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Este lugar es mágico, te remonta a varios siglos pasados, su arquitectura está intacta, resalta su belleza con la combinación del río que pasa por debajo con un color verde esmeralda que lo hace único, además tiene colgando la cruz de la victoria de Asturias, un símbolo emblemático de la historia de Asturias.
The approach to the bridge was empty, I mean really empty, as in no one was anywhere near it, just me, so I climbed the bridge. Nearly a year later, AND IT'S STILL STANDING! And so am I.
Increíble puente romano en perfecto estado y que ofrece unas vistas impresionantes del pueblo, el río y el valle de cangas, el paseo por el mismo te transporta a otra época.
Precioso puente romano rodeado de un entorno natural alucinante. Hay posibilidad de hacer rutas adyacentes, alguna haré cuando vaya con más tiempo, estoy seguro que merecerá la pena.
Puente Romana sobre el río Sella, se puede subir a lo alto para ver las vistas del río. También se puede acceder a ambos márgenes para observar la imponente Cruz que cuelga del puente.
Un sitio que no te puedes perder si vas de visita a Cangas de Onís. Una maravilla que aún sigue en pie tras siglos de historia y que aún se puede cruzar.
Una de las visitas imprescindibles de Cangas de Onís e icono de los asturianos por su belleza arquitectónica, su entorno, y por llevar en su parte central colgada la cruz de la victoria.
Es uno de los sitios emblemáticos d'Asturies, el puente sobre el río Sella, es la señal de identidad de Cangas de Onís, la primera capital del Reino de España. Imprescindible.
Conocido también como El Puentón, el Puente Romano de Cangas de Onís es medieval (alrededor del siglo XIII), pero asentado sobre otro anterior, este sí, romano. Cruza el río Sella y es un emblema no solo de Cangas sino de toda Asturias. De él cuelga la cruz con el alfa y omega. Siglos de historia, ingeniería y naturaleza concentrados en un lugar imprescindible de nuestro viaje a Asturias.
El puente muy bien, hace unos años estuvimos en Cangas y ahora hemos querido ver aquellos recuerdos en la actualidad, todo era diferente excepto el puente. La queja es porque no nos aconsejaron el lugar adecuado donde comer. Por lo demás correcto.
Un a Asturias y no pasar por Cangas de Onís es un desperdicio, el puente romano está muy bien conservado, el agua del río cristalina y todo muy limpio, como Asturias en general. El pueblo es bonito y tranquilo.invita a un paseo y un buen cachopo.volveré sin duda alguna.