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El hotel está genial, el único fallo que la habitación no tiene aire acondicionado y en verano depende el día hace falta. La ubicación es perfecta. El desayuno se podría mejorar.
Magnífica localización. Perfecto para el descanso playero y estrategicamente dispuesto para visitar los Picos de Europa, Santander, Oviedo, Gijón, Covadonga y tantos otros sitios que merecen que los conozcamos. El trato de los hosteleros excelente y la comida muy buena.
Fuimos a merendar unos churros con chocolate y tardaron más de 20 minutos en atendernos y luego tardaron bastante en servirlo, además de que no pudimos disfrutar de un chocolate ya que se había acabado y tuvimos que conformarnos con un colacao. Nos parece una vergüenza que no nos den ni cara mientras esperamos por ello. Al menos el colacao estaba rico, pero deberían hacerse mirar como tratan a sus clientes ya que en este caso nosotras no vamos a volver. Un saludo
Buena terraza cerca del parking, con vistas a la playa de Barro. Excelente paella de marisco. También tiene comedor con unas vistas de la Playa de Barro
Un hotel perfecto para descansar y disfrutar del mar en primera línea. Ambientado con decoración marinera. Buena limpieza y atención por parte del personal
Estuve dos noches. Restaurante; cené una noche, buena atención, bien en cantidad, filete ternera muy baja calidad, muy malo. Habitación; con ventanuco superior sin vistas, decente en general. Baño, olor a tubería insoportable, para vomitar, no pedí cambio pensando que sería algo puntual, Error! La ubicación es buena, tranquilo, opciones variadas para disfrutar.
La habitación es muy grande y cuenta con una terraza cerrada enorme, por lo menos la que no tiene vistas al mar. La cama y la almohada muy cómodas! El desayuno buffet variado y reponían con frecuencia. Muy contento con este hotel.
Muy buena situación frente al mar. Pero alrededor no hay nada de restaurantes ni supermercados nada de nada. Vinimos deseosos por probar la sidra y en el hotel nos dijeron que no la servían. El desayuno si eres de los que cuidas lo que comes no hay mucho donde elegir.
Sólo puedo hablar del restaurante. Fuimos a comer allí en agosto y todo estaba buenísimo, desde las zamburiñas, los bocartes (boquerones), la tabla de quesos asturianos, las patatas al cabrales, los postres, Lo recomiendo. Tiene unas buenas vistas a la playa.
¡¡Mucho Ojo! Si te decides por este hotel, asegúrate que en la reserva NO pone "edificio anexo". Te mandan a un edificio que nada tiene que ver con las fotos del hotel, y desde luego ni con un 3 estrellas, las habitaciones muy justitas, pero la peor sorpresa fue que al ir a subir las maletas, no había ascensor. Tuvimos que subir 2 pisos cargados con 3 maletones, y no solo eso cuando en recepción comentamos que como era posible que no venía reflejado en ningún lugar en la reserva, no nos dieron ninguna solución. Al final hemos pagado precio de un 3 estrellas situado a pie de playa (precio 2° quincena de agosto, podéis imaginar) por estar alojados en una habitación abuardillada, que para nada aparece en las fotos cuando reservas, con el baño con un olor a tuberías continuo, separado por una puerta corredera de cristal que por supuesto no encajaba en cierre, y subiendo y bajando 2 pisos en un edificio anexo sin recepción ni personal de control de entrada en el mismo. La media pensión que cogimos tampoco merece la pena, y menos si vais con niños.
Solo estuvimos en el restaurante. En la terraza con muy buenas vistas a la playa. El menú anunciado a los turistas era de 30 €. Sorpresa al llegar la cuenta te suman el iva…dónde hacen eso ya? Muy ruin. Además, Muy caro para la calidad de la comida.
Estuvimos en la cafetería tomando algo y la camarera que nos atendió fue muy atenta y agradable. Terraza amplia, acogedora y con vistas impresionantes.
Fatal, el hotel más horrible del mundo para el precio tan alto que tiene, la habitación olía mal, a viejo, antiguo, tuve que lavar dos veces la ropa la vuelta a casa para sacarle el olor. Después de las cuatro no dan ninguna ración de nada, ni de queso que se costa fácil sin la necesidad de un cocinero, el desayuno muy básico, siempre lo mismo, la cena muy tarde a partir de la 21: 00, tengo otras quejas pero no sigo escribir que me pongo enferma de solo pensarlo que mal lo pasé ahí. No lo recomiendo a nadie.
A good place to be near the beach with a fair price. The rooms are big but the beds are far from being comfortable. The room wasn't as clean as expected. It has a liitle terrace within the room that is OK to chill out. They have a breakfast option that is OK, doesn't expect anything special.
La ubicación muy buena a pie de playa. Nos dieron una habitación, más bien un zulo, ventana en el techo, sin vistas y si se abría olor de aceite de cocina, sin aire acondicionado y muy calurosa. Además no había adonde tender las toallas de la playa ni bañadores. Reclamamos para que nos cambiarán de habitación, pero nada, eran lentejas.
Es un hotel que deja mucho que desear. Me alojé con mi chico 5 días y menos mal que estábamos poco tiempo en la habitación. Cuando reservamos pedimos una cama de matrimonio y las fotos que no salían de la habitación que en teoría ya teníamos reservada no tenía nada que ver con la que nos dieron. Esta era abuhardillada, con dos camas individuales juntas, una ventana súper pequeña y unas cortinas del año de la polca; el armario era enano y estaba sucio, tuvimos que pasar una toallita para poder guardar la ropa; la tele, que se suponía que era plana, era una normal de tamaño mediano. En cuanto al baño, no hay nada de espacio para poder dejar el neceser, el secador ni siquiera funcionaba y la ducha era para los pitufos, ya que casi ni se cabía en ella. Evidentemente fuimos a quejarnos a recepción, ya que habíamos pagado 40€ más para tener la habitación que reservamos y no otra que había libre en el edificio contiguo (Quintamar). La respuesta que nos dieron es que no había disponibilidad de habitaciones y que la pantalla bajo su punto de vista era plana, después se limitaron a darnos una única tarjeta mugrosa. En relación al desayuno, aunque era bufete era muy pobre y escaso, no tenía nada de platos calientes como huevos revueltos o bacon, como suelen tener la mayoría. En definitiva, un hotel que da la sensación de viejo y con una gran necesidad de limpieza, lo único que tiene a su favor es que tiene la playa en frente, pero aún así tienes que coger el coche para poder ver sitios interesantes, ya que el pueblo es muy pequeño y no tiene nada que ver.
Buen hotel. Primera linea de playa autentica, puedes bajar en chancletas a la playa. El personal muy atento y simpático. Las habitaciones vista mar son más antiguas, más bonitas ambiente marinero, lo único las camas un poco más incomodas, La zona de habitaciones nuevas es más moderna y con mejores camas. Tiene aparcamiento propio delante. Tiene buen restaurante, buena comida. Desayuno bufet sencillo suficiente. Bastante silencioso, salvo el rumor de las.olas. Bastante jaleo en la playa de día.
Comida: fabada con muchísima grasa y poco sabor, merluza insipida;arroz que me dicen es un risoto y es una sopa de pescado con mucho arroz. Pedimos una botella de agua y se les olvidan las copas, Tengo que insistir para que me cobren por que "pensaba que ya nos habían cobrado". Han modernizado el hotel y han perdido parte del sabor de su cocina una lástima
El hotel está bien, las habitaciones amplias y nuevas. Pero es insoportable el ruido de los extractores de la cocina salen a las ventanas de las habitaciones. Es insufrible el ruido. No volveré seguro
Buen hotel con la playa a 1 minuto andando. La comida estan muy bien si no te basas en los menus del dia, en ese tema son muy flojos pero comiendo de la carta se cone genial. Por poner alguna pega a la habitacion, le falta algun sillon o sofa pero por lo demas, perfecto. Es la segunda vez que vengo y si vuelvo por esta zona seguro que repetirè.
Nos cierran un precio telefonicamente a 170e /dia con vistas al mar, pues bien, al irnos intentaron aumentarlo diciendonos que no estaban incluidas las vistas ni el desayuno, encareciendose a 220.pura golferia de guante blanco.
La habitación bastante amplia, pero ni idea de hacer una cama y barrer la habitación lo justito. El hotel está muy bien ubicado justo al lado de la playa. Pero el régimen y la comida del hotel muuuuy justo por decir pobre y de mala calidad. Si pusieran algo más de ganas seria un HOTEL TOP. Trato de las mujeres de la recepción seco y apático. UNA DECEPCIÓN para lo que podría ser con un poquito más de interés y dedicación un gran hotel.
Hotel de fácil acceso, con zona gratuita para aparcar y una bonita playa a los pies del hotel. Posee cafetería/restaurante en el exterior y el salón interior de catering para las personas que deseen hacer reservas con desayunos y comidas incluidas. La atención correcta, la habitación me pareció moderna; con lector de tarjeta en la puerta y para encender las luces. Armario doble grande, camas cómodas, tv 32', baño moderno amplio con geles y jabones bien presentados. Muy limpio. Sólo añadir que si está lleno puede resultar algo ruidoso; pues son varias habitaciones por planta y se escucha mucho el ruido de las habitaciones contiguas y el pasillo.
Ubicando excelente a pie de playa y 20 30 minutos de muchos lugares para visitar, en el bar del hotel la camareras super amables y la comida increíble, la única pega es que en la habitación hace calor y el desayuno es muy justo, 3 embutidos y pastas, por lo demás hemos pasado una semana de vacaciones y hemos disfrutado. Si vuelvo a Asturias volvería a este hotel
La habitación con balcón y vista al mar es amplia y con la decoración de hace 20 años, que no han renovado. El precio que se paga es por el balcón y por las vistas, no por el nivel de acabados, ni por los servicios que ofrece. El menú del restaurante está bien por el precio que tiene. Es práctico porque está al lado de la playa.
Un hotel algo anticuado, pero limpio y con buena atención. Y sobre todo a destacar la espectacular e inmejorable ubicación, en la mismísima y maravillosa playa de Barro. El restaurante del hotel nos pareció muy mejorable, además de caro.
Lo mejor la localización junto a la playa. El desayuno muy básico, poca variedad. La habitación muy pequeña, no dispone de bañera, en su lugar hay un plato de ducha muy pequeño. Una pena que no cuiden más los detalles. Por el precio que se paga deberían mejorar muchas cosas.
Muy limpio, clásico y bastante bien conservado. Nuestra habitación con vistas a la playa, genial despertar con el sonido de las olas y sus preciosas vistas. Desayuno correcto. Personal amable y atento.
Cuando nos alojamos allí hace 2 años estuvimos de maravilla, y hace unos días cenamos allí en honor a mi niña que cumplía 9 años, y nos trataron genial.
Las únicas habitaciones que merecen la pena son las del ala exterior con vistas a la playa con pasillos decorados con ambiente marinero, el resto tienen vistas interiores con pasillos que recuerdan a los de un instituto. Las camas si son muy cómodas, en contrapartida la carta del restaurante que se sirve por las noches en la cafetería es poco menos que lamentable. No me quiero imaginar el servicio que pueden ofrecer en meses como agosto. Playa frecuentada por aficionados al surf y por tractores en las labores de recogida de ocle y algas tras los temporales.
Me encantó. Desde mi ventana tenía vistas a la playa. Yo no sabía que había habitaciones con terraza, de haberlo sabido la habría escogido. Estaba todo muy limpio.
El hotel tiene una ubicación inmejorable. El entorno espectacular. El personal excelente y atento. La limpieza correcta y el restaurante muy buen calidad/precio. La pega, tiene una parte reformada y otra más vieja en la que estuvimos alojados.
La ubicación es excelente, al pie de la playa de Barro. Ibamos en familia y cogimos dos habitaciones dobles, una estuvo muy bien, situada en la parte que no da al mar, pero es la zona nueva del hotel y se nota. La otra estaba en la zona más antigua y en sí estaba correcta ya que alguna reforma se nota que han hecho (el suelo, por ejemplo), lo peor fue el baño que tenía bañera con mampara (fuente de mohos y suciedad) y la bañera en sí tenía varios saltones. Además en el armario situado debajo del lavabo había siempre un charco de agua que no tuvimos claro de dónde salía y que se derramaba por el suelo a veces. Además, siendo el mismo precio en ambas habitaciones, la nueva se la veía más limpia y reponían los botecitos de gel y champú, en la antigua la limpieza dejó mucho que desear (cuando marchamos en la mesilla de noche quedaban todavía marcas de vaso de los huéspedes anteriores) y solamente tenía un dispensador de gel en la bañera y otro en el lavabo (no sé si eso está muy de acorde con la normativa anticovid). Otro detalle un poco incómodo es que si subías a la habitación antes de las 4 de la tarde, era bastante probable que te la encontraras sin hacer o con el personal de limpieza dentro todavía. El desayuno es normalillo, pero sí tenían fruta fresca y yogures (el zumo no es natural, claro) y aunque no es bufé (creemos que por el covid) sí podías repetir de todo. Aunque sólo contratamos alojamiento y desayuno, cenamos un día el menú, bastante correcto para 14€, y otro día a la carta que nos encantó: todo rico, platos abundantes y precios ajustados. La atención en el comedor es muy buena, en la cafetería no tanto, dependiendo de qué camarero te toque.
Eo hotel está bien ubicado justo en la playa de barro.pero la atención de l@s camarer@s deja bastante que desear.parece que están enfadad@s y te sirven con malas caras.
El hotel está ubicado a pie de playa, las habitaciones están muy bien, el desayuno es correcto y el trato del personal es ejemplar, nos ha gustado bastante.
El servicio no esta a la altura del hotel. Esta situado frente al mar y las habitaciones son normales, menos las nuevas en el primer piso, que esas son escepcionales
Hemos estado una semana en pareja y la estancia ha sido magnífica. El personal todos de diez, del primero al último. Estábamos a media pensión. La cena estupenda y abundante. Igual que el desayuno. Normas covid a rajatabla, que te hacen sentir seguro. Hotel con unas vistas impresionantes, de cine.
Porque tiene una ubicación privilegiada pero un servicio de terraza poco empático y bastante apático. En el hotel estuvimos hace unos años y nada que objetar. Al contrario. De ahí mis 3 estrellas, pero deben mejorar el servicio en terraza. No pueden decirte que el ultimo turno de comida es a las 14 en pleno verano y con la playa a tope. Un gran error bajo mi punto de vista
Está a pie de playa. Hotel limpio, bastante nuevo aparentemente. Muy buen servicio. Camareros muy amables, tanto en comedor como en bar. Una estancia muy agradable, para volver, sin duda.
Muy mal, solo puedo decir por la parte del Restaurante, la comida, tiene mucho que mejorar, la atención de los camareros el menú de 15 Euros, lo he comido mejores por menos precio y con más opciones. En fin yo creo que por estar situado a pié de playa les da igual mejorar o no. Y para rematar te cobran un suplemento a mayor de un 10%. Pedí una ensalada con queso de la Tierra el queso que tenia que ser el protagonista del plato no lo fue, porque con la lechuga casi no se veían.
Es un hotel de batalla. Lo mejor es que la playa está al lado, eso es un súper Plus. Desayuno escaso y normalito. Ambiente bueno, pero la decoración etc deja un poco que desear. Comimos fuera del menú del día y se come bastante bien, merece la pena probar. Si quieres ir, no pagar mucho y estar al lado de la playa, es ideal. Si buscas comodidades etc no es tu hotel.
Entorno privilegiado, buen trato y habitación y baño amplios, limpios y con una decoración muy acogedora. Recomendable para un fin de semana en familia.
Ubicación inmejorable, mejorable en algunos aspectos; cocina y parking del hotel. Tampoco tiene aire acondicionado en habitaciones ni piscina, se puede pasar sin ellos pero mejoraría. Trato del personal y playa casi imbatible en la zona.
Hotel de 3 estrellas situado frente al mar. Lo malo es que están unido al hotel Quintamar que está justo detrás y según le parezca a ellos te dan la habitación en uno u otro. A mi me tocó el Quintamar, en una segunda planta sin ascensor, sin aire acondicionado, no sé como puede ser 3 estrellas. Yo reservé 2 meses antes y creía que iba al Kaype pero me llevé la sorpresa. Así que para otros visitantes informarse bien de donde os toca porque con un niño pequeño y maletas es un rollo no tener ascensor.
Extraordinario hotel situado en una playa preciosa, con un entorno rural de grsn belleza. El personal maravilloso, sin excepción. La comida también. Absolutamente recomendable.
Habitaciones actualizadas, buenos colchones e inmejorables vistas. El desayuno buffet perfecto: calidad y variedad. El staff, atento y profesional. Sin duda, repetiré como alojamiento en mi próxima visita a Asturies.
El hotel puede mejorar si hubiese más personal, faltan camareos, cocineros, y personal de limpieza, no es normal que una persona se ocupe de la limpieza de todas las habitaciones, la hubicación muy buena y la limpieza bien pero podría mejorar al contratar más personal
De lo mejor que hemos disfrutado, fantástico diseño de interiores; personal profesional; situación inmejorable; entorno paradisíaco y una gastronomía acordé con lo mejor de la tierra.gracias por sorprendernos.
El lugar es paradisíaco.en cuanto al hotel.la ropa de cama no está limpia.la almohada sin cambiar y las mantas creo que en todo el verano no las lavan.las habitaciones de arriba son abuhardilladas y dan claustrofobia.
Estuvimos allí hospedados un fin de semana y lo mejor el trato en la cafetería, un chaval joven con barba muy atento y agradable. Volveremos con los niños desde Valladolid!
Fuimos un fin de semana y nos esperábamos un hotel mas moderno, la parte que tiene vistas al mar es un poco antigua, la cama no esta mal, pero las almohadas dejan mucho que desear. En nuestra habitación no había aire acondicionado. El baño es nuevo y muy curioso. El desayuno es buffet libre, si llegas a primera hora coges algo de comida a ultima hora no queda casi nada. El trato respecto al personal muy cordiales todos. Es un hotel caro para las habitaciones que tiene.
Por su situación, servicio y facilidad a la hora de comer. Acabo de quitar una estrella, ya que el "NO SERVICIO" de tres camareras en la terraza interior a sido vergonzoso.
El lugar espectacular.el café un 10 el servicio muy lento es mucho Y el personal no da a basto. Tardaron en servirnos 10 min y otros 10 min en cobrarnos. Hay que mejorar el servicio.
Lo mejor la ubicación, le falta mucho para tener 3 estrellas, bastante anticuado en general, poco personal y poco variedad, y calidad en la comida, sobre todo en el desayuno
El hotel está muy bien, la habitación amplia y limpia. La cafetería son unos antipáticos y bordes. Ya me he tomado dos consumiciones y son incapaces de ofrecerme unas tristes aceitunas, muy mal. Luego voy a comer ya os contaré.
Habitación con vistas a una pared a metro y medio, no se nada ni mar, ni calle. Cama super incomoda. Desayuno sin mucha variedad, comida y cena decente. Estuve de sábado a lunes con pensión completa. Lo mejor el personal
Buen servicio, buena limpieza, ara pasar el fin de semana, o algún día más pero le falta tener pensión completa y me parece un poco caro en temporada alta, pero aún así volveré por qué es una maravilla el poder salir del hotel y pisar la playa, por cierto preciosa y muy limpia la arena es una maravilla.