Este sitio web utiliza cookies para mejorar la experiencia del usuario. Al utilizar nuestro sitio web, usted acepta todas las cookies de acuerdo con nuestra Política de cookies.Aprende másOK
Lastima que ya no será de quienes lo regentan actualmente, pero la atención súper del joven, la ubicación y lo buenísimo que están los bocadillos de chorizo y tortilla valen la pena.
Somos de Gijón y la verdad es que nunca habíamos parado en este lugar a pesar de la ubicación que nos parece buenísima, más los asientos con cojines que te piden a gritos que te sientes y disfrutes de las vistas, pero después de haber ido hoy me queda claro que no volveré jamás. Pedí un Bisolán Multifrutas y cuando pido un Bisolan, exijo que me traigan un Bisolan Multifrutas y no un zumo probablemente procedente de una botella de litro de zumo barato porque obvio que el sabor se nota. No dije nada en el momento ya que preferí tomarlo y largarme para no regresar, pero vamos, que no está de más que ya que se va a cobrar el refresco como si fuera el original (2.90euros) te traigan la botella cerrada para que el propio cliente la abra. No tengo nada negativo que decir de quien nos atendió, todo correcto.
Servicio pésimo, modales no existen, ni buenas tardes ni nada… luego la tardanza de atendernos… al recibir lo que pedimos, ni una tapa con las cervezas (cuando a todas las demás mesas si se las llevaba) hemos pedido un zumo de melocotón pa una niña y nos trae medio vaso con hielos y el zumo ya puesto, quitamos los hielos (porque parauna cría no los hemos pedido) y como os imagináis eran dos dedos de zumo en el vaso y lo peor, esos dos dedos de zumos 2,90. Le enseñamos la cantidad de zumo al camarero y nos dice que el nos trajo medio vaso lleno y le reclamo que claramente con los hielos es medio vaso. Ni una explicación lógica nos dio, se marchó con la cuenta y el dinero. Luego tuvimos que andar pidiendo la vuelta de la cuenta que no nos traían. Y me negaba que no habia ningun ticket ni ninguna vuelta, una verguenza que como clientes no deberiamos pasar por ello, reclamo el ticket pa tenerlo y lo resuerven haciendo un ticket nuevo donde ni me pusieron lo correspondiente. Por no seguir dando la nota cogi y me fui pero decepcion solo puedo decir.para el buen bar que podría ser. Una pena. Vale la pena andar un poco mas e ir hasta otro bar a tomar algo.
Bar con unas vistas privilegiadas enclavado en el mismísimo parque Isabel la Católica junto al estanque dónde disfrutar de ese bellísimo entorno mientras bebes y/o comes algo disfrutando de la paz que se respira en un entorno idilico con un ambiente relajado. Ideal para ir sol@, en pareja, amig@s o familia con niños. Admiten y tienen WiFi gratis.
¡Me encanta este café! Increíble patio en un parque relajante con corredores, perros, ciclistas y estanques. El dueño conoce mi pedido y solo he estado un par de veces.
Emblemático lugar de Gijón en pleno Parque de Isabel la Católica, relajante para sentarte a oxigenar tomando algo bien desayuno, vermut o de tarde en un ambiente saludable en el pulmón por excelencia. Punto de encuentro los días de partido del Sporting do de está más animado. El Servicio de Camareros, vayas a la hora que vayas, siempre te hacen sentir como un colega más.
Chiringo situado en medio del parque, con buen servicio todos los dias y cerveza estrella galicia. Suele haber mucha gente, así que eso querra decir que es bueno el servicio. Las cañas no son nada caras, y es un lugar muy relajante y tranquilo.
Super bonito el aviario del parque.merece la pena visitarlo. El bar.bueno eso de que en pleno siglo XXI te pongan cacahuetes de aperitivo está más que desfasado
No sé si habria algún cambio de dirección pero ahora está más sucio, el servicio lento o inexistente. El precio alto para lo que ofrecen. Es una pena porque la ubicación es muy agradable.
Lugar comodo en medio del parque de. Isabel la Católica para tomar un descanso y tomarse un café comodamente rodeado de árboles que proporcionan buena sombra
Pequeña terraza muy amplia situada a la entrada del parque de Isabel La Católica. Dispone de muchas zonas de sombra en las que se está muy fresquito. El personal es muy amable y la comida siempre viene con algún pincho gratuito.
Entorno ideal para niños pequeños, sin tráfico y rodeados de naturaleza y aves silvestres. Atención muy esmerada, precios razonables. Merece la pena visitarlo.
El servicio malisimo, 4 camareros para un local que es todo terraza y ninguno mirando si alguien se sienta en ella, en domingo te sientas y como no ven quien llego primero atienden a 4 mesas antes que a ti que has llegado antes, muy poco profesionales cobran a una mesa y en vez de preguntar a la siguiente se van a la barra de paseo y luego vuelven, muy poco pragmáticos y unos auténticos incapacitados para atender, una actitud malisima
Una bonita terraza en el Parque de Isabel la Católica que suele estar bastante concurrida. Bien atendida aunque a veces están un poco saturados por tanta gente (los días de partidos del Sporting por ejemplo). El entorno es bonito y puedes ver patos mientras te tomas algo. Lo único malo es que no tienen servicios, hay que utilizar los del Parque, que están muy cerca.
Me ha dado la impresión de que el dueño no emplea las mejores formas con sus empleados; Aún así la atención de la camarera que llevó mi mesa fue impecable, eso es lo único que me hace replantearme volver.
Un bar con un encanto especial, tiene un entorno natural ideal para tomar algo con la familia o amigos en el medio del parque más bonito de Gijón, lo camareros son muy agradables y la dirección del local gente súper maja Muy recomendable
Me encanta. Eso si tiene más plantilla que un equipo de fútbol jejeje. Son todos súper amables. Para comer y cenar está súper bien. Si estais o pasáis por Gijón esto no os lo podéis perder, está dentro del Parque Isabel la Católica.
2'40€ por un vaso de zumo de brick que obviamente devolvimos y pedimos cambio por un zumo de botella abierto delante nuestro, ya que el brick puede ser de hace una semana, un Sprinte de lata 2'40€. Precios muy elevados para la mala calidad.
Estupendo lugar para tomar algo relajándose en sus cómodos sofás y contemplando el lago, las aves y los árboles del parque de Isabel la Católica. Los precios son muy asequibles y el personal es muy agradable. Un sitio muy recomendable en tu visita al bonito parque.
Ambiente precioso en pleno parque. Una gran pega no tiene baños (estan cerca los publicos del parque pero cierran a las 8) asi que no tomes mas de una cerveza.
El local está en un sitio inmejorable. Pero peca la atención al cliente. Entiendo que la hostelería tiene prisa según el flujo de la clientela, pero bueno, aparte de eso pedí un café y vino con una goma de braquets dentro del café, aparte de las cucharas sucias que nos dieron con el café que ni raspado con la uña se quitaba. Bueno después de estés fallos me dijeron que devolvería el importe del café mediano que tenía la goma (3 euros por un cafe mediano), pero hicieron la devolución del precio de un café normal 1.80€. Yo dejé pasar pero un cliente lo han perdido. Pero eso sí, el lugar es fantástico. Por eso doy 3 estrellas. Por el local.
Buen lugar para hacer una paradita tras un paseo por el parque de Isabel la Católica a tomar un refresco, una cervecita, un café o un buen té frío de los cuales tienen una amplia variedad
Manifiestamente mejorable, el Ayuntamiento debería facilitar más un establecimiento público que en el parque más emblemático de la ciudad es también un servicio al ciudadano.
En medio del parque Isabel la Catolica, entre patos y demás tipo de aves acuáticas, está esté tranquilo y agradable bar en el que tomar algo para el vermut o por la tarde se convierte en fantástico momento para repetir en más ocasiones.
Situado en un precioso parque y al lado de un gran estanque en el que habitan distintas especies de palmipedos. Instalaciones cuidadas y buen servicio de terraza
La ubicación es de las mejores en Gijón dentro del parque Isabel la católica. La atención no es muy esmerada y no tienen mucha oferta de pinchos.un poco decepcionada con el servicio que prestan
Qué decir. El sitio, si las condiciones meteorológicas son favorables, es ideal; en pleno parque, con el estanque de los patos al lado, así como el área infantil y los servicios (WC) propios del parque. El Molinón y el recinto ferial a tiro de piedra, igual que la playa. Vamos, todo perfecto. La cocina, para unos buena, para otros no tanto. Es caro, obviamente estar donde está hace que no sea barato, pero tampoco es mucho más caro que otros establecimientos que ni de lejos pueden ofrecer lo que aquí se ofrece, especialmente el entorno.