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Es un restaurante en las afueras de Oviedo zona muy tranquila tiene buena y variada cocina. El lechazo es muy rico y mantienen las medidas de seguridad sobre el covi
Primera vez que vamos, y una gran experiencia, El lechazo exquisito, atención, calidad, y unos postres deliciosos. Primera vez pero no la última repetiremos seguro.
La comida muy rica, pero si después de sentarte en la mesa, tardan algo más de 1 hora en servirte, ya se te quitan las ganas de comer. Una vez q empezaron a llegar los platos ya bien, pero al pedir el postre otros 25 minutos desde q recogieron el plato anterior, una pena pq se come bien, pero te amarga la comida la espera
Comida casera de calidad, buenas raciones y precio razonable. Postres caseros. Te invitan al café de puchero. El servicio, tanto para coger la comanda como para servir fue algo lento.
Ideal pour déguster les plats du terroir. Des tapas délicieuses, Viandes et poissons de première qualité Grand choix de vins choisis par le patron. Une terrasse spectaculaire et un service impeccable. Nous reviendrons.
En La Manjoya, parroquia de Oviedo, se esconde este restaurante que maneja muy bien el horno de leña, los potajes y el #caserismo en general. Una terraza que si el tiempo acompaña es una maravilla (también parte techada y terraza acristalada), y un interior agradable.
Horno por encargo (el lechazo es la especialidad de la casa), carta concisa, pero variada.
Impresionantes las croquetas (pedimos mitad jamón y mitad cecina y puerro), los chipirones al ajillo estratosféricos (con unas patatas deliciosas) y cachopo, en este caso de pastrami (muy buen pastrami y muy abundante el relleno) y Ahumado de Pría. Todo delicioso.
Servidora no es de postres, así que la tarta de queso que se pidió no sale retratada, pese a que era demasiado fuerte (mis preferidas, que sepa a queso, coñe!) para los que la pidieron y terminé comiéndomela yo.
4 personas 95€, saliendo rodando y bien hidratados.
Una delicia de sitio. Muy amables y la comida estaba riquísima. La carne estaba sencillamente espectacular, y merece la pena ir a tomar el cachopo de pastrami con ahumado de Pría. Muy muy recomendable. No os perdáis tampoco las croquetas de cecina y puerro, o los tortos.
Fui hace una semana a comer con un grupo grande de personas y desde el primer momento nos sentimos como en casa. Mientras esperábamos a pedir nos pusieron una tapa, esta vez nos tocó ensaladilla, que estaba deliciosa. Después pedimos unas croquetas que estaban deliciosas, diferentes sabores, todas ellas crujientes por fuera y con un sabor por dentro impresionante. El pulpo y los calamares más de lo mismo, riquísimos. Llegó el plato fuerte, lechazo. Se deshacía en el plato, no hacía falta ni usar cuchillos. Un sabor impresionante. Es un sitio totalmente recomendable. Además ahora han ampliado su terraza, lo que hace que se pueda disfrutar más del exterior que tienen, todo adornado y con chiringuito para servir bebidas. Una experiencia para repetir!
La comida genial y el servicio también. Le pongo una estrella porque hoy sábado tenían música en directo y ha sido insoportable, por favor no se puede comer con unos músicos gritandote al oido, literalmente. Nos han dado la comida.
Sitio habitual al que vamos cada vez que subimos, no decepciona nunca. El cachopo enorme y super relleno, el rollo de bonito muy bueno, las croquetas y el criollo delicioso. Ibamos 6 personas y salimos por 20 euros, 4 platos, 4 ensaladas sidra, agua, tintos de verano y café. Hay que conocerlo si o si
Lugar precioso y de atención cuidada y familiar. Si la atención fue lo mejor, sin duda la comida estuvo a la altura de la misma. Todo lo que pedimos estaba francamente rico y los postres muy muy buenos.
Un sitio muy bonito, con una terraza enorme, sitio de sobra tanto cubierto como al aire libre. La camarera muy amable y la comida buena en calidad y con buena cantidad. Recomendado.
Sitio agradable, buen servicio y comida buena en relación calidad-precio. Recomendable el lechazo al horno, las croquetas de jamón y los chorizos criollos. Resto de la carta también muy rica.
Creo que había poco servicio para la gente que había. La chica encantadora y muy efectiva, pero estaba atendiendo a un montón de gente ella sola. Es un pena por qué si no fuera por esto, el sitio sería de 10.
La comida ha sido espectacular. Hemos pedido una tabla de tres quesos asturianos, abundante y tremendos. Los chipirones estaban realmente buenos, tenían un toquecito picante que realmente los hacían muy sabrosos. Hemos pedido un torto clásico de picadillo también tremendo y riquísimo El cachopo, gigante de cecina y queso muy muy sabroso pero tal vez un poco salado para mi gusto. Los postres ha sido lo más flojete, pedimos un tiramisú que tenía demasiado cacao en proporción al bizcocho y el queso. Mis compañeros han pedido un café al que ha invitado la casa lo cual me ha parecido un detallazo. Sitio para volver y probar más cosas! Recomendable y con buenas vistas.
Delicioso. Muy buena cantidad, buen servicio y una vista a la sierra espectacular. Comimos carrilleras y estaban de cine! Lo demás que veíamos pasar en otras mesas tenía también muy buena pinta.
Comida muy rica, raciones abundantes, buena atención y un espacio acogedor tanto en el interior como en la terraza (ideal para disfrutar en días soleados)
Brutal. El mejor sitio calidad cantidad atencion y precio de Oviedo. Son muy simpaticos y la carta muy cuidada. El sitio es muy acogedor. El cachopo es descomunal de grande.
Estupendo restaurante de comida tradicional, con una gran calidad en los productos y una elaboración muy cuidada. Los precios son muy ajustados y las raciones abundantes. El local es muy acogedor y la terraza muy agradable. Funciona muy bien para celebraciones y grupos ya que te dan todo tipo de facilidades (opciones de menú personalizadas, platos preparados para compartir). Son especialistas en lechazo al horno, la carne es de muy buena calidad, el rollo de bonito muy rico, variedad de tortos, etc. El personal es atentísimo y profesional, siempre dispuesto a ayudar. Disponen también de una buena carta de vinos y se puede tomar sidra.los días soleados son una gozada en su terraza!
El pote asturiano parecía de lata nunca vi unas ganas tan pequeñas además me pareció demasiado tiempo entre cada plato servido. Las croquetas estaban bastante bien y el pulpo no demasiado.
Tiene una ubicación en un entorno natural con buenas vistas para el que le guste la montaña. En lo referente a la comida, expectacular. Cocina muy bien tratada, abundante y con precio en consonancia con la calidad. Lo recomiendo. El lechazo hecho en horno de leña, buenísimo. Eso sí, hay que encargarlo con tiempo.
Acogedor restaurante a las afueras de Oviedo, con una terraza muy agradable cuando hace buen tiempo. Buena relación calidad precio y estupendo trato al cliente.
If you are in Oviedo you must eat at Casa del Dago. The food is AMAZING (especially Maria's croquettas)! Currently open Thursday through Sunday. Check hours to make sure, as they may change.
Buena disponibilidad para reservarnos un hueco aún teniendo el comedor lleno y eso que llevábamos 4 carritos. Deliciosa comida y el trato inmejorable. Recomiendo dejar hueco para el postre, todo de 10!
Que buen lugar para comer! La comida es fantástica y tienen un cenador exterior muy bien puesto. El servicio a la altura. Recomendable las croquetas de jamón, el cachopo y el lechazo.
Buen sitio para comer, cerca de Oviedo, con raciones muy ricas, el lechazo tambien nos lo recomendaron pero hay que reservar con anterioridad. Comedores amplios (éramos 7 adultos y cuatro cochecitos de bebés), atención y servicio buenos y calidad de la comida muy buena.
Los camareros muy atentos y la comida buenísima. Fuimos con un perro pequeño, y no tuvieron problema en que comieramos en la terraza. Pedimos pantrucu, chorizo criollo y pluma ibérica. Recomendable 100%.
Un restaurante acogedor situado a las afueras de Oviedo, en La Manjoya. Cocina tradicional casera con un toque personal magistral. Platos de cuchara como el pote de berzas, lechazo o unas croquetas de boletus, sin olvidarnos de los postres como el arroz con leche.simplemente deliciosos. El trato del personal es cercano, amable y correcto. Consta de restaurante principal, una terraza cerrada acristalada muy agradabla y zona exterior de mesas. Tiene parking, aunque no es muy grande. Es conveniente reservar puesto que los fines de semana está muy solicitado.
Me encanta este sitio, por el trato amable y familiar, es acogedor 100× 100. Ademas todo riquisimo, adicta a todas las variedades de tortos de maiz y unos postres caseros espectaculares