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Arco o Pórtico de San Isidoro (s. XIII), en el Campo San Francisco d'Uviéu (Asturies). Portada románica de la antigua iglesia de San Isidoro. Trasladada. En 1770 se traslada la parroquia de San Isidoro desde su ubicación original -en la Plaza del Paragües, centro de la actividad comercial de la ciudad medieval- al Colegio de San Matías, en la Plaza del Ayuntamientu, donde hoy se encuentra. Desde esta fecha el templo original de San Isidoro funciona como tahona -panadería-; a ff. s. XVIII, templo y terrenos son vendidos al maestro de obras carbayón Manuel Secades, que luego pasará al Ayuntamiento. En 1922, la Junta de la Cocina Económica de Oviedo permuta su solar de la calle Quintana con el Ayuntamiento estos terrenos, ocupándose del derribo la Sociedad Cooperativa de Armeros para construcción de casas baratas, evitando por compra del Centro de Estudios Asturianos la destrucción del arco. En 1926 se decide su traslado, montado y restaurado por el escultor carbayón Víctor Hevia Granda (1885-1957) al Campo San Francisco, justamente en el lugar que hoy se encuentra.
El arco de la iglesia de San Isidoro es una auténtica joya que esconde el Campo San Francisco de Oviedo. Aunque su fecha de construcción no es precisa, existen referencias a él en documentos que datan del siglo XIII. Perteneció a la primitiva iglesia románica de San Isidoro, demolida a principios del siglo XX. Estaba situada en el lugar que hoy ocupa la Plaza del Paraguas y era una de las tres parroquias más antiguas de Oviedo, detrás de la de San Tirso y San Juan.
Arco o Pórtico de San Isidoro (s. XIII), en el Campo San Francisco d'Uviéu (Asturies). Portada románica de la antigua iglesia de San Isidoro. Trasladado. En 1770 se traslada la parroquia de San Isidoro desde su ubicación original -en la Plaza del Paragües, centro de la actividad comercial de la ciudad medieval- al Colegio de San Matías, en la Plaza del Ayuntamientu, donde hoy se encuentra. Desde esta fecha el templo original de San Isidoro funciona como tahona -panadería-; a ff.s. XVIII, templo y terrenos son vendidos al maestro de obras carbayón Manuel Secades, que luego pasará al Ayuntamiento. En 1922, la Junta de la Cocina Económica de Oviedo permuta su solar de la calle Quintana con el Ayuntamiento estos terrenos, ocupándose del derribo la Sociedad Cooperativa de Armeros para construcción de casas baratas, evitando por compra del Centro de Estudios Asturianos la destrucción del arco. En 1926 se decide su traslado, montado y restaurado por el escultor carbayón Víctor Hevia Granda (1885-1957) al Campo San Francisco, justamente en el lugar que hoy se encuentra.
Uno de los pórticos del convento de San Francisco. No está mal conservado, pero solo queda el arco y unas pocas piedras de alrededor del mismo. Está expuesto al aire libre en el parque de San Francisco por lo que si estás en Oviedo, te recomiendo que lo visites.