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La comida escasa y no demasiado buena (todo son gustos), los precios bastante altos, no fueron demasiado simpáticos, todo muy viejo, mucha telaraña y humedades. La banda sonora era reggaeton o similar, no muy asturiana (también cuestión de gustos), es un llagar no una discoteca. No creo que volvamos. Una pena.
El lugar muy bonito. La comida genial. El señor (el dueño quizás) que nos hizo la visita guiada decepcionó un poco. No tenía una presencia muy limpia que digamos. Al explicarnos un poco el procedimiento de como se hace la sidra y eso se empeñaba en convencernos que solo mujeres beben sidra. Que los hombres beben cervezas. Aluego pasó a la historia del llagar y fue interesante hasta que ha landó de lo difícil que es encontrar gente para trabajar, suelta de la nada la palabra "esos moros" y empieza un un discurso propio de Vox. Ya sabéis: que si las ayudas, que si las paguitas. En ese momento yo ya desconecté. Esos discursos no proceden y no tienen nada que ver con el negocio, más bien perjudican. Yo por mi parte no volveré a ese Llagar.
Ayer estuvimos cenando y la verdad que nos fuimos encantados. Buen sitio para tomar algo al aire libre y mucho mejor para comer. El trato del personal fenomenal. Sin duda volveremos.
Lugar agradable, comida bastante buena y abundante, lamentablemente el servicio muy escaso y por ende lento, muy lento, tardaban tanto en atender que se me hizo eterno, de ahí en quitarle dos estrellas
Para compartir entre dos personas unas zamburiñas y una parrillada. Amplio aparcamiento y amplia terraza; yendo sin reserva nos atendieron muy bien y rápido. El precio bien para la cantidad y de calidad la carne muy bien aunque las zamburiñas las he probado mejores, demasiado aceitosas (para mi gusto), no obstante estaban ricas de sabor.
Penoso, hemos hecho un evento te cobran el cubierto como tal, y luego te ponen una tortilla congelada malísima, raciones rácanas y bastante pobres de calidad. El pescado unos fríos y otro no, la carne estaba buena, y postre aceptable. El servicio malísimo mientras los adultos comíamos los niños esperando, y luego les traen lo que les parece. La verdad que nos trataron bastante al trancazo y hombre cuando uno hace un evento, y pagas más de 50€ por cabeza esperas al menos que la comida no sea congelada, que esté caliente y que no sea rácana. Con la bebida más de lo mismo, en fin para no volver ni yo ni ninguno de los que comimos, la sensación entre todos fue unánime.
La comida mala, mala, mala. No salvo ningún plato. El servicio bien, lentos pero amables. No tienen mucha idea de servir pan para celíacos. Me lo sirvieron sin el envoltorio. Evidentemente le di la vuelta. A mi parecer tienen mucho que mejorar
La última una cena con los compañeros, menú 2. Los tortos buenísimos, como siempre. El bacalao de lujo. El entrecot de vaca mantequilla, y la quinta estrella no se la llevan porque la sangría de sidra. Lejos de estar mala, que no lo estaba, no daba el nivel de lo demás puesto en mesa. Igual es que soy un poco repunantucu, porque jarras se bebieron a torcer. Jajaja
Muy maltratado en las opiniones, pues a nosotros nos debió tocar el día bueno. El propietario nos hizo la visita guiada al lagar, completo, puntual y sin prisas. Al final decidimos comer allí, y nos atendió una camarera amable y competente. Comida bien y precio razonable. Buena experiencia para mi familia.
Personal muy amable, espacios grandes, zonas de juegos para niños, comida correcta. Hemos encargado un menú de espicha, y comida muy variada, bebida lo mismo, me faltó un postre de verdad, ya que únicamente nos pusieron queso azul con dulce y nueces. Un taxi desde Gijón hasta allí son unos 12€ y la vuelta 20€. Lo que también es un hándicap.
Amplio jardín por lo que es un excelente sitio para ir con los peques. Nos tomamos unas sidras y pasamos una tarde noche super agradable. La cena bien, sin mas.
Hemos hecho la visita al llagar y luego el menú degustación y ha habido varias cosas que no nos han gustado. Primero cuando llegamos y confirmamos las personas que ibamos a ser, ya empezaron las malas caras, 0 amabilidad. Luego la visita al llagar en tiempos de COVID eramos por lo menos 30, por favor, establecer aforos. La visita hecha monótona, soltando el rollo y con cero simpatía y sin hacerlo mínimamente interesante, para dormirse, es verdad que va con las personas y que seguramente estará cansado de soltar lo mismo cada día, pero sinceramente creo que se puede hacer de manera más amena. Luego el menú degustación de 30€ con la visita no lo vale, tuvimos para más inri un problema de que nos trajeron uno de los 3 platos con solo dos raciones para 5 personas cuando antes nos habían dado una para cada uno y cuando preguntamos por las 3 que nos faltaban, nos dicen que las dos raciones era para todos, me parece ridículo y si es así, DECIRLO cuando el camarero está sirviendo las dos raciones, tan fácil como decir que las dos raciones, son para todos, que por otro lado no lo entiendo porque las dos cazuelitas eran del tamaño de medio puño, feo detalle. Al menos salieron dos veces, una bastante borde a preguntarnos que si no era suficiente comida y luego la que supongo era la dueña con mejores modos a pedirnos disculpas, por eso no le pongo 1 sóla estrella a la nota. En conclusión, no lo recomiendo y por supuesto no volveré a ir, todo me dio la impresión de que no iba bien desde el comienzo.
Comimos ahí como opción de última hora, estábamos un poco reacios porque tenía algunas malas opiniones y después de pedir y comer, no las entiendo. Nos atendieron rápido, muy agradables y atentos y la comida estaba muy rica y abundante. De hecho no pedí postre porque estaba llena.
Llagar se come bien y precio no muy caro. Recomiendo el pulpo a la brasa. Tiene zona de Juegos para niños, amplísima terraza, amplio aparcamiento también.
Un llagar familiar muy acogedor, la visita muy agradable y con mucha información, se come muy bien, trato muy cercano, tienen comida para celíacos, para volver
Reservamos para las 14: 30 para 2 adultos y 2 niños, uno de ellos de sólo 2 años. Desde las 14: 30 sentados en la mesa y viendo como sirven a otros clientes. Nos ponen sangría y agua, pero sin vasos. Tengo que levantarme 20 minutos después a pedirlos. Cuando llegan las 16: 00 y aún estamos sin comer, los niños con un hambre considerable debido a las horas, se colma la paciencia, nos levantamos y nos vamos. Nos dicen que se traspapeló la cocina, cosa que puede pasar, pero lo mínimo es que salgan a avisarnos ó de la que pasa un camarero nos lo diga. Una pena, el sitio es muy bonito y la comida del menú tenía buena pinta. Pero tuvimos que "merendar" en vez de comer en un Burger King porque a esa hora ya no nos Dan de comer en ningún sitio. Espero corrijan esos fallos, porque no todos los clientes somos tan tranquilos y compasivos.
La carne de pésima calidad la atención malisima ademas de lentitud al servir las camareras en general bien menos una súper descarada por lo demás un lugar muy bonito!
Hace muchos años que somos clientes de este espectacular llagar y nunca defrauda. La cocina excelente (las croquetas, el cachopo, los tortos, el lacón y la tortilla, todo muy bueno). La amabilidad del personal es una constante. Los menus del dia abundantes y variados, además de exquisitos. Y por supuesto la sidra doméstica de las mejoras de Gijon, sin olvidar la sangria de sidra.
Buena opcion para visitar la fabricacion de la sidra asturiana. Llamar para reservar. Despues de la visita tiene un sitio agradable para tomar algo o comer alli. No esta muy lejos y la zona es muy agradable!
Quería dar las gracias a Carmen de como se comporto con nosotros en todo momento Para que todo saliera de 10. Nos lo pasamos genial todos, buen sitio para celebrar una boda familiar en todos los sentidos. Sin ninguna duda volveremos
Encantador, muy tranquilo, con zona de juegos para los niños. La comida fabulosa, un lugar espléndido para ir con familia o amigos. La camarera que nos atendió es un encanto. Completamente recomendable.
Hice allí la comunión de mi hijo y la atención fué lentisima. La gente esperando por los platos. Era espicha y iban sacado las cosas de 2 en 2. Cómo la gente comia según ellos despacio, pensaban que no teniamos hambre. Pero es que las costillas, criollo y lo bueno que era lo que estaban esperando los invitados lo dejaron para el final, cuando estaba todo el mundo cansado de estar casi 2 horas a la mesa
Fui a una espicha de unos 60 personas con niños esta misma tarde y la sidra malísima, tipo sidra fiesta de prao, la sangría de sidra mala no lo siguiente, en mi vida probé una sangría de sidra tan mala, el servicio pésimo x la falta de personal, luego no tenían ni un mísero pincho en la barra, si pedías un café con gotas te decían que te lo cobraban, les pedías un chupito de baylies y te ponian un chupito de crema que no era baylies y no te lo decían xo te lo cobraban como tal, después de cobrarnos 25 euros por persona por una espicha que era todo fritos de mala calidad, los entremeses malísimos, la empanada de supermercado, a excepción de las croquetas que estaban muy ricas y el postre la tarta de queso que también estaba bien, lo demás todo fritanga, el café que ponian en la espicha era de puchero y tardaron 1 hora en servirlo, con lo que la gente al final iba a la barra y lo pedía pagándolo y así, si te lo servían en el acto, En definitiva de los peores sitios para ir a comer y beber sidra
Lugar muy bonito, pero la comida, de lo peor que he comido en Asturias, la tortillas de patatas, frías, la Fabada medio hecha y la morcilla por el centro estaba congelada. He estado 4 días en Asturias y hemos comido súper bien, menos aquí. Un descontrol total en el servicio.
Este domingo pasado celebramos la comunión de nuestra niña Violeta y estuvo genial fue todo de 10 tanto la comida como la atención de los camareros y sus dueños Carmen y Miguel. Los niños tuvieron animación y se lo pasaron fenomenal vamos un día que mi hija recordará siempre. Muchas gracias por todo.
Raciones muy abundantes (quizas demasiado) la comida riquísima, bien preparado todo, y sin pasarse de precio, mucho sitio para ir con niños tienen parque con tobogan y cama elástica, y un parking gigantesco, la sidra genial, y el trato muy agradable. Para volver todas las semanas. 100%recomendable (Eso si, ir con hambre, porque salis «rodando») Ñam! ñam! ñam!
Todas las celebraciones que hemos hecho aqui han sido un exito. El trato, inmejorable, la comida, sobre todo el asado, buenisimo y el sitio genial. Todo han sido facilidades para que todo saliera bien. Gracias por todo. Os lo recomiendo, de 10!
El sitio es agradable, con buen tiempo muy soleado y con actividades para ir con niños. Pero.por lo menos, en el menú / espicha del día de hoy, cantidad correcta pero POCA calidad en los platos. El servicio de camareros correcto. La opinión de un grupo de 40 personas SUSPENSO
Empanada y embutidos de supermercado, mala atencion, muy lentos. Sitio de guiris con recibimiento de danzas folcrokikas y la comida de 3 sobre 10. No volvere ni recomendare