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El sitio muy bonito, decorada con gusto, la comida muy muy muy buena…. Guillermo te mando un abrazo y decirte que lo estáis haciendo muy bien, los pimiento rellenos de Pixin espectaculares! Y la tarta de queso de lo mejor que he probado! Ni yo lo hubiera mejorado, gracias y nos vemos pronto Mar.
13 agosto 2023. Pedimos pulpo a la plancha y a parte d tirante y seco, escasísimo. Tres mitades d patas pequeñísimas y media patata cocida dura. De vergüenza. El camarero muy amable.
Hemos acudido mi chico y yo en varias ocasiones en los últimos meses. En todas ellas, una grata experiencia. La sidra de denominación (irrisoriamente más cara que la "normal", merece mucho más la pena) entra solita, y las raciones para acompañarla (en nuestro caso hemos probado las bravas, los huevos rotos y el queso ahumado) están buenísimas. A ello acompañan un excelente y campechano servicio. La próxima vez, iremos a probar sus arroces. Riquísima la tarta de queso (de momento, el único postre que hemos probado)
Un arroz con Pitu de calefacción, absolutamente espectacular. Los pimientos rellenos también buenísimos.merece totalmente ir.reservar antes que está siempre lleno
El peor arroz que he comido en toda mi vida y 62 euros las 2 raciones. Pedimos croquetas de jamón para amenizar la espera y nunca se me ocurrió que por 9 euros me las dieran congeladas y quemadas. El arroz llegó pasado, seco y como la muera de haberle hecho con el agua de cocer el marisco, con un poco de ajo pero sin sofrito ni sustancia. Pagamos un total de 93 euros por el arroz, las croquetas, un café y un vino de 15 euros. Cuantos menús del día son mucho más dignos y por la mitad de precio.
Ni calidad, ni servicio, ni precio. Un domingo todo Llanes abarrotado, y este "restaurante vacío" no os dejéis engañar, el sitio por fuera es aparante, todo lo demás deja mucho que desear.
El lugar es muy agradable. Pedimos tomate aliñado muy bueno, ahumado de pria aceptable y la decepción llegó con las mini hamburguesas de cordero. Estaban quemadas con un sabor desagradable y solo venían con rucula. Se lo comentamos al camarero y nos dijo que era así. La tarta de arroz con leche de postre nos sorprendió gratamente aunque no volveremos.
Experiencia nefasta. Tambien digo que culpa nuestra por sentarnos ahi, porque por algo estaba vacio. Croquetas congeladas y encima quemadas, Patatas tmbien congeladas.y encima precios nada baratos para lo que ofrecen. Personal seco no, lo siguiente
Pasamos frio porque nos dieron mesa de dos y estaban junto a la puerta (que estaba abierta de par en par, a pesar de no estar obligados a ello por salud pública). Habia mesas de cuatro mas dentro del local, estaban libres, pero no nos dejaron sentar alli. Pedimos atun y no habia, pedimos entonces otro plato y tampoco les quedaba. Asi que no quedaban muchas opciones, ya que la carta tampoco es extensa. Lo servido estaba rico.
Relación calidad precio, UN LUJO! Probamos un queso Cabrales que estaba brutal! Y luego unas nécoras a la plancha riquísimas! Además una atención exquisita, te aconsejan en todo momento y dan su punto de vista como profesionales que son! Volveremos sin duda y a conocer su hotel también! Un millón de gracias!
Decoración cuidada. Acogedor. El personal atento y profesional. Disfruté un plato de cordero al vino tinto que estaba espectacular. Muchas ganas de volver. Y el entorno.no tiene igual. . Foto hecha con móvil.
Precios excesivamente altos para la comida que es, 10 euros por unos trozos de pollo, 14 euros por unos calamares y 20 euros por un cachopo de ternera con cecina y queso, al cual le faltaba la ternera. Tienen una cocina abierta que se ve desde el comedor y ninguno de los cocineros llevava mascarilla, ni siquiera el dueño, solo el camarero que nos atendió. Finalmente pedimos unos cubatas y nos los trajeron ya preparados, cuando los cubatas siempre se preparan delante del cliente, no le echaron ni una triste rodaja de limón o naranja. No repetiremos.
Mi experiencia en este lugar ha dejado mucho que desear. Fuimos seis amigas y pedimos varios entrantes que estaban únicamente pasables. No obstante, la sorpresa llegó con las mini hamburguesas de cordero. Tardaron mucho tiempo en servirlas y cuando por fin llegaron, estaban literalmente calcinadas. Se lo comentamos al camarero y nos dijo que no estaban quemadas sino marcadas: ( Solicitamos otras cuatro y nos dijeron que no les quedaban. Una decepción.
Qué bien hemos cenado. Unas croquetas de jamón y costillas mar&más. Buenísimo. Y de los postres qué decir. Copian de chocolate y yogourth artesano. Totalmente recomendable.
Comida deliciosa (pitu de caleya), sidra fría y nos han traído el soporte automático que hace que la bebida sea más sabrosa. Postres muy ricos también y con buena presentación. Decoración del restaurante muy elegante, limpieza excelente (incluso el baño), servicio muy rápido. Precios medio- Alto (el pollo) pero bien invertidos, por fin hemos comido muy bien en Llanes. Recomiendo este restaurante!
De la carta les faltaban varios platos, (de cuchara solo tenían 2 de 5 y de postre parecido). El arroz negro pasable (exceso de aceite), el tomate y la tarta de queso estaban buenos. Lugar para comer bastante mejorable.
Cuidan mucho el producto es local.muy recomendable las verdinas con berberechos y las amarillinas con langostinos.una forma distinta de comer las extraordinarias legumbres de por aquí.
De entrantes, anchoas del cantábrico, las sirven con la lata. De principal, arroz negro con calamares y gambas, dos gambas, una por comensal, y algunos trozos de calamar en el arroz. Me siento estafada.
Entramos por casualidad. Sitio muy bonito, decorado con acuarelas de Llanes. Platos bien elaborados y muy bien presentados. Recomendable 100%. Buena relación calidad precio.
Restaurante aparente, bien acondicionado y buena situación. El servicio normal. La comida pésima, croquetas de las congeladas de toda la vida tipo la cocinera, 9€, bocartes servidos en una balsa de aceite y no frescos a 12€. Etc, lo mejor el pan, sin duda un sitio para no volver.
La experiencia no pudo ser más traumática. Este tipo de restaurantes con este servicio y esta "comida", flaco favor le hacen a la maravillosa cultura gastronómica de la zona. Suerte que ya la conocemos. Lo fácil sería caer en la mala generalización. No es así.
La cosa empezó mal. Desde la hora a la que nos dieron la reserva hasta sentarnos en la mesa, 45 minutos de pie en la puerta. Otros 30 minutos más para que nos tomasen nota. Después, el gerente nos comenta que no sirven paellas (siendo una de las especialidades de la casa). Pasan 40 minutos y vemos como a la mesa de detrás se les está sirviendo 2 paelleras.
Los entrantes pésimos: patatas congeladas (incomprensible), choco frito (sin más) y ensalada de bonito. Todo de calidad justita, por no decir mala.
El colofón llegó con el segundo: Pedimos 4 platos de MERLUZA DE ANZUELO. Suponíamos que iba a ser fresco (la zona es inmejorable). A la media hora el gerente nos comenta que solo tiene para 3 platos, pero que lo había dividido en 4 y por lo tanto solo nos iban a cobrar 3. ¡Muchas gracias! El pescado literalmente no sabía a nada. Por no hablar de la presencia. Uno de los "trozos" parecía haber sido cortado con cortasetos. Para más inri le pedimos sal (por probar si cogía algo de sabor) y traen sal gorda. ¡Qué desastre!
Lo mejor de la cena hubiese sido el vino blanco "Mar de frades" de no ser por un comentario final bastante desafortunado por parte de la camarera: "¿Qué, no vais a querer la otra botella? " Obviamente en un principio pensábamos haber pedido 2, pero al ver el tema decidimos marcharnos rápidamente sin ni siquiera probar los postres.
Por los casi 30€ por persona pienso que se trata de una broma de mal gusto.
Nos encantó. Concepto diferente para salir del típico asturiano sin perder el sabor de la tierra. Los platos no son abundantes pero la calidad es buena. Destacamos los pimientos rellenos, el Gochin astulcelta y la tarta de queso (muy diferente al resto pero espectacular) La camarera que nos atendió súper amable.
Un restaurant muy bien decorado, La comida de muy buena calidad y en cantidad muy correcto. En cuanto al servicion una chica latina espectacular que me encanto. Muy contentos con todo. Nosotros regresaremos.