Palacio de la Magdalena

Esta muy bien, fui a ver un amigo que estaba hospedado y todo muy bien, le falta un poco más de calidad al bar, pero la cocina del hotel está muy bien

Es un sueño! Por fuera no dice lo bonito que está por dentro. La habitacion era grande, sin parecer una sala de baile, decorada muy finamente. Aunando historia y modernidad. Solicitamos un masaje para ese mismo día y nos lo dieron sin problemas, con lo que vimos la zona del spa, que es preciosa.
Cenamos a la carta, muy bien por cierto. Unas croquetas, cremosisimas, les faltaba un pelín de sabor, pero buenísimas de todos modos. Pulpo con patatas revolconas. Muy buenas y de postre tarta de queso y arroz con leche, que tienen mis bendiciones, pero si las de mi marido. El desayuno, impecable. Muy variado y abundante. El personal del hotel super amable. Realmente recomendable. Nosotros volveremos sin duda.

Sitio muy bonito, fuimos a una boda y nos alojamos en la casita que tienen donde admiten perros, la comida, la limpieza, el personal y el trato inmejorable

Uno de los mejores hoteles de Asturias en su categoría.
Ubicado cerca de la playa de Muros del Nalón, en el hermoso enclave de Soto del Barco y muy cercano a la desembocadura del río Nalón, en la Ría de San Juan de la Arena, posee unas vistas espectaculares, dignas del palacio dónde está enclavado.
Sus celebraciones de boda tienen fama más allá de Asturias, y sus fiestas de Navidad, San Valentín, etc atraen a turistas de España y de toda Europa.
Las habitaciones son amplias, luminosas y muy cómodas.
A destacar su Spa, que es visitado por muchas parejas de novios y que rezuma tranquilidad y lujo.
Su elogiado restaurante y su cafetería acogen cantidad de eventos, desde convenciones y bodas hasta torneos de Ajedrez.
Por hacer mención especial, el personal es extremadamente educado, discreto y servicial.
En suma, un hotel de lujo a un precio razonable en plena costa Asturiana y a cuatro minutos de la autovía del Cantábrico.
Repetir es un placer.
10 sobre 10.

Estuvimos tomando un café, en la terraza.
Hotel muy cuidado y agradable, con unas vistas preciosas.

Un hotel precioso, con detalles de muy buen gusto y donde se ve la historia del edificio pero añadiendo detalles actuales y asturianos en la decoración. La suite que ocupamos muy amplia y cómoda, con muy buenas vistas sobre la desembocadura del Nalón.
El restaurante de 10 una cena muy sabrosa, con buen menú, la atención de los camareros muy profesional y amable.

Magico. Todo maravilloso una boda d 10.gracias a todo el personal en especial a beni. Nuestro camarero k es el mejor

Un palacio muy bonito y acogedor. Las vistas de la habitación preciosas. Para mi gusto le falta actualizar un poco las habitaciones. En el baño le faltan muchos detalles, flojea bastante.

Le regalé a mi madre un circuito Spa y genial, la chica que nos atendió excelente! Y en general un experiencia muy buena.

Gracias
Kali

Fui el 29 de Abril a una boda y estupendo. El entorno, la comida, el servicio etc. De las habitaciones no puedo opinar no las conozco. El Palacio de la Magdalena lo recomendaría sin dudarlo.

El circuito del spa está muy conseguido (sales como nuevo), los camareros son muy agradables, la comida excelente y dan un trato genial.

La relación caludad/precio en el restaurante es desequilibrada. Desequilibrio en favor de la calidad

Muy bonito Palacio convertido en hotel. Estuvimos una noche en la habitación de lujo "romántica" y la verdad es una pasada. El personal muy atento, tanto en la recepción como en el restaurante y cafetería, un diez para ellos. La cena abundante y muy rica, igual que el desayuno. El restaurante está fuera del palacio y es el clásico de bodas, por lo que pierde el encanto que tiene el hotel. En cuanto al spa, está bien, aunque en las fotos parece más grande de lo que en realidad es, un poco justo, aunque si coincides con poca gente no termina siendo un problema. En fin, recomendable sin duda.

Muy cuidado y conservando todo típo de detalles de lo que fue un palacio de su época y cn gran aparcamiento.

Un sitio muy cuidado y acogedor. Personal agradable y profesional. Precios ajustados en relación a su calidad.

Impresionante finca y edificio, con vistas maravillosas del río Nalón. Buen sitio para comer y gran profesionalidad de los empleados.

Alojamiento en antiguo Palacio. Desayuno continental por 5€. Tiene Spa y restaurante. Cerca del aeropuerto y junto a los dos pueblos que abrazan la ría del Nalón en su desembocadura.

Espectacular Hotel. Muy aconsejable. Lugar inmejorable. Instalaciones de 5 estrellas. Trato cercano. Habitaciones de sueño. En fin. UN HOTEL

El hotel está situado en un punto con fácil acceso a zonas de interés para visitar. El lugar es tranquilo y silencioso. Las habitaciones son cómodas y están bien equipadas, buen mobiliario. El patio / claustro central es especialmente agradable. Un buen hotel para descansar, y disfrutar si además se tiene en cuenta el servicio de spa.

Fuimos al spa, es pequeñito y algunas cosas no iban bien. La recepcionista muy amable.
Los jardines cuidados, el hotel bonito para ver.

Menú EXCELENTE. Buen producto y buena y delicada elaboración. Desde el primer plato hasta el postre todo muy muy rico. (Incluido el vino y el pan) cantidad suficiente. 16,5€. Amplio salón y atención educada y amable. Sin duda un lugar para recomendar

Hicimos hora y media de spa (chorros, jacuzzi, baño turco, sauna, pediluvio, cama caliente), cena excelente (menú ejecutivo de ensalada de salmón, carrilleras y pudding de queso), y desayuno continental al día siguiente. Todo muy bien y a un precio razonable (170€ pareja). El hotel es un palacio del s. XVIII espectacular y con vistas al río Nalón. Para repetir.

Genial, Palacio antiguo con vistas impresionantes.
El menú de la cena es de gran calidad, un trato exquisito y no escatiman. El punto de mejora podría ser el desayuno ya que los zumos no son naturales y la bollería parece ser industrial.pero es un lugar muy recomendable

Marco precioso, muy buena tarifa y habitación impresionante.
Muy limpio y personal súper amable

El hotel es muy bonito. Las vistas muy bonitas. La comida, desayuno y cena muy buena con atención en mesa y unos camareros muy atentos. Las habitaciones grandes. El SPA muy bien. Mucho sitio de aparcamiento y grandes locales para grandes eventos. Recomendable. Nosotros volveremos

Hotel Palacio de la Magdalena**** (2007), en la zona alta de Sotu'l Barcu (Asturies). Ocupa como hotel el Palacio de la Magdalena o Casa Ponte o Llano-Ponte (mediados s. XVIII), cuyo promotor fue don Rodrigo de Llano Ponte a expensas de su tío el canónigo avilesino don Juan de Llano Ponte (1727-1805), obispo d'Uviéu (1791-1805). Llamado también palacio del marqués de Ferrera, por su propietario del s. XX. Gran mole de planta casi cuadrada de 29,40 x 28,56 m.y líneas simples con múltiples vanos. Capilla de Santa María Magdalena, a la izquierda de la fachada principal, con escudo del linaje. Su coste fue de unos 40.000 ducados. Fue ocupada por los invadores franceses y aquí pasó una noche de regreso de Coruña el sanguinario mariscal napoleónico alemán Michel Ney (1769-¿1816?), duque d'Elchingen y príncipe de la Moscova. Hoy es un precioso hotel de 37 habitaciones. Restaurante 'Ría del Nalón', Spa. Bodas, convenciones y comuniones. Un sitio digno de elogio con unas vistas increibles. Buena cocina y trato excelente. Guardo un buen recuerdo del tiempo que aquí pasé.

Ubicación magnífica. Muy buena la atención y la comida riquísima. Excelente la relación precio/calidad

Comida muy bien elaborada a unos precios razonables. Servicio amable y correcto y el palacio acogedor y buenas vistas. Para repetir

Bonito restaurante y buena cocina, sin complicaciones. Buenos precios tanto a la carta como de menú del día.

Desayuno buffet entre amigas, lugar encantador, sobre todo la atención de Raquel, para repetir, de 10.

Me encantó el hotel, el personal atento y encantador, con la única intención de que te sintieras como en casa. El personal del spa muy atento, estupendo masaje relajante y un ambiente tranquilo para desconectar. Su restaurante personal atentisimo y encantador, su comida muy rica, espléndida. Sin ninguna duda repetiremos.

No recomendado para nada. Servicio pésimo. Como si no les importaramos. Incluso demasiado selectivos. Trato arbitrario y con desgana. Por favor, ahorraros la gasolina y la calderilla.

Es el lugar ideal para celebraciones de todo tipo con amplísimos salones, además de su bellísimo hotel, todo ello con un marco natural incomparable, con vistas a la desembocadura del río Nalón.

Un hotel precioso, con buenas instalaciones y buena atención. Estilo clásico en un entorno bonito. Tiene sos y masajes. La cocina es mejorable.

Lo mejor el SPA que tiene unos horarios muy amplios y un trato fantástico por parte del personal. También las vistas desde la habitación y la calidad de los platos del menú y también del desayuno.

No me gustó el trato del maitre del restaurante y que aun estando alojado en el hotel, tengas que reservar para cenar porque no hay casi mesas.

El hotel es lo suficientemente grande para acondicionar más espacios para las cenas.

Consejo
Si se quiere cenar en el hotel, es aconsejable reservar por la mañana aunque en recepción no te avisen de este detalle.

Un lujazo. Spa de 90 minutos y hotel estupendo. Por poner algún pero, me esperaba mucho más del desayuno buffet, con más variedad, dulce y salado, y en la máquina de café salía casi todo leche. En el baño, el secador de pelo no tenía casi potencia. Por lo demás perfecto, pero no se lleva las 5 estrellas. Recomiendo cenar de menú en el hotel.

Solo visitamos la cafeteria, pero el sitio es espectacular, cuando cruzas la puerta parece que entras en una pelicula.la cafeteria es muy acogedora. La finca es enorme y muy bien situada, magnificas vistas de los pueblos de alrededor

Entorno idílico, conservado estupendamente el palacio, acogedor, buen trato por parte del personal

Magníficas instalaciones para celebrar todo tipo de acontecimientos, desde bautizos a bodas pasando por comuniones, sin olvidarnos de su Spa.

Hotel muy bonito con grandes visitas. Los trabajadores muy atentos y agradables. Las anotaciones amplias y baños con todo lo necesario. Restaurante magnífico. Muy recomendable

Un lugar turístico y de buena vista, disfruté de sus instalaciones por el Spa. 90 minutos de relax total, lo recomiendo, salir del Spa y luego darse una vuelta por el Palacio es lo mejor, tan su interior como exterior.

Spa y merienda, la tarde perfecta. Terminar una semana en modo relajado y con las pilas cargadas para la siguiente

Solo he estado en la cafetería. La decoración esta muy lograda. Personalmente a mi las cafeterías me gustan mas con sillas y mesas normales q con sofás, para tomar algo me es mas comodo que desde el sofá y una mesa baja.

Gran hotel con antigua decoración, sin embargo no valoro como 5 estrellas debido a la luz resplandeciente de la señal de emergencia de la habitación. Muy buen desayuno

Restaurante inigualable en precio y calidad. El menú ejecutivo en días no festivos es para repetir.

Menu de navidad, todo muy rico.
Servicio perfecto. Un lugar muy acogedor y tranquilo, ideal para disfrutar de una comia en familia.