Confitería Bar La Luz

Un auténtico robo. 8,75€ dos cafés y dos croissant enanos.
En un local que hace 50 años que no se gasta un euro en arreglar, no entiendo que los precios sean superiores por ejemplo a los que he pagado en pleno centro de Gijón por un desayuno a años luz de este y en un local cuidado al detalle. No volveré.

Entramos porque visto desde fuera no tiene mala pinta, pero dentro esta asqueroso, los baños sucios la barra sucia, el cafe malisimo y las napolitanas quemadas y malas. No lo recomiendo

Pasan las camareras al lado tuyo recogiendo mesas y no te atienden. Eso sí, si eres del pueblo no hay problema, rapidez extrema, tercer día que intento tomar café sin éxito, hoy han sido 20 minutos viendo cómo atendían a los de al lado y no a mí. Absoluto desastre.

Sitio perfecto para desayunar o tomar café.
Es un local que lleva abierto desde los años 40 y tiene encanto.
Sirven cafés, tostadas, bollería, pastelitos.
Por la mañana hay mucho movimiento pero las camareras son rápidas así que genial.
Un acierto!

Un desastre en los desayunos. Descontrol total del personal. No se puede pagar con tarjeta pero no lo indica en ningún cartel

Genial para desayunar y merendar. No admiten tarjeta, por lo que lleve dinerito en metálico. Precios buenos. Pasteles riquísimos. Cerca hay aparcamientos de zona azul.

Buena atención, muy buen café y muchas opciones para acompañar al café
Cuando vuelva a Luarca desayunaré allí seguro

El local es acogedor y bien situado, tomamos 2 cafés dobles, 1colacao, 2 croissant, 1 napolitana y 1 agua. Precio, 9'70€. La bollería nos gustó y los cafés valen perfectamente. Las camareras nos dieron un buen servicio.buen desayuno para empezar el día.

Fui a desayunar hoy sobre las 10: 30.

Tomé un café con una napolitana de chocolate. El café grande, bien cargado y buen sabor. La napolitana una buena ración.

‍ En mi caso el servicio fue muy rápido y muy atento en todo momento. Me sirvieron el café y la napolitana al instante nada más sentarme y me preguntaron. No sólo eso, al no disponer de efectivo ya que no pude pagar con tarjeta, me permitieron irme a un cajero sin ninguna prisa ni impedimento.

? Por último, me llevé algunos dulces que me recomendaron y un par de trozos de empanada (de picadillo y carne)

El precio de todo fueron 7.20

Un local con cristaleras bien iluminado que da a la plaza. En verano tiene unas terraza afuera. Tiene pastelería típica de la zona en los mostradores y alguna decoración antigua junto con fotos/cuadros de Luarca.

Fui a desayunar hoy sobre las 10: 30.

Tomé un café con una napolitana de chocolate. El café grande, bien cargado y buen sabor. La napolitana una buena ración.

En mi caso el servicio fue muy rápido y muy atento en todo momento. Me sirvieron el café y la napolitana al instante nada más sentarme y me preguntaron. No sólo eso, al no disponer de efectivo ya que no pude pagar con tarjeta, me permitieron irme a un cajero sin ninguna prisa ni impedimento.

Por último, me llevé algunos dulces que me recomendaron y un par de trozos de empanada (de picadillo y carne)

El precio de todo fueron 7.20

Un local con cristaleras bien iluminado que da a la plaza. En verano tiene unas terraza afuera. Tiene pastelería típica de la zona en los mostradores y alguna decoración antigua junto con fotos/cuadros de Luarca.

Favoritismos a la hora de servir. Esperas más de un cuarto de hora a que sirvan en terraza y si vienen conocidos les atienden antes. Muy desagradable la camarera, al decirle que estábamos antes, me contesta que si me quiero marchar que lo haga. El café malisimo

Le doy una estrella porque no se puede menos. Triste pero cierto.pasamos por alli para tomar un cafe y seguir hacia el descenso. Despues de esperar mas de media hora por dos cafes, solicitamos que sean templados cuando nos los sirvan ya que era tarde. Aun asi, esos cafes no llegaron. Cinco o seis personas para un bar medio vacio y sin ninguna sangre. Malas caras y poca (o ninguna educacion). Lo unico positivo que podria destacar es el croissant, el cual sin cafe tampoco se pudo disfrutar de la misma manera.
Es una PENA con la de gente que querria trabajar, no haya quien lo aproveche.
Jamas lo recomendaria, ni para un cafe rapido, ni para un apuro como en este caso.
Consejo: dejad la hosteleria y trabajad con animales.

No tienen mano con los clientes. Van demasiado agobiados. La empanada de bonito, mucho pan y muy escaso bonito. Por lo demás un bar de pueblo normal bien ubicado que podría estar mucho mejor con poco esfuerzo.

Casi no te Dan ni los Buenos dias. No disponen de carta no te Dan información de lo que tienen para desayunar. Nada recomendable

Iba a sentarnos a tomar un café, pero antes necesitaba ir al baño, en cuanto pise el baño una señora de mala manera y con falta de educación me dijo que dónde iba.ya solo con el trato que recibí, salí del local y me fui.

El desayuno está bueno y no es caro, pero la atención al público brilla por su ausencia. Las encargadas te miran como si les molestaras, no responden a ninguna muestra de gratitud y han sido desagradables hasta al cobrar.

El café no me pareció bueno. Además de que no se puede pagar con tarjeta y no te informan antes.

Muy natural la elaboración artesanal.
Las palmeras de chocolate las mejores que he comido en mi vida, un hojaldre muy rico ricoo

Café solo doble y ese bollo o coleta que no recuerdo su nombre en la terraza, 4€. Espectacular, me vinieron repentinamente recuerdos de mi infancia del pan dulce que hacía mi madre. Las camareras encantadoras, sobresaliente.

Hemos estado en invierno. Con muchas cosas cerradas alrededor, es un refugio con buen café y dulces de hojaldre muy ricos. Hemos tenido suerte, muy rico y a buen precio.

Pasamos por delante y vimos unos dulces típicos de la zona, verdaderamente exquisitos a un euro.

No pondría ni una estrella, la mujer de gafas que atiende es una mal educada, grosera, bruta, bestia, uraña, mala leche y encima le pagamos y ahí le dejamos su mugre de café. Le dio un grito a mi hijo de 1 año por tocar la vitrina de los bollos y a nosotros por darle las gracias, nos miró de mala manera. Que la vida te devuelva lo mismo que das mala bicha, y si no quieres atender a la gente vete a tu casa y deja trabajar a otros.

Es una confitería.exelente.atencion nos ofrece un excelente confort respetando todas medidas sanitarias, recomendamos que todo el que venga a luarca no dejen de probar sus productos.

Tengo que decir que el café está rico pero me quedé atragantada cuando vi que la señora que atiende (no sé si es la dueña) comenzó a dar voces por una ventana a un chico que se había apoyado en la misma ya que una cliente se había quejado. Creo que ante todo hay que tener educación y buenas formas para decir las cosas, el chico pidió disculpas y se fue. NO SE DEBE TRATAR ASÍ A LAS PERSONAS. Fue un momento muy incómodo, de vergüenza ajena. No volveré jamás.

Mal trato hacia los posibles clientes, con falta de respeto por haber parado delante de una ventana,
Muy mal, muy mal, las cosas se dicen con más educación y seguro que se entienden!

La cafetería está muy bien situada y en la terraza se está de lujo.
Precios muy asequibles. Un café 1,20e. Pero Los dulces nos han decepcionado mucho.

Muy buena repostería casera. También tienes pinchos de tortilla y empanada. El café está bueno. Todo muy tradicional.

Una inspiradora cafetería, donde poder tomar un vino o un café y admirar la belleza de esta preciosa plaza a la que llaman "Plaza de la farola"
Gracias por la amabilidad.

Pastelería salada y dulce de muy buena calidad. Esencial, las empanadas y el pincho de tortilla. Pasteles de excelente materia prima.

Camareros muy bien. Croissant muy ricos si no están quemados por debajo. Pincho de tortilla rica pero muy fría para mi gusto. Bien de precios.

No llevan mascarillas.solo unas pantallas que no sirven para nada.una pena, cada año paro en este sitio.este año lo siento.

Se ve como un bar bastante típico y bonito, por eso fuimos a tomar un café, el café normal, digo, no es excelente y ese día, al cocinero de le pasó la sal de la tortilla que comimos, estaba muy, muy salada.podrían mejorar ;)

Café de los de antes, de los que sus mesas amarmoladas encierran conversaciones decimonónicas. Con solera y estilo. Confitería muy rica y selecta.