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Se celebró un el bautizo de nuestro hijo, y todo genial tanto la atención como lel servicio, hablamos con la dueña y no tubo ningún problema con nada. Repetiremos y muy recomendable
Indescriptible. La carta son 6 cosas pero no pueden estar más ricas. Caseras. Ni mi abuela.las albóndigas, el codillo, el picadillo, los callos.esas patatas fritas. El dueño no puede ser más salao, majo, generoso, honesto. Comes por muy poco dinero y el dueño no deja de agasagarte con entrantes, de postre mantecados exquisito hecho por él. Un auténtico descubrimiento. Cuando no venga a comer pasaré con el tupper a coger la cena. De los sitios más recomendables de Avilés de comida casera. Un lujo!
Tan solo puedo valorar la tapita que nos puso con una cervecita que fue un chorizo artesano y un queso de oveja increíble que nos pareció un buen aperitivo de la calidad que tiene para ofrecer, pero lo que si puedo valorar es el trato desinteresado de José ofreciéndonos información sobre donde comer calidad sin sentirnos “guiris”. Seguro que volveremos a pasar en próximas visitas.
El dueño muy amable, no tenía cocinera y el mismo nos preparo de comer, una tapa de embutidos y picadillo con patatas abundante y muy bueno a un precio irrisorio
Lugar tradicional. Comida exquisita e increíble la calidad precio del lugar. El camarero sincero y muy amable. Una carta de platos sin menú extenso, pero de muy buena calidad. Lo recomiendo cien por cien, repetiría experiencia
Increíble sitio. Desde que entras por la puerta te sientes como en casa. La comida es casera y espectacular. El trato es exageradamente bueno, los comentarios no se quedan cortos. Las albóndigas y la longaniza, espectaculares. La materia prima es buena y se nota. Jose además de buen cocinero, es una bellísima persona. Volveremos muy pronto. Un abrazo!:)
Buenas tardes. Hoy hemos comido 4 personas y ha sido una gran experiencia conocer a José un gran profesional y mejor persona y las albóndigas y la longaniza de 10. Muchas gracias José. Repetiremos seguro. Un saludo los de Cantabria y Almería.
Siempre nos encantó, la comida buenísima abundante y muy bien elaborada, su propietario amable, educado, y muy atento, gran conversador, y una persona con la apetece charlar, y volver, la ubicación es un poco complicada, por culpa de que el ayuntamiento de Avilés cada vez nos pone a todos los ciudadanos o foráneos, las cosas más complicadas y difíciles, es vergonzoso que no nos facilite los accesos a la ciudad, por lo demás iremos siempre que podamos, su amabilidad y buen trato unido a la calidad y abundancia de sus productos hace que te apetezca siempre volver, muchas gracias por el rato tan agradable que pasamos, volveremos
Fuimos a comer y el dueño José nos dijo que no podía darnos por un problema, pero nos recomendó un sitio cercano donde comimos pescado expectacular, por lo que volveremos a la Vicuña otro día, muchas gracias por tu interés y sinceridad, da a gusto que quede gente honrada en hostelería.
Comida típica 10/10, atención amable y honesta 10/10. Hay que pagar en efectivo pero es lo de menos. Ante la duda La viñueca nosotros no nos arrepentimos. El vino esta bastante bien y barato
No tengo fotos, en mi valoración va todo, comida casera y atención del 10, José es en encanto de persona más qué vender quiere qué salgas contento, volveremos seguro
Pésimo. Las raciones, si bien son abundantes, solo son patatas fritas. El dueño/camarero, además de llevar alguna copa de mas encima, es muy pesado, comer allí se vuelve una experiencia incomoda, el lugar suele estar vacío, ni siquiera tienen sidra (a pesar de como dicen algunos ser "una típica taberna asturiana"). Por último sólo se puede pagar con efectivo, la cuenta la escribe él mismo en la mesa y no cuentes recibir una factura o ticket por la comida (bastante ilegal todo). En resumen, sitio caro en el que sólo vas a comer patatas y donde el camarero no para de incordiarte. 0 recomendable
Recomendadísimo. Un bar de los de toda la vida, trato familiar, buenos precios, variedad de vino y comida de la tierra buenísima. De los que ya pocos quedan. Además, José es un excelente repostero, el bizcocho o mantecado estaba espectacular.
Genial, a los diez minutos de entrar ya eres de la familia, el local divino, la comida muy, muy rica, el trato increible, tiene una colección de vinos de ¡¡olé! Y la cuenta ni te la crees, gracias D. José, ha sido un placer.
Me lo recomendó mi hijo, y es un sitio espectacular típico asturiano. Un señor súper amable, la comida casera, trato inmejorable. El dueño súper detallista nos trajo hasta lomo para que comiera nuestros perros, jamás en la vida me había pasado algo así un lugar súper recomendable si visitáis Avilés.
Très bonne adresse. Le patron, très sympathique, cherche à faire plaisir à ses clients. Nous avons été très bien reçus. Excellent rapport qualité-prix.
Buena comida casera, raciones bastante grandes, personal muy amable y con ganas de que tuviéramos una buena experiencia. A pesar de que ya eran casi las 5 de la tarde no nos pusieron problemas para comer y nos atendieron de maravilla.
Es pequeño pero muy acogedor. La comida excelente y el dueño que te atiende es honrado porque desde el principio que te dice el menú te aconseja para no pedir màs de la cuenta, cosa muy extraña en la época que vivimos en la cual todo el mundo va a hacer caja. Siempre está pendiente de cualquier necesidad e incluso nos invitó al postre casero. Una maravilla de persona. Un 10 porque no le puedo dar màs. Gracias por todo ️
Joya escondida. Vinimos por casualidad y acertamos de pleno. Sitio totalmente diferente a lo que Avilés te puede ofrecer. Comida casera y abundante a un precio económico. Lo mejor la atención del dueño.
Nuestra visita a sido de sobresaliente! Buena comida, buena bebida, buen ambiente, precios muy asequibles y sobre todo buen trato. José súper atento, simpático y honesto! Es como comer en casa!
Todo un placer y una experiencia conocer a D. José Luis Fernández y a su familia (tal y cómo él describe a sus clientes) Ni un gramo más que lo que te apetezca. Ni un céntimo de más y toda la calidad inmensa de la experiencia. Cualquier cosa estará buenísima, seguro, y para todos los bolsillos. ¡Qué albóndigas, Dios mío! Y encima, va y te regala su bizcocho casero mantecado en el postre. Lo mejor, su conversación y la calidad humana. Servicio en el estado del arte. De lo que ya casi no queda. Hay que ir. Hay que conservar este tipo de Hostelería cercana, añorada y para todos. Felicidades, Jose.
Decepción, comentarios totalmente fuera de la realidad. Tienen 6 platos inundados en patatas, sin sidra y con el camarero descalzo y tomando. Es económico pero no repito ya que por Avilés hay sitios mucho mejores para comer
Somos clientes habituales desde hace varios años. Poco que añadir a lo que hay publicado, trato excelente, comida casera y exquisita y precio muy ajustado. Un lugar al que siempre apetece volver, como nota adicional, vamos con un niño pequeño, la atención a los mas pequeños es excepcional, siempre tiene un detalle con ellos.
INCREÍBLE! Esa es la palabra, le doy 5 estrellas porque no hay más, el trato inmejorable súper atentos, la comida riquísima, como la que hace tu abuela que te chupas los dedos pues igual, el precio muy barato para lo bueno que está, sin duda repetiré si vuelvo a aviles, enhorabuena por el local, por el trato y por la comida, un 10!
Trato inmejorable, poca variedad pero raciones grandes, ricas y cuidadas. Lugar céntrico pero muy tranquilo, calle sin tráfico y poco transitada, mi hijo podía jugar en la calle mientras comíamos. Volveriamos.
Comida casera muy rica, tiene poca variedad pero todo exquisito. Callos, longaniza, albóndigas. Todo ello acompañado de patatas. El dueño Jose muy cercano, preocupado por como estás en todo momento. De postre te da mantecado típico de Avilés que está riquísimo. Precio inmejorable
Fuimos a las 14.45 para comer dos personas ya que habíamos visto en TripAdvisor que era recomendacion. Nos dice que esta el solo y ahora no puede atendernos (había solo dos mesas ocupadas), y que a partir de las 15.15 nos atiende. Lo entendemos y le pedimos que mientras tanto nos ponga dos cervezas para esperar, pero nos dice que imposible porque esta el solo (no se cuanto tiempo se tarda en poner dos cervezas.). Al final nos fuimos al bar de la plaza de al lado y con mala experiencia por no querer atendernos.
Sencillo pero bueno. Propietario amable y sincero, si os recomienda algun plato o sobre la cantidad hacerle caso prefiere ganar menos pero quedar bien.
Comida casera asturiana abundante y con productos naturales. El picadillo excelente y con muchas patatinas. Lo mejor, sin duda, el trato amable y servicial de su dueño, José. Un saludo desde Valencia.
Pequeña tasca con encanto. Apenas 6 mesas atendidas con mimo por los hermanos José y Casimiro, carta muy limitada (embutidos espectaculares, callos caseros, cachopo de la casa, albóndigas, longaniza de Avilés y picadillo, todo ello realmente casero), pero para qué complicarse si son productos fantásticos, raciones abundantes, y precios más que asequibles. El vino de la casa estupendo, pero dejarse aconsejar pues disponen de vinos fuera de serie.
La mejor parada para comer en todo el norte fue en la Viñuca. El dueño entrañable y atento durante toda nuestra estancia. Raciones grandes a muy buen precio y con sugerencias personales muy acertadas. Sin duda, si pasas por Avilés o cerca vale la pena hacer un alto en el camino para comer en la Viñuca. Un gallego y una valenciana muy agradecidos por el trato familiar, volveremos sin duda alguna.
Lugar pequeño muy acogedor y muy familiar. Buena comida, no hay una carta extensa pero lo que tienen está todo muy rico. Los dos hermanos que lo atienden muy majos. Recomendable.
Nos atendieron muy bien. Los dueños fueron muy amables disculpándose por estar un poco desbordados y no podernos ofrecer todo lo que les hubiese gustado. Las raciones que comimos muy ricas y el trozo de bizcocho casero que nos dieron con el café muy rico también. Sí quereis una comida más informal a base de raciones, sin duda lo recomiendo.
Buenas raciones, muy ricas y muy buen trato. Aunque Jose taba coxu, tratonos muy bien y con una sonrisa en la cara siempre. Que descubrimiento en Aviles.
Parada obligatoria en Avilés, para comer y tomar unos vinitos totalmente recomendable comida casera el picadillo, las albondigas los platos de buen embutido y el mantecado el mejor que he comido.raciones abundantes y el trato de jose y casimiro te hacen sentir como en casa.
Great food, super friendly, run by two brothers. Really nice atmosphere and although I didn't speak the language I ordered a nice large piece of meat. The meal was delicious and the owner was sure everything was fine. He really put some effort in it and made you feel at home. Don't forget to bring cash because you can't pay by card.
Un gran descubrimiento, sitio muy acogedor gracias a la amabilidad del servicio, en especial a Jose que te hace sentir como en casa, comida muy casera, da gusto la presentación de los platos, parada obligatoria sin duda.
Bar de los de antes. Producto fresco. Cantidad y calidad. El dueño muy cercano. Trabajan 4 platos pero muy cuidado. Muy satisfechos con la experiencia. Muy bien de precio. Nos invitaron a los cafes y cerramos con un mantecado Casero
Muy cutre y olor a fritura tremendo. Salí por patas. El resto de clientela muy grosera, no nos quitaban ojo. En Asturias se confunde frecuentemente comer mucho con comer bien.