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Carla es una anfitriona fantástica, detallista y encantadora. Se preocupo de nosotros y de que estuviésemos a gusto durante toda nuestra estancia. Siempre disponible y dispuesta ayudar, nos recomendó restaurantes, actividades incluso nos paso el menú de algún restaurante para mi cumpleaños. Al llegar tuvo el detalle de tenerme preparado un pastel con una vela de cumpleaños así como una felicitación y nota de bienvenida, por no olvidar pares de zapatillas de casa para todos por si no habíamos llevado. También tenía para nosotros una cesta enorme de nueces de su propia casa. Vamos que más no se puede pedir, decir encantados con ella es quedarnos cortos. En cuanto a la casa, a pesar de no tener terreno y no ser enorme, es preciosa, cómoda, llena de detalles y mucho más espaciosa de lo que parece. La casa estaba perfecta y muy limpia. Muy bien comunicada a 25 minutos de oviedo y con todas las comunidades a dos pasos andando, supermercado, banco, farmacia, estanco y sobre todo los restaurantes de lo mejor de la zona. Por último, los vecinos muy amables y la ruta del oso en bicicleta en familia toda una experiencia. Sin duda, repetiremos. Hasta pronto!
La casa es espectacular. Tiene todo lo necesario para una familia. Lugar idílico y tranquilo. Muy bien decorada y reformada. Mis hijos se lo pasaron pipa en la buhardilla. Muchísimas gracias por todo