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El aforo completo de algunos restaurantes fue la maravillosa causa que hizo que llegásemos por casualidad a El Campanu, debo decir que nos llamó la atención que no estuviese muy concurrido y eso siempre te hace desconfiar, pero toda desconfianza desapareció con el trato de las dos personas que nos atendieron con un trato exquisito y seguidamente con la calidad del producto que consumimos, nunca había probado una merluza tan bien cocinada y con un sabor tan exquisito, la lubina también increíble, debo decir que las raciones son muy generosas pues nos fijamos en un cachopo que sirvieron para dos personas y no me lo podía creer pues ahí podrían haber comido cuatro. No es barato pero la relación calidad precio merece la pena, 100% recomendable, sin duda repetiriamos si volviésemos a Gijón.
Fantástica sidreria con un producto de primera, muy buena atención y una cosa que hay que reseñar hoy en día, escancian la sidra muy bien y a buen ritmo.
Nueva visita al campanu, pescados y mariscos muy bien tratados por su cocinero. De entrante pulpo y de segundos rubiel y lubina punto perfecto. De postre nos recomendo el maitre la torrija con helado de leche merengada un acierto. Trato correcto y profesional
El sitio y camareros muy buenos pero el buey de mar está vacío porque es creo que no es de Cantabrico.asta un cangrejo moro de lo que venden en Cádiz tienen más carne
Fui el otro día con mi pareja a comer calamares, croquetas y solomillo, la comida estupenda. Super recomendado, pero sobre todo el servicio del maitre y la camarera que estaba con él en comedor super amables, muy serviciales y atentos, volveríamos sin dudarlo. Nada que ver con los camareros que había antes, dan ganas de volver a reservar en cualquier momento, porque te atienden con una sonrisa y así da gusto.
Recomendable el restaurante, cenamos muy bien, el comedor muy acogedor y lo mejor la atención del camarero Hernán todo un profesional muy merecido su aumento de sueldo.
No se de donde le sale la fama, la gente que pone 5 estrellas debe de comer a base de congelados del Mercadona. Navajas de tercera y mal hechas y la lubina cruda y más de lo mismo. 100 euros tirados a la basura. Lo único bueno el trato de los camareros, local vacío, normal
Un locale con cucina tipica. Portate abbondanti, con un antipasto eravamo già pieni. Ottimo il sidro e ben servito. Personale gentile e veloce. Prezzo giusto.
Este sitio de Gijón tiene un muy buen producto. Se nota que todo es fresco. El precio es la única pega que vi que un pelin caro pero no mucho. Servicio rápido y muy amables.
Muy popular y, en algún detalle, se nota que no necesitan publicidad. Y eso es un riesgo. Me explico: pedimos unos berberechos que eran enormes y muy buenos. Un cabracho a la plancha fresquísimo y muy sabroso y un entrecot de casi 1/2kg, para una persona, que estaba como una piedra. No era problema el punto de la carne, sino que la pieza no era tierna. Dos tercios se quedaron en el plato. Un error importante que no se puede pasar en un sitio tan reconocido. Aún con eso, lo recomiendo porque en cualquier momento puede pasarle eso a cualquier otro restaurante. Pero deberían tenerlo en cuenta.
Tvimos que esperar un rato para la paella pero fuimos avisados y fuimos recompensados con unas croquetas aunque en primer lugar se nos ofreció unos calamares los cuales rehusamos, y aún así nuestra espera fue recompensada con unas croquetas. Gran trato al cliente.
Restaurante con buen producto. La fabada muy rica y la merluza fresca. Detalle de aperitivo antes de llegar la comida. Fuimos sin reservar y nos ofrecieron mesa fuera, dentro lo tenían lleno. Mejorable la limpieza de la lona/toldo de separación en la terraza que comparten con el bar contiguo.
El peor arroz con bogavante que he comido nunca y encima el más caro. El arroz pasado y sin sabor y el bogavante seco. Realmente incomestible. Deberíais revisar este plato y sacarlo de carta sino sabéis cocinarlo y más por el precio que pedís. Es vergonzoso presentar un plato así.
Después de haber pedido y estado con música en la terraza, nos han traído la cuenta sin haberla pedido dando por hecho que no íbamos a pedir más, sin embargo, hemos ido a pedir y nos han dado una negativa de malas maneras y sin ninguna explicación.
Estuvimos ayer y pese a que era tarde nos atendieron relativamente rápido, pedimos unas patatas de queso vidiago que estaban muy ricas pero el queso bastante escaso, quizá un cuenco aparte con más salsa habría estado genial. Después pedimos parrilla de pescado que aunque estaba muy muy bueno… no estaba hecho a la parrilla… y la sangria de sidra tremenda! Nos gustó mucho pero esos detalles hacen que no pueda dar una valoración de 5 estrellas total…
Fuimos a cenar 3 personas de raciones. Pedimos: - Croquetas de jamón ibérico. 10 unidades cuadradas, muy ricas y recién fritas. 9€ - Calamares fritos. Muy buenos, calamar, calamar. 15€ - Cachopines de jabalí. Acompañados de patatas fritas y con queso y virutas de jamón por encima. Rellenos de buen jamón y rico queso estaban jugosos y ricos. 21€ Pedimos de postre: - Coulant. Muy bueno, con una bola de helado. 7€ Nada más sentarnos nos invitaron a un vasito de caldo de marisco bien caliente. El pan a escoger entre 2 tipos, el de maíz con pipas buenísimo. Al comer con sidra, marca Foncueva (muy buena), nos servía el camarero en vasos individuales siempre que se lo pedíamos. Cafés a 1,20€. Servicio muy atento y rápido.
La primera igual.pero dos de dos ya no es casualidad. Restaurante muy bueno, cocina estupendamente cosas normales y los camareros están en todo. Además en la terraza permiten estar con la mascota. Importante