitación. Tiene secador en las habitaciones. También tiene parking privado.
Excelente atención, muy limpio, desayuno abundante. Una casa de Aldea acogedora, atendida por su dueña (Florentina), muy amable, lugar tranquilo dentro del pueblo. Me sentí como en casa, muy agradable, lo recomiendo.
Una casa muy acogedora. Arenas de Cabrales está en una muy buena ubicación para hacer rutas por los picos de europa y para ver sitios con mucho encanto sin irte muy lejos de ese punto. Toallas cambiadas a diario y la anfitriona, una mujer muy agradable, hace que te sientas como en casa. Nosotros sólo la cogimos con desayuno porque pasábamos todo el día fuera. El desayuno eran unos sobaos de la tierra, tostadas, zumito de naranja y café o cacao. Sitio recomendable
Estamos alojadas en la casa de Florentina, sin duda una gran anfitriona. Una casa de cuentos, el mejor lugar para descansar y disfrutar de Arenas de Cabrales.
Muy buena experiencia, una casa muy bonita y acogedora. Florentina es una mujer muy agradable y encantadora, atenta en todo momento te sientes como en casa, el lugar es muy céntrico para ir a disfrutar de distintas rutas que ofrece esta zona de Asturias. Un saludo y recomiendo esta maravillosa casa.
Buena atencion, bonito y muy buen desayuno. Y tengo que decir que el zumo si es natural y el.baño es de los más grandes que he visto en un hotel. No entiendo las opiniones de algunos, parece que no hayan estado en el lugar. Florentina, muymaja y amable.
Estuve en 2007 y la estancia fue maravillosa, aun recuerdo a Florentina una mujer agradable y el trato es como estar en mi propia casa, creo que algún día volveré, es donde más cómodo me he sentido estando fuera de casa y eso se agradece, también esos desayunos que te duran hasta la comida, solo tengo palabras de agradecimiento, muchas gracias por el trato Florentina.