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El pulpo que hace Feli está increíble.el sitio no te defraudará. Feli sé merece el éxito que tiene, tuvo buenos maestros en sus padres los fundadores de la Taberna Gallega, ahora Taberna de Feli
La comida riquísima, en general. Volvería siempre, salvo que la atención es un poco pasota, desde que cenas hasta el postre te pasa media hora sin pena, y deben tener 9 mesas como mucho. Pero se cena de 10
Me encantó. Volveremos. Un Pulpo Riquísimo, Sidra, Grelos, Lacon. El servicio Inmejorable. Además de Educación, Presentación, La Atención es una maravilla. Felicito a la Direccion.
Es una taberna típica gallega donde se come muy bién y sin pasarse de precio, un lugar para visitar a menudo donde comer raciones típicas de Galicia, muy recomendable.
Sitio acogedor. Comida muy buena y casera. La dueña es además la cocina y es muy amable. Los calamares y la longaniza riquísimos. Calidad precio muy buena. Raciones esplendidas y baratas. Recomendable 100%
Llamamos para reservar mesa y nos dieron para las 23: 15, una vez allí nos dicen de muy malos modos que está todo lleno y que no nos puede atender. Desde luego un sitio al que nunca volver.
Un bar pequeño, pero con una comida buenísima. Nos recomendaron qué comer y estaba buenísimo, tanto el pulpo como el lacón. Habíamos leído que tardan y a nosotros nos atendieron bien de tiempo. Muy atentas las dos mujeres que nos atendieron. Volveríamos!:)
Es un bar muy agradable para compartir unas tapas de la gran variedad de platos que prepara la responsable de cocina; todas ellas muy ricas: el pulpo, calamares, patatas al cabrales.y unos postres deliciosos también y por supuesto, muy asequible de precio
Es un lugar donde te encuentras a gusto, la comida y el Rivero espectacular! Mi recomendación es que es todo casero con lo cual, es mejor guardar mesa para grupo o sino tener paciencia, degustando del lugar y de sus buenos pinchos
Un lugar ideal para saborear unos platos, como una buena Parrocha con jamón o un buen plato de Lacón con patatas por cierto están tan buenas las patatas como el Lacón, Visitarlo
Fuimos a cenar dos personas y la dueña con cara de asco nos dijo que estaba todo lleno, que no nos daba de cenar aún habiendo mesas libres, vamos que nos echo de allí sin inmutarse y sin cambiar la cara de asco que nos puso desde que entramos con una sonrisa.
Comida buena pero el tiempo de espera puede ser largo. La dueña y cocinera necesita su tiempo, aunque lo compensan con el buen humor y trato. O por lo menos lo intentan
Ambiente acogedor para comer pulpo, lacón, oreja, pimientos, calamares, etc. Te atienden a cualquier hora, pero no tengas prisa. Muy bien de precio y buen ribeiro a granel. El licor de café muy bueno.